Bienvenidos a mi blog. He creado este por que tengo un montón de historias en mi mente que me gustara compartir. Miles de mundos y personajes siempre me acompañan, decidí, que era hora de hacer que fueran conocidos. Quiero, que sean capaces de expresar y soñar junto a mi. Espero, que les guste mi casa y tendrán una voz aquí. Mi cariño y amistad también.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Corazones en la niebla . Capitulo 29


Bueno  por fin pude poner  el capitulo de hoy, me  he peleado con mi maquina  desde  esta mañana . Espero que les guste  y les deseo un buen miércoles

Capitulo 29  

El  arma  de  la luz  y  oscuridad


Nicolas

Darius miraba a Ariel. Ella seguía desmayada mientras, él había sido herido por uno de los hombres de Aviel, no era algo de peligro, pero lo debilitaba. En realidad le preocupaba Ariel, que sobrevivía gracias a unas sombras puras que residían en su interior.El rato que aparecieron los ugis succionaron a la mayoría. Apenas respiraba y su cuerpo estaba muy frío debían llegar a lugar seguro y ver que hacer.


Sin embargo, la persecución de Kellen y sobretodo la de Aviel apenas le dejaba maniobrar. Había llegado a la isla Eirlia casi sin fuerzas.  Kellen le mando varios ugis Ariel se estremeció y se puso aun más fría. Gregory, Garnier y Rafael  salieron con  a prisa montados en unos deslizadores a ayudarla.
  
 Aviel  Negrui y   Catalina   montados en unas  naves  los perseguían y mandaban rayos. Kellen celebraba su victoria, desde un acantilado. Miro a  Lara que temblaba   por el posible castigo que recibiría al  no destruir  a Nicolás que escapo antes que   llegara  a la posada el amanecer.

Kellen, la miro  sin furia,  toco  su rostro  con las manos  como si fuera a besarla. 

─ Mi querida Lara, debería matarte. Volviste a fallar. ─  Se aproximó  hasta que  su boca casi tocaba la de ella. Le dio un beso    salvaje como queriendo  grabarse su sabor.


Luego de  unos minutos se separó de ella.

─ No me  falles  Lara, ve  ahora y mata Nicolás  Fritz antes  que pueda controlar el arma y me destruya.

Lara tembló, no quería que le pase nada a su señor,  Asintió  casi  con lágrimas en los ojos. Kellen sin soltarla le dijo.

─ Vuelve  a mí.

Lara le dio una débil sonrisa y se  fue a cumplir su misión.

Kellen extrañado por  esa debilidad en su carácter. No dejo observarla hasta que la perdió de vista.  Con una mueca de  fastidio  volvió  su atención  a  Ariel y Darius  que estaban a punto de ser atrapados. Diana, la dama blanca sería su siguiente victima  Aviel  capturo a su esposo.

Moley   llego justo  a tiempo para salvar  a Arik. Sintió que  alguien,  llegaba   a las celdas, se  tele transporto y dio la señal  a Inara  para que destruya   las naves.   Antes  de  rescatarla esa noche   había   dañado las naves de sus enemigos. 

Kellen se transportó a una de las naves Fue a verlo en la celda que había acondicionado para él y no se encontraba. Algo andaba mal, todos los mercenarios estaban muertos. Sintió un ataque en  la nave que estaba se bamboleó, tirándolo al piso. Fue a ver que estaba ocurriendo, las naves de los  mercenarios  habían sido destruidas.


Pero, eso era lo que menos le molestaba, vio como Nicolás entraba a una cabaña con el arma  en sus manos a punto de cargarla. Los ugis  de  Lara  aún no podían  destruir el campo  de fuerza  que el rey Epifanio.

Salto de la nave que iba  destruirse y grito.

─ Onliang

El campo de fuerza desapareció los niños  y todas las personas estaban a merced  de los ugis.

Nicolás  sintió  que la cabeza le explotaba  y algo se quemaba en su espalda. Se paró, tiro su mochila y miro el arma  arder. Fue cuando sintió un empujón

Annia   lo había tirado al piso.

─ Mueve el culo. Estamos siendo atacados. voy ayudar  con las defensas. Prepara  el arma.

