Bienvenidos a mi blog. He creado este por que tengo un montón de historias en mi mente que me gustara compartir. Miles de mundos y personajes siempre me acompañan, decidí, que era hora de hacer que fueran conocidos. Quiero, que sean capaces de expresar y soñar junto a mi. Espero, que les guste mi casa y tendrán una voz aquí. Mi cariño y amistad también.

viernes, 16 de marzo de 2012

El desierto de mi corazón. Capitulo 17

Bueno aqui les mando un nuevo capitulo, a pesar de que ando un poco enferma y me ha empezado doler la cabeza. Espero que les guste este capitulo y les advierto que tiene escenas picantes por decirlo así. Les mando un beso y les deseo un buen fin de semana. 

Capitulo 17 
 Más allá del miedo 



 Ana entro pero no se atrevía hablar con Urian así que aliviada de no encontrarlo en la sala fue al salón de música. Creyó que Harry volvió a colarse en su estudio. Pero, cuando abrió lo que encontró casi le dejo sin habla. Sentado al piano estaba Urian mientras mascullaba algo que no pude entender. Iba a marcharse cuando, él se volteó. 

 ― ¿Ana que haces aquí? 

 ― Yo, yoo, Estaba ― Ana se sentía tan nerviosa que empezó a tartamudear mientras retrocedía incomoda. Urian se paró como impulsado por un resorte, no quería desperdiciar la oportunidad de hablar con ella. 

 ― No te vayas espera. 

Ella quería salir lo más rápido posible, pero la desesperación en la cara de su mejor amigo, lo impidió. 

 ― ¿Por qué me evades? 

 ― ¿Quéee dijjjjiste hace un momento? 

 ― Yo pregunte, primero. 

 ― Dimmelllo tú. 

 Urian toco la mejilla de Ana y dijo. ― Pensé que estabas, con Diego.

Ana respiro  profundo antes de responder. ― Decidí volver. 

 Urian quería fumar, respiro fuerte y pregunto lo que tanto temía. 

 ― ¿Estás enamorada de él? 

 Ana parpadeo buscando entender lo que le decía su amigo. ¿Enamorada de Diego? Si no hubiese sido por la expresión de Urian se hubiera reído. ¿Podía estar celoso?, ¿sentiría algo más que amistad por ella? 

 ― ¿Qué fue lo que dijiste cuando entre? Contéstame. 

 Urian gruño, no había planeado decirle lo que sentía de esa manera, pero era ahora o nunca. 

 ― Por qué crees que te bese ¿Acaso no te das cuenta? Damn, (Maldición) Ana. 

 ― En español, por favor. 

 Se viró no podía verla salir de la habitación , ni siquiera sabía cuál sería el golpe a su amistad. 

 ― Yo… La habitación se quedó en silencio. 

 ― Mierda, hablo 7 idiomas y no puedo decir tres palabras. 

Ella le toco el hombro y se acercó. Urian se volteó y dijo en voz queda 

― Estoy enamorado de… 

 Ella acalló sus palabras poniéndose de puntillas y besándolo, dejándolo completamente confundido. Si le hubiera caído rayo, estaría menos asombrando Urian a pesar de estar desconcertado, respondió con pasión. Le mordió los labios deseando probar más y hundió su lengua en la boca de ella. Pronto Ana siguió su ejemplo, sus lenguas se entrecruzaron en una batalla viendo cual da más placer. 

Las manos del chef exploraban su espalda mientras el cuerpo de ella se enroscaba no dejando ningún lugar libre. Dejaron de besarse para respirar Urian toco su barbilla y le miro temeroso a los ojos Suavemente se acercó a su oreja y murmuro. 
 – Dime, que pare. 

 Ana con timidez toco su pecho y torpemente le quito un botón a su camisa. Urian tembló de deseo y le mordió el lóbulo de la oreja. Su lengua, probó su delicada piel mientras sus manos tocaban su espalda, cada vez deslizándose más abajo. 

