Bienvenidos a mi blog. He creado este por que tengo un montón de historias en mi mente que me gustara compartir. Miles de mundos y personajes siempre me acompañan, decidí, que era hora de hacer que fueran conocidos. Quiero, que sean capaces de expresar y soñar junto a mi. Espero, que les guste mi casa y tendrán una voz aquí. Mi cariño y amistad también.

viernes, 27 de julio de 2018

Lágrimas de Luna. Capitulo 16 ( tercera parte)

Hola  ¿cómo están? Esperó que les  guste   este nuevo  fragmento  con mucha  acción.


Capítulo  16



Ágata   se  levantó del piso con dificultad.  Tenía  que ir a  Escocia  para  ayudar a destruir  a  Úvatar.   Apretó los  dientes   para no gritar   por  el dolor  .  Cuando  oyó que alguien golpeaba  a la puerta.  Dudaba  que  fuera  Mercader   o  su perro  sarnoso.

Los  golpes duraron  unos segundos  más  luego  de  una patada abrieron la puerta.  Era  un hombre  de   dos metros  y  algo más   con el  cabello   claro  y unos increíbles ojos  azules.  Su rostro parecía era    de  facciones  suaves  y  bellas  como un  ángel.  Pero su expresión era  dura y  algo  triste. Vestían de  forma simple con un pantalón  y un   buzo  negro de  buena  calidad.

— ¿ Qué hace  aquí ? ¿  Quién es  usted?

—   Sígame.   El  señor     Rochester  quiere   verla.

Ágata  conoció  a Rochester  por su  fama y por la  gran rivalidad que tenía  contra   Adolfo  Mercader.

—  No obedezco a perros  guardianes.

Al  hombre   le tembló la mano  y un  tic  en el ojo  se  hizo  evidente.  A  Ágata le pareció que no estaba  acostumbrado  a  que le lleven la contraria.

 —  Es de suma importancia.

—   ¿  Por  qué desea verme?

Antes  que  el  gigante  le responda las  sombras  invadieron  el piso. Ágata  lanzó un gemido.  Su compañero congeló el piso, pero lo que le sorprendió a  Ágata  fue  que le  salieron un par de  alas   rosas  y azules  —.  ¿Eres   un hada?

Él no le  respondió   jaló a  Ágata  y le sujeto  fuertemente  mientras  huían  de   las  sombras.

Llegaron al ministerio  en cuestión de minutos.    A  diferencia  de la mitad  de Londres el edificio   aún seguía en pie  aunque estaba  congelado.    El  gigante  depósito a  Ágata  en el piso.   Entraron  en el edificio  unos   guardias  iban a detenerlos pero   el gigante  sacó una  credencial y los dejaron pasar.

Ágata  fastidiada  preguntó —  ¿  Qué desea  el señor  Rochester?

El  gigante  no   respondió,   sacó su celular  y habló  por  teléfono como  si las preguntas  de ella no le  importarán .  Ágata  enojada   volvió a  preguntar  — ¿Quién es  usted?  Tampoco  respondió, la hizo entrar  en un pasillo  en el que estaban  varios uniformados junto  a un hombre alto y  flaco  que  Ágata  reconoció al instante.  Firond  daba instrucciones    a   dos  hombres   que  cargaban   un extraño  aparato.  Estaba tan concentrado que ni siquiera la notó  allí.  Ágata  iba a hablar  con él  cuando  de repente  entró  en  atestado pasillo    un hombre  alto     flaco  y anciano.


