Bienvenidos a mi blog. He creado este por que tengo un montón de historias en mi mente que me gustara compartir. Miles de mundos y personajes siempre me acompañan, decidí, que era hora de hacer que fueran conocidos. Quiero, que sean capaces de expresar y soñar junto a mi. Espero, que les guste mi casa y tendrán una voz aquí. Mi cariño y amistad también.

lunes, 16 de mayo de 2011

El ladrón y la princesa. Capitulo 15

Bueno aquí esta un nuevo capitulo les deseo una buena semana y les mando un beso. Espero que disfruten de la historia.

Capitulo 15

Los planes de Kellen

Una semana después.



Inés Victoria Pazmiño.

Kellen casi bostezo mientras, su sierva se acurrucaba junto a él en la cama y empezaba a besarle el pecho desnudo. Ya estaba aburrido de la poca utilidad, que ella le prestaba, hasta como amante era mediocre.

Aún, no había pensado en un plan para que Darius mate a su dama y a la ejecutora. Cuando lo hiciera su misión terminaría. Había pasado tantos siglos intentado cumplirla, por un momento se sintió desolado. Ni las caricias de su nueva amante, lo reconfortaban. Ella, había empezado meterse en la boca su miembro. Por un momento dejo de pensar en sus planes de conquista y se perdió en el placer que la mujer, le proporcionaba. Minutos después, cuando obtuvo su liberación.

La mujer que estaba a sus pies, anhelante se puso encima de él y le dijo tímidamente

─ Te amo.

Kellen, se puso pálido. Sin decir ni una palabra, le acaricio como si fuera una mascota. Preguntándose, el motivo de que los humanos le dieran tanta importancia a los sentimientos. Hasta el propio Darius considerado un hombre frío y racional había sucumbido a ellos. Por un momento a poyo la cabeza en la almohada y cerro los ojos. La imagen de Rebeca Zor apareció en su mente. Su sierva y Pia le habían hablado mucho del amor que el hechicero sentía por ella.¿Cómo lograr que Darius mate por ella?
Miro a la tonta mujer que estaba en su lecho. De ella, no iba a recibir ningún consejo. Le empujo y le dijo sin miramientos.

― Vístete.

― Amor, ¿Por qué te marchas así?

Kellen, fastidiado gruño. Mientras cogía por el cuello a su amante.

― No, me presiones. Estas aquí, porque me sirves bien y me gustas. No, intentes ir más allá de eso.

La mujer, no pronuncio ni una palabra. Intento, no llorar mientras se vestía lentamente. A Kellen no le importo su dolor, tenía mejores cosas que hacer que consolar a una tonta enamorada, que apenas le era útil.

Minutos más tarde, llego a la guarida donde Pía, otras de sus siervas le esperaba. Ella cuidaba a Inés Victoria, que poco a poco, se restablecía.
La vieja hechicera, a pesar de lo graves de sus heridas ya podía caminar un poco y miraba a la ventana. No se inmutó cuando él llegó. A diferencia de sus otras siervas, no le temía.

― Veo, que estas mejor.

― Gracias, señor por su preocupación. Pero, no creo que ver como me encuentro sea el motivo de su venida.

― Me conoces, bien.

Ella asintió y volvió a mirar al jardín.

―¿Qué le preocupa mi señor Kellen?

Kellen se rascó la barbilla, antes de responder.

― No encuentro la manera de utilizar a Rebeca Zor para mis planes

Los ojos de Inés Victoria brillaron, ella odiaba a esa mujer. Respiro profundamente antes de responder.

― Las flores y ver como anochece, son mis únicos consuelos. Muchas veces nos olvidamos de las cosas sencillas, son las mejores y las más difíciles de conseguir.

― ¿Qué es lo que quieres decir?

― Usted, lo sabe. Solo tenemos que raptar a o envenenar a Rebeca Zor.

― Si fuera tan fácil, ya lo habría hecho.

― Mi señor, me recuerda a mi hijo. ― Dijo, la vieja bruja con dolor en su rostro. ― Él era muy impaciente deseaba las cosas de forma rápida. Las mejores cosas de la vida se demoran en llegar.

Kellen gruño.

Ella no le hizo caso y siguió viendo a la ventana por un momento.

― Es muy fácil envenenar, a una persona, en especial si se odia. Hay un hechizo en especial llamado Enregis, que solo la sangre de quien lo haya infectado o la rara piedra exxis lo pueden salvar.

Kellen toco el hombro de Inés Victoria, para luego hablar muy complacido. ― Siempre, es bueno contar contigo.

La vieja, lo miro a los ojos. Y respondió, complacida. ― Me honra, con su aprobación. El hechizo será complicado y muy largo. Como usted, sabe aun estoy convaleciente.

Kellen empezó a caminar hacia la puerta, solo se paró para preguntar.

― ¿Cuánto se demorara?

― Por lo menos cinco meses.

Kellen asintió. ― Cuento tu ayuda, si necesitas algo pídelo.

― Sí, mi señor.

― Cuando, todo esto termine serás recompensada.