La chica, prácticamente había abierto la camisa de Urian, su corazón temblaba con un tambor y sus manos sudaban nerviosas. Él dejo de besarle, toco suavemente su mejilla y luego volvió a besarle con suavidad, diciéndole con sus besos que no tuviera miedo acariciándola para tranquilizarla. También sentía temor pero, por nada del mundo dejaría ese lugar y esa oportunidad. 

El primer beso que le dio solo fue una leve caricia como pluma tentándola, luego volvió a besarla con más fuerza y pasión Ana acariciaba su torso y su espalda sus manos tibias rozaban su piel haciéndole gemir del placer. Él dejo de tomar su boca y se puso a pasar lengua por su barbilla y luego fue a probar su cuello. Explorando cada tramo de su piel, con delicadeza bajo a la unión de sus senos y los saboreo encima de su blusa de color rojo. 

 ― Eres deliciosa , ay demasiada tela aquí. ― Dijo señalando con su dedo índice la blusa de Ana. 

Ella, gimió temerosa y un poco avergonzada de ser desnudada por Urian, vería sus rollitos. Él pareció ignorar su miedo y con desesperación le quito la blusa casi la rompe por la prisa que tenía por desnudarla. Ana intento ocultar con sus manos barriga, agradecida de que aun conservaba el jean. 

 Urian quito sus manos sobre su abdomen y con suavidad acaricio su estomago primero con las manos y luego lo beso, encima de la tela dura del pantalón. Cuando abrió el botón que aprisionaba el estómago de Ana Urian exclamo. 

 ― No deberías cubrirte, je mooi bent, ik wil je zo, ik voel dat ik te verbranden.( eres bella. Ana te deseo tanto, que siento que me quemo) 

 Ana lo miro sin entender. Había términos en holandés que ya dominaba aunque, no entendía por completo el idioma. 

 ― Traducción. 

 Urian, soltó una risita y siguió bajando el pantalón mirándola con deseo.

― Cuando, estoy contigo estoy no sé en que idioma habló. 

 El jean cayó hasta las rodillas, él se separó un poco de ella para admirarla. 

Anna se sentía patética y abochornada. 

 ― Hace un momento te dije que eras bella y que te deseaba tanto, que me quemo. Pero, viéndote así, me doy cuenta que mentí. 

Ana retrocedió al oír esas palabras, el chef siguió mirándola con deseo antes de con voz ronca exclamar 

 ― Eres hermosa, no hay parte tuya que no quiera tocar y besar. Deseo sumergirme en ti hasta que este tan saciado de ti que no tenga fuerzas para mover un músculo. Luego de eso fue a donde estaba ella y de improviso le cargo en sus brazos mientras ella lo miraba confundida. La llevo hasta a un sofá y la deposito con gentileza. 

 ― ¿Vas hacer esso, que dijisste? 

 Él asintió ― Voy primero a desnudarte. Primero, te quitaré estos horribles zapatos. 

 ― Mis zapatos no son horribles. 

 ― Lo son.

 Urian acallo sus protestas besando nuevamente su boca Ana presiono la cabeza de su amante para hacer del beso más intenso fundiéndose en él, mientras las manos de su amante le quitaban el broche a sus sostén de encaje blanco. Ana sintió un poco de frió en la espalda y algo mareada cuando Urian dejo de besarla. 

 ― Esto, también debe quitarse. ― Ni bien termino de pronunciar esas palabras le quito el sujetador . Ella, se cubrió los pechos con timidez 

 ― Por favor, no lo hagas. Ana bajo las manos pero contesto. ― Bésame de nuevo. 