 Ágata  miró  a  Maximilian  Rochester   por las  fotografías  y las  imágenes del  televisor. Aunque era  un hombre más  alto  con los ojos  azules lleno  de vida y una  expresión  burlona  en el  rostro.
— Señorita  Kapoor ,  señor  Bronwenir,  es  gusto  conocerlos  —.  Miró al gigante —  gracias, señor Smith.
El gigante   asintió.  Mientras  Firond   solo  hizo una mueca    Ayude  porque  soy  curador, pero deseo    cruzar  a mi mundo que está  en  peligro.
Ágata entendía  el deseo  de  Firond ,  ella se sentía   igual.  Miró  a su amigo si  se podía decir  así  la  relación  con  Firond  era    muy  compleja   no se agradaban pero se respetan  y conocían  ciertos  secretos  del otro.
— Señor  Bronwenir, sería  tan   amable  de  colocar  el dispositivo de protección  para  las  ciudades  aledañas a  Londres. Mientras  yo hablo  con  la  señorita  Kapoor  en mi oficina.  Luego atenderé  su  caso.
Firond     puso  los ojos  en  blanco  como  respuesta. Al mismo tiempo,   Rochester  tomó del  brazo  a  Ágata  y la llevó a  su oficina.  Ninguno  de los  dos  habló hasta llegar  allí. Rochester  le indicó  que  se sentará, a  pesar  de   querer  no  obedecer a su  anfitrión .  Ágata se sentó en un sillón  de color  negro  muy cómodo. 
—¿ Qué desea?  ¿  Por qué estoy  aquí?
  Tenemos  cosas que discutir  y no tenemos mucho tiempo.  Pronto las sombras   absorberán Londres.  Si   no queremos que suceda    el mismo destino  a  Reino Unido  y   a  Europa  debemos  parar  a las  sombras.
Ágata se movió incómoda en su  asiento    ¿  Por qué me dice  eso?
   Usted, advirtió  de  las anomalías  de  los portales  y  aseveró que  podría  ser  obra de  Úvatar.
Ágata tuvo deseo de negarlo, pero  de nada le  serviría  — Cierto. 
— Pierdo   tiempo necesario  en sacarle    palabra  a  palabra  señorita  Kapoor.   El motivo que está  usted   aquí  es  porque   es  allegada a los  13  guerreros.
— Esa  agrupación  fue  disuelta  y yo nunca pertenecí  a ella.
Rochester  se  levantó  y se  dirigió a un gabinete —.  Señorita  Kapoor,   le propongo  un juego. Le  digo una información secreta,  muy  importante   y  totalmente  cierto  y usted  hará lo mismo.
Ágata   nerviosa miró sus manos —  ¿Por qué accedería  al juego?
  Por  la vida  de sus amigos,  el destino  de  Reino Unido  y   el del mundo   se escurre  de   nuestras manos.  Sé que no confía  en  mí,   pero lo único que  me importa en este  momento  es   salvar a mi pueblo  de las  sombras.
Ágata miró  a los  ojos azules   de  Maximilian  Rochester.  El hombre  estaba  cansado y nervioso —.  Aunque  no confío  en  usted,  no tengo nada que perder.   Si  soy  amiga  de tres personas   que conforman los trece guerreros  y    el  ataque  de las sombras   lo hizo  Úvatar.  Sin  embargo,  no es  solo contra la tierra  los  5  mundos están en peligro. 
Maximilian tomó una  carpeta   del archivador, luego se sentó   complacido.
— Hace  unos minutos,  Adolfo  Mercader  se  rindió a   Azidahaka  uno  de los trece  guerreros  y  cómplice  de  Úvatar.  En esta  carpeta  está    la declaración  de  un  de los guardias  que  presenció el  hecho.
Rochester le dio a  Ágata  la  carpeta  y ella  miró  con asco la  declaración.
  Hable    con  Khalid uno de los  trece  guerreros y   vamos   a reunirnos lo sobrevivientes  en la isla  de  Skipe.   Rupert  MacGregor  ya se encuentra  ahí.  Sé que son amigos.
  Rochester  asintió,  luego de  su escritorio  tomó  una hoja  de papel  y la  firmó.  — Por la  dimisión  de  Adolfo Mercader,  estoy a  cargo  del ministerio  de magia   y hechicería.  Descubrí  esta mañana  que  su  usted     devolvió  de  forma  arbitraria  sus poderes  al  señor  Khalid a     Ne...
— ¿Qué piensa hacer  con esa información?    Le  interrumpió  Ágata, lo hice porque  necesitamos a todo guerrero que pueda ayudarnos.
  Muy cierto,  pero  es   peligroso  actuar  sin   la  aprobación del ministerio. Tenga —  Le dio un papel  en  el que el ministerio  aprobaba    que se hayan devuelto los poderes   de sus  amigos.
  ¿ Por qué está  haciendo eso?
  Ya le dije  quiero salvar a mi país.    Solo  le pido una condición De ahora en adelante  los trece guerreros    serán ayudados por el ministerio.   No tengo más que un equipo  que   asignarle  y al  señor  Smith.
  ¿Al hada? 
Rochester  asintió  y antes  que pudiera  responderle  . Llegó  Firond. El  elfo deseaba  crear  un   pasadizo para   marcharse   a  mundo.  Sin  embargo,  Ágata  tenía otros planes  cuando estuvo relativamente a  solas .  Recordó a  Firond    que  conocía  uno  de sus  secretos más importantes.  Firond  de mala   gana  hizo un pasadizo  a  isla de  Skipe.  En el  que cruzaron  Ágata  ,  Firond el señor  Smith  y  un grupo de soldados. 