Nicolás  apenas  tenía  fuerzas  para protestar,  se arrastró y tomo el arma que casi le quemo las manos.  Su mujer, tenía razón si quería salvarlos  debía tomar  el  extraño aparato que  les dio Bakar.

 Miro al cielo, su hermano era siendo atacado y las pocas personas que se salvaron del castillo  se estaban convirtiendo en ugis.  Annia  parecía  asustada  y Rebeca histérica  lloraba  al ver su marido a punto de morir y había salido del refugio.

─  Entra en la cabaña.

Rebeca ni sus perras  se movieron Annia la jalo y le grito.

─ Piensa en los niños, muévete Beca

Rebeca   reaccionó  al diminutivo  y corrió   con sus hijos a la cabaña. Fue ayudada por el rey Epifanio  a entrar.

El rey le grito

─ Muchacho, apurase. No piense en las musarañas y  haga  para lo que fue elegido.

El científico, quiso    replicarle, pero apenas podía sentirse en pie.    El arma estaba  quemándolo y sentía que le absorbía  la vida como podía   cargarla y  sobre todo utilizarla. Se cayó al suelo  de madera, apenas podía respirar.

Sintió que alguien daba palmaditas en el hombro.

─ Guapo,¿ estás bien?

Nicolás nunca había oído esa voz.

─ Nora, no trates  de seducir  al muchacho y no le hagas perder e tiempo.

─ Viejo estúpido, acaso  crees que soy como tu que ese acuesta con cuanta falda  ve.

El científico, no estaba  para oir esas conversaciones. Se forzó a pararse, tenía  que hacerlo por  Annia, su bebe,  su hermano, sus padres y sus amigos.  Siempre  se había sentido débil e  inútil. Pero lo superaba. Se dijo ─ Piensa Nicolás, tú puedes.

 El rostro de  Annia se le apareció en su mente, y por ella  se levanto y a pesar de dolor no soltó el instrumento mortal.

De pie   y con ella en las manos  dejo de  sentir malestar. Respiro  hondo antes de pedir.

─ Por favor, necesito las piedras  de poder.

El rey Epifanio le  dio la suya,  sin ni siquiera  hablarle.

La mujer  que antes intento socorrerle  le dio las otras  Nicolás creía que era  la abuela de Adela.

─ Yo tengo las otras.

El  tomo las piedras, pero el arma se había convertido en flor. La miro confundido y ahora ¿Qué hacía? Nicolás  volvió a decirse.

─ Piensa, piensa. Cerró los ojos y volvió a  ver la flor que hacía.

Por la diosa no podía dejar  que Annia muera, ni su hijo.   ¿Qué debía hacer?  Piensa , cree. Tu puedes  fuiste elegido.

Nicolás volvió a cerrar los ojos y cuando los  abrió miro el arma y  con  cada orificio para  las piedras.  Cerro los ojos y las puso esperando no equivocarse, casi sin voz dijo.

─ Faltan dos  piedras.

 Moley di Brinsi entro en ese instante y le dio una  piedra. Él la puso en el arma y volvió a sentir  que le quemaba todo el cuerpo y que por extraño que  pareciere se estaba cargando.  El arma luego de unos minutos  dejo  de  arder y él salio afuera Annia  y el resto de sus amigos intentaban proteger la cabaña ahora  era su  turno para ser el héroe. Salio con el corazón a punto de estallar y tanto  miedo que apenas sentía que  en cualquier momento  mojaría sus pantalones. Era su turno. Sintió  el viento en la cara,  motón  un deslizador  y fue  al campo de batalla.



2 comentarios:

MariCari dijo...

Bravo, bravo capítulo amiga... me ha encantado, ha sido brillante, y ahora va al campo de batalla... seguro que no pasa nada porque falte una piedra, verdad??? Venga a la victoria!! Bss...

Entonces te ha gustado el premio??? TE lo mereces amiga... cuídate!!

Iris Martinaya dijo...

Y que pasa con la piedra que falta?? quien la tiene? será algo así como el corazón de Nicolas? Me voy corriendo a por otro capítulo.

Besos