― Mi mayor placer es servirle. Mi señor.

En el momento que, Kellen se marchó, la vieja se frotó las manos, pronto cumpliría su venganza y Sivcar sería destruido.




La princesa Catalina

Ni bien dejo a sus siervas Kellen fue en busca de la princesa Catalina. Si envenenaban a Rebeca Zor, Darius buscaría la rara piedra exxis.
La tenía el rey Vicente y su familia. De todos ellos la única a la que podía convencer a unírsele era la frívola princesa. Llego en el momento que la joven estaba aburrida en una de las innumerables fiestas a las que asistía.

Dejo que ella se le acerque. La princesa estaba a punto de dormirse. Iba a marcharse con su amante de turno. Cuando vio a un hombre muy apuesto al que no conocía. Hizo que fuera llamado con uno de los sirvientes, pero el hombre se excusó.

Furiosa con su desaire fue a verlo, para luego echarlo de la fiesta. Ni bien llego, el hombre dijo.

― La estaba esperando, Princesa.

― Si fuera así. Hubiera venido cuando le indique que lo hiciera.

― No soy un sirviente, que esta a su disposición su alteza.

― Entonces, márchese.

― No, lo haré.

― Entonces, me veré obligada a que lo echen.

― No, los llamara.

― ¿Pruébeme?

― Tal vez, más tarde Catalina. En este momento tenemos asuntos más serios que tratar.

La princesa intrigada y molesta preguntó ― ¿Cuáles?

―Convertirte en reina y vengarte del desprecio que Darius te hizo.

― Está, mal informado señor. Soy la heredera al trono y solo me unen sentimientos de hermandad con el pueblo vecino. Aunque no me importan sus habitantes y reyes.

Kellen rió.

― Te conozco, Catalina, no finjas. Sé, que tu padre va nombrar a tu hermano bastardo como su sucesor.

La princesa enrojeció.

― También, estoy enterado, que planeas matarlo con veneno suministrado por Inés Victoria Paz Miño.

La princesa gimió y se puso a mirar a los lados antes de volver a hablar.

― No tengo idea de que me habla.

― No me mientas. Estoy aquí porque te necesito y puedo ayudarte. Confía en mí y no solo Dumar será tuyo.

Catalina se estremeció. Ese hombre sabía demasiado de sus planes. Con una tranquilidad que no tenía pregunto.

― ¿Si confió en ti? ¿Qué me pedirás?

― Por el momento que protejas la piedra exxis y creo que esto te será de utilidad.

― Le dio a la princesa un frasco negro con veneno.

― Gracias.― Respondió ella guardando el frasco.

― Es indetectable y más poderoso que el que te dio la vieja hechicera.

― Tal vez, tu amistad sea beneficiosa.

Kellen apretó la mano de la Princesa y susurro.

―Esto no es una amistad. Es una alianza su alteza.

― Espero, que sea muy productiva.

―Lo sera, su alteza. Confié en mí.

Catalina tembló, algo en ese hombre no le gustaba. Pero, por el momento lo ayudaría.






7 comentarios:

Anna (princesa) dijo...

woooooooooo!! este capi no me deja indiferente ¡que perverso es Kellen! y ella su sierva lo ama ¡es la hostia! ay ay ¿como seguirá esto?

Besotes mi niña

FIBO dijo...

Que imaginación tienes amiga, me dejas a veces alusinado...te felicito por todas tus historias que no dejas indiferente...un besote

MariCari dijo...

Buuuhhh!! Malo está el cuento, ya veremos como se las apañan los buenos para no sucumbir a la maldad, tenemos 5 meses ¿no? pues entonces... vamos a hacer alguna fiestecita ¿nO? Todo no va a ser trabajar, je, je,,, por lo pronto el miércoles al Club de los pololos, je ,je...
Bss... niña... muy chulo como siempre!!

Iris Martinaya dijo...

Verás la que lían ahora estos. Menos mal que los buenos siempre van en el mismo carro y así se trabaja mejor, porque los malos, cada uno lo hace por sus propios motivos y al final...

Pasé a ponerme al día, que con todo el lío que tuve con el blog, no había podido. Me falta tu relato para el concurso Infectados. Mañana paso a leerte y luego a votarte.

Mil besos mi Citu y mucha suerte en el concurso.

Maria Carmen Martinez Molina dijo...

Menos mal que Catalina tiene dudas, espero que siga su instinto y no ayude al espantoso Kellen.
Besos, Citu

Irene Comendador dijo...

Por fin me pongo al dia con esta historia, y madre mia tengo el corazon encogido desde que la dice "Vistete" "que solo te utilizo" uuuff y ella ahi intentando no llorar delante de el
por favor que dura escena has relatado corzon, a ver como surgen las cosas que se ve todo muy de venir tormenta, jajajaj
Millones de besos mi citu, que te quiero millones guapa
Pasa buena semana

Adela/Mariola (SokAly) dijo...

Kellen es malo con ganas y ahora junto la ayuda de Inés y la gilipollas de la princesita la va a liar, pero bien.

Feliz martes, cielo.

Besos.

~Ade~