Azidahaka estaba    atrasado  ya   en algunos puntos    de los  diferentes mundos las  sombras dominaban todo.  La  culpa  fue   de  ese  político  de cuarta  lo hizo demorarse  en firmar.  Azidahaka siempre tenía un plan  alternativo  si   fallaba  el plan de  Úvatar de conquistar los mundos .  Él  podría huir.

Miró  a su presa  era  una  chica de  dieciséis   algo  flaca pero con  buenas  piernas.

Ana sonrió  cuando sintió  que  alguien la observaba.  Con  extrañeza  se dio cuenta de que   era  el mismo  hombre  de  cabellos    negros  y ojos  color  chocolate   que   miró  rondando  la  puerta  de  su  colegio.  El hombre misterioso  no estaba solo,  el rubio con chaqueta  de cuero  negra     lo acompañaba.   Casi se  desmaya  al  ver  que  el rubio  tenía  un  arma   y  que se  le   acercaron de  forma sigilosa. Temió  que  los secuestren,   Ana miró que  el  estacionamiento  estaba  vacío.

Agradeció que su hermana  le obligó  a   tener   un  aerosol  de  gas pimienta.  Nerviosa  se aproximó a su   amigo mientras  que  buscaba    en su mochila  el gas  esperando no ser  sospechosa.   Los   dos   hombres   los  rodearon por  detrás. El  rubio enorme   dijo  con  un ligero acento — Ven  con  nosotros.

Ana  en lugar  de  responder   roció    gas pimienta  al hombre  de  los ojos  negros.  Mientras  sorpresivamente   Ramoncito   le  dio  un  golpe  en la entrepierna al gigante rubio y le gritó — corre  Ana.

Ella  lo hizo   a  pesar  del miedo  y que su  corazón   latía sin control.  Tuvo algo  de  temor  que   se  desmaye, pero solo siguió corriendo.  Estaba segura de que  el hombre  misterioso  iba   detrás  de  ella.  El único pensamiento que  tenía mientras  huía  era conseguir  ayuda  lo más  pronto posible. Miró  a una mujer  gorda     vestida  de  rosa  que  le  recordó   al personaje  de  Umbrige  de la  película  de  Harry  Potter.

Casi sin  aliento   Ana    se  aproximó  a   la  mujer —. Necesito ayuda,  me quieren  secuestrar.

La   mujer  le  dio una  extraña  sonrisa.  Azidahaka     estaba  feliz , por fin   tuvo algo  de  suerte.  Raptar a  Ana  Bolaños  sería  muy  fácil.

 — Lo sé.

Ana sintió  un    escalofrío    en   la  espalda, miró    alrededor  en busca  de alguien más.  Era  extraño para  ser  viernes  en  la tarde   el parqueadero  estaba  desierto. ¿Ana  se preguntó cómo estaría  Ramoncito?  ¿  y en dónde  estaba  su  secuestrador ?

Caminó hacia la  mujer    mientras  abría  de nuevo su mochila  y  buscaba  su celular.

— Ana,  no hagas  eso. Es perder  tu tiempo, nadie  puede  salvarte.

Ana  se quedó sorprendida al darse cuenta que la mujer  conocía   su nombre .  Tenía ser  también   parte  de los secuestradores. Debía  huir,  lo más  rápido posible.  Retrocedió sin  dejar  de  mirar   a  la  mujer.  Azidahaka  alargó  los   brazos   y  empezó  a  transformarse  en pulpo  enorme.

Ana  no podía creer  lo que le pasaba,  debía ser  un sueño.  Los  tentáculos  del pulpo  iban a atraparla; sintió  que  alguien  le  jalaba.  Era el hombre  misterioso.  Ella intentó darle una patada.

— No hagas  eso.

Ana  no le hizo caso.



La   mujer parecida a  Umbrige  había  cambiado asemejándose  a    Úrsula  la villana de la sirenita.  El pulpo  seguía  creciendo   y  golpeando  el pavimento   haciendo  que la tierra  tiemble.  Un   olor    a azufre   impregnaba  el ambiente Ana  no sabía  qué  hacer.  El hombre   le sujetaba   fieramente   que apenas podía  respirar.

—Deja que me lleve a  Ana.  De nada  te sirve luchar ,  cerebrito.

—No  soy un traidor y  cobarde ,  como  tu Azidahaka.

