Bienvenidos a mi blog. He creado este por que tengo un montón de historias en mi mente que me gustara compartir. Miles de mundos y personajes siempre me acompañan, decidí, que era hora de hacer que fueran conocidos. Quiero, que sean capaces de expresar y soñar junto a mi. Espero, que les guste mi casa y tendrán una voz aquí. Mi cariño y amistad también.

viernes, 10 de agosto de 2018

Lágrimas de luna . Capítulo 17 ( Segunda parte)

Hola  ¿cómo están?  Hoy les traigo un nuevo  fragmento esperó que les  guste.  Serán testigos  de como se  salva  Amelia. 

Capitulo 17 

Nessa   apenas  recordaba  cómo hacer  un portal .  No ayudaba  tener   a  su  esposo  Kalevi mirando sobre  su hombro  y aconsejándole  como si  él lo hubiera hecho  alguna  vez. Por  lo menos  Luisa, estaba  dormida  o  más  bien  congelada,  porque  se  le  paso la  fuerza  del encantamiento  .  El  celular   vibró   dentro de  su pantalón  de  tela   color   lavanda.  
Un poco preocupada   tomó el teléfono  sin  dejar  de hacer  de mover  con  la mano derecha  una poción  verde   que para  ella  estaba  muy   aguada. 
 — ¿Hola? 
— ¿ Con quién hablo?
—  Con Lin.
—  O perdón no te  reconocí.  Estoy  haciendo  la poción para abrir puertas.
Firond  miró  a la pantalla  plana  Úvatar   se  había   cortado  y  de su  sangre  surgieron  horribles  flores  que    rojas  llenas  de sangre  que explotaban unas  rocas  de  fuego. como si  eso   no  fuera  suficiente, enormes  tornados   se aproximaban a la  casa  de  Nessa. 
Muy  pronto   destruirán el campo de   fuerza  que protegía  la  casa  de  Nessa.  Sin tiempo  que  perder    se  dirigió  hacia  su  mochila de  color  negro  que estaba  en  el fondo del  salón.  Sacó  unos  troopers   blancos      que tenía  de colección . Suspiró con pesar. 


Oyó que  Nessa  y  Lin  hablaban que la pócima estaba  aguada.  Firond  movió la  cabeza  con desagrado y  gritó  — Dile que no  se olvide de poner tierra  del lugar.  Has  pronto la pócima  Úvatar  está  a punto  de  volar   el lugar.
—  No puedo irme   sin   Amelia  y los otros.
Firond  en lugar  de  perder  el  tiempo   discutiendo  con  Nessa  abrió su pasadizo.  Era  muy  pequeño para  pasar.  Por  lo que lanzó  un encantamiento  a   sus muñecos  y los  hizo  ir  junto   con  una máquina    que trasladaría    todo ser  viviente a  la  isla. Esperaba  que  diferenciará  a las sombras. 
Nessa  gritaba    a  Firiond  y  a  Kalevi por  igual .  No dejaría   a  Amelia   ni a  los otros.   Fue  cuando miró  a un pequeño soldado blanco.  Al principio pensó que estaba  loca.  Luego se  acordó de la afición  de  Firond   por la  guerra  de las  Galaxias.
Fue  cuando  oyó    un estallido  y  supo  que  el  campo de  fuerza     que les protegía   fue  destruido. La imagen de  su hija  y  su  esposo    pasaron  por  su mente.  Iba a morir,  pero lo que le afecta  era  que   falló  a  Amelia  y  a sus  amigos. Sintió  que  algo  le  jalaba   y la succionaba  como  si fuera   una  naranja   en un exprimidor. 
Algo mareada   y   muy  golpeada   apreció    en un lugar  que  no conocía.  Nessa   tenía  rasguños  en  sus   brazos y en rostro.  Su  esposo  estaba  a su  lado   se  fracturó  el  brazo  izquierdo protegiéndola  de  un enorme  tornado  que  destruyó  su  casa.   Su mirada   se  posó  en  el  pequeño cuarto      con  paredes  grises  en  el que se encontraba.  La  habitación  tenía  unos  anaqueles  de   color  negro  en el  que  estaban   varios  frascos  y   medicinas.   En la habitación  contigua  se encontraban  dos  niños  y  doña  Luisa  que había  sido  sedados  antes  que   los   tornados   de  Úvatar  atacaron el inmueble  y la extraña máquina de  Firond   los  trasladará a  un lugar seguro. 