Urian se acercó rápidamente y devoro sus labios mientras una de sus manos bajas por su espalda la otra rozaba lentamente su pecho derecho. La muchacha agradecía estar sentada dudaba que pies la sostuvieran en especial cuando el beso término y Urian empezó a chupar su cuello mientras su mano acariciaban su pezón. Tuvo que cerrar los ojos cuando reemplazo las manos por la boca . Al principio gemía levemente hasta que no pudo contener el placer y sus gemidos se hicieron cada vez , más fuertes. 

 Él la miro con ternura y pasión le acaricio el rostro y volvió a besarle el pecho , para luego tocar con su lengua sus costillas y estomago se pasó gran cantidad de tiempo explorándola casi llevándola al orgasmo sin dárselo. Ana deseaba algo aunque no sabía que era. Urian lamía por encima de su tanga botón, cuando ella no pudo resistir más y grito. 

 ― Por favor. 

 ― ¿Por favor qué? 

 ― No sé. 

 ― Quieres, tal vez esto. ― Urian metió sus dedos por debajo de su prenda interior y suavemente rozo sus labios intentado meterse cada vez más profundo dentro ella. 

La muchacha, asintió sin poder estructurar palabra. Urian saco sus dedos y probo su crema, antes de decir. 

 ― No, era eso. 

 Ana lo miro borracha de placer y suplico . ― Por favor, Urian te necesito. 

 ― ¿Dónde? 

 ― Dentro de mí. Necesito… 

 Urian le beso en la boca, mientras con fiereza le quitaba su última prenda. Quería probarla deleitarse con su sabor. Sus manos penetraban el interior de su amante con rapidez y suavidad. Para no perder el control, dejo de besarla y se alejó del sofá. Se quitó los zapatos y el pantalón en segundos. Ana tenía lo ojos cerrados y respiraba con dificultad, cuando los abrió miro a su amor, completamente desnudo acercándose a ella dispuesto devorarla. 

 Ella, le sonrió esperanzada que lo hiciera. Urian volvió a besarle la boca, al mismo tiempo, las manos de Ana acarician su espalda intentando fundirse con él. Urian volvió a tocar su interior y ver si estaba preparada para él. Dejo de besarla y le ordenó. 

 ― Ábrete para mi Ana. 

 Ella abrió con lentitud las piernas y la cabeza de Urian se hundió en su interior. Ana cerro los ojos una sensación de plenitud se disparó en todo su ser al sentir la lengua de su amante profundamente en su cuerpo. Ni sabía que gritaba y que sus manos acariciaban la cabeza de Urian. El chef estaba complacido de que ella llegara al orgasmo, ya no podía contenerse más se puso un condón que siempre tenía para las emergencias le penetro lo más suave posible. 

 Ana grito del dolor al sentir algo duro partiéndola Urian le acaricio la mejilla con ternura, mientras le preguntaba. 

 ― ¿Estás bien liefde (amor)? 

 ― Bésame. Urian la beso con ferocidad, conteniendo el deseo de moverse . 

Fue la propia Ana quien meneó sus caderas para intentando estar más unida a él. Sin dejar de besarse se acoplaron hasta ser uno solo . La oscuridad inundó el salón de música, ninguno de los dos se dio cuenta y tampoco les importaba solo estaban interesados en dar y recibir placer mientras fundían su cuerpo y alma.



5 comentarios:

Anna Soler dijo...

woooooo!!!
Sin palabras. Sin aliento.
Este sensual capitulo fue puro extasis nena.
AL fin estan juntos, eso es lo que importa.
Un beso y mejorate

mientrasleo dijo...

Guau!
Menudo encuentro. Consigues que se acelere el ritmo de lectura junto a la urgencia de los amantes.
Estupendo, un beso

El Drac dijo...

Voy a tener que darme otro baño pero esta vez de agua BIEN helada para apagar este incendio

La sonrisa de Hiperion dijo...

Siempre estupenda amiga.

Saludos y buen fin de semana.

MariCari dijo...

Precioso... un momento bello y cándido, te ha quedado muy bien Citu, muy bien... me ha gustado... con esa sutileza que tú tienes... bss...