El  demonio  se agitó   volvió  a transformarse  en  un   ser  de  tres  cabezas.  La tierra  siguió  temblando  y  de ella  salieron  grandes   estacas .  El  hombre  de  cabellos  negros    trepó  a una  camioneta  cargando a  Ana  como  si fuera    un saco  de papas.

Blake  soltó  a  Ana  en el  cajón  de la  camioneta, meditando las posibles  vías  de  escape.  Ana   aún con  el aerosol  en la mano   quiso apuntar  al hombre misterioso, pero temblaba demasiado.

— No me ataques. Estoy aquí para protegerte.

Antes  que  Ana conteste  una  gran estaca perforó    el  auto  Blake   tomó la mano   de la muchacha  y  la  sacó  de  automóvil.

El  demonio de  tres  cabezas  y  con cuerpo    de   pulpo  gritó —  No puedes huir  de las  sombras.

Blake   gruñó  y puso  a  Ana  en el suelo luego le dio una  extraña  arma—. Ten  esto  te protegerá de  las  sombras. Aprieta   en el botón  rojo a  las  sombras y las congelas.

—¿Sombras?

Blake le  señaló  el piso  y los  carros  que  se volvieron  negros  sin color  y  voltearon   a perseguirlos aunque no tenían ocupantes.

—Ve  al ascensor,  mi amigo  te  espera  .

—   No me iré. No puedes  enfrentarte  a ese  demonio solo.


Blake  pensó que  de nada le serviría   discutir .

—Congela  todo    lo pueda tocarte  no  dejes  que      nada  te  toque.

Ambos corrieron mientras  Azidahaka    los perseguía  Ana  estuvo a punto de  caerse  y  el hombre  misterioso  le ayudó  a no resbalar.  Llegaron     a donde  estaba   El hombre  rubio  junto  a   Ramoncito que   estaba  atado  y  dormido.

—Debemos  irnos.

— No  van a dejar  a mi amigo aquí.

—Azidahaka   nos pisa los  talones.

—Tengo las motos,   pero no sé  cómo vamos     a escapar     la parte  de  atrás esta toda infectada  y  Azidahaka  estará   muy  pronto por aquí.

Blake  señaló las escaleras.

— Dijiste que no debíamos hacer escándalos.

Él  cambia formas   levantó los hombros. Miró  a  Ana  que estaba   atendiendo  a  Ramoncito.

—Monta la moto.

—No, me iré sin mi amigo.

—Llévalo  Helmunt,

—Pero.

Oyeron  a  Azidahaka     a punto de  venir.

— No hay tiempo  de discutir.

Ana  montó    junto  a  Blake. Y  fueron     se fueron por las  gradas      de la escalera —  Por  cierto, ¿cómo te llamas? ¿  quién me persigue  y  por qué?

— Me  llamo Blake,  el resto  te lo cuento luego — dijo incómodo     el lobo.

Entraron a la primera planta  del centro  comercial  que  todavía  no estaba infectado las personas  los miraban  como bichos  raros.  Ellos  salieron a la calle  sabiendo que no podían ayudar     a nadie y  que corrían por   sus vidas.
Esperó que  les guste este  capítulo .  Les deseo un buen fin de semana.







6 comentarios:

Ramón Berenguer dijo...

Mucha accion y muy interesante.Es normal que Ana no sepa de quien fiarse pero Blake la queria salvar y por ahora la ha salvado.Muy emocionante,me ha gustado mucho.Besos.

JUAN FUENTES dijo...

Eres una escritora con mucha imaginación

Ignacio Alfonso dijo...

Qué secretos conocerán Ágata y Firond el uno del otro? Como las sombras avancen hacia Europa pueden llegar a España:)) Si Azidahaka es cómplice de üvatar solo son válidos 12 guerreros.
Bso

mariarosa dijo...


He pasado a saludarte y me he encontrado con otro capitulo, muy activo y donde tu fantasía hace volar y sorprender al lector.

Muy buena semana,

mariarosa

Sunako Chan dijo...

Hola Citu! Nuevo capítulo en la que aparece Blake y Ana, estoy super feliz aunque no sé porque he tenido un deja vû. No obstante, no diré nada espero que Agatha esté bien junto a Maximilian. Bueno comienza la acción espero el próximo capítulo. Que tengas una gran semana! Un besote!!!

Lourdes dijo...

¡Hola Citu! Ya estoy por aquí. Estoy con algunos problemas pero por fin puedo leerte. Se que me falta un capi más para ponerme al día.
Me ha encantado que este Blake, el lobo. Te agradezco que compartas tu hermosa novela amiga. Un beso enorme.