El curador   se   acercó  a  revisarlos  .  Lin  estaba  ocupada en pasillo  principal  esperando que lleguen  los  elfos ,  demonios y  dragones.  Nessa    se encontraba sola   en  la  enfermería con  su  esposo. Pensó  que  perdía  el tiempo  atendiendo   tan pocas  heridas,  en  lugar  de   hacer  un portal para  rescatar   a  Amelia,  Heli y  Ana.
A  pesar  de sus  preocupaciones  Nessa sonrió  al  ver al  hombre   que   iba  a  revisar    sus  heridas. Era  su mejor  amigo  y  para ella  era como su hermano.
—¿Firond? 
Un  hombre   alto,  flaco  con  pelo  corto  y   cara  de presumido.  Se acercó   a  Nessa  y  la   miró  con adoración . Odiaba mentir , pero  con ella  era  la mejor  forma de  resguardar  su amor  prohibido  y no correspondido.   Miró  con desdén  y algo   de envidia  al  humano  con   el  que  Nessa  estaba  casada.
— Parece  que  el mundo  de los  humanos,  te ha hecho  mucho  daño. Yo que esperaba   que  te  hayas  cansado de  los insípidos   humanos.
Nessa  puso   los ojos  en  blanco. Y lo golpeó en el hombro.
—  No,  te  comportes  como un idiota ¿ Qué haces  aquí? 
—El demonio  de  ojos  verdes me raptó  y llevó  aquí.
— ¿Quién?
— Ágata,  esa  hechicera es un peligro.  Estaba    en el ministerio por  mi investigación.
Nessa  soltó un quejido  por  sus magulladuras.  Había  rumores que entre investigaciones   Finrod  compraba papas  fritas, coca-cola, refrescos  de cereza   y   libros  de mangas,  anime  y cómics.
 Firond   se  acercó   a  Nessa  con  prontitud  y  se puso  atenderla  a  pesar   de sus protestas.  Luego se dispuso   a curar  al esposo de  su amiga.


Sebastián  colgaba  como  una  bandera  mientras  Úvatar  furioso  empezó a formar  unos  tornados  para destruir  el campo de  fuerza. Con  dificultad   pudieron ayudar   a  subir  al  interior  del  vehículo a  Sebastián   que  se apretujó  con los demás pasajeros. Temiendo que el gran  San Bernardo  lo  muerda.
Sinclair   bajo  aceleradamente  el  carro  y  tiró  al piso  Sebastián mientras  Zhara y  Amelia    se le iban encima.  Dejando  los  pulmones del pintor  sin aire .   Luke  con su poder  reforzaba   el  campo  de  fuerza  mientras  Khalid  desde  la  ventana  dispara    con su  arma de hielo.
 — Disculpa —  dijo  Zahra  y   volvió  a su  asiento  al  igual que  Amelia. Sebastián  se sentó  esperando no  caer  de nuevo.
Zahra  miró  un rato a  Amelia —.  La  muchacha  temblaba    con miedo  de que  Úvatar mate a  todos  para  conseguir  su alma.
Zahra   le  tomó  las manos —.  No dejaré  que nada  te pase, ninguno lo hará. Les  presento a  Khalid  señaló  al  hombre  de ojos  negros.
Khalid  con timidez  les  dijo  — hola.
Luego  señaló   Luke  que   estaba  algo  pálido y  simplemente les saludo  con  la mano.
Zahra  miró por  un  momento  a la  ventana  preocupada,  pero siguió presentado a sus  amigos —. El que  conduce  es   Sinclair y  el perro se llama  Niebla.
Antes  que  Sinclair   hablara  sintieron un golpe  fuerte    y otra  vez  Sebastián   cayó  al piso,  lo peor   es  que Luke  se  desmayó.
— Pronto  el campo  de energía  va a ceder  y los  tornados    nos partirán en dos . —gruño  Sinclair  apretando el acelerador.
 A lo lejos  Amelia  oía  a  Úvatar  gritar  su nombre.
—  Ven conmigo  Amelia.
Antes  que ella  pudiera  decir  nada   Sebastián  arrebató  el  arma   a Zahra  y  respondió —  Sobre mi   cadáver.
— Eso se puede  arreglar .
Úvatar mandó un rayo con toda su fuerza que destruyó el campo de fuerza, pero no hirió  a  Sebastián.
Khalid  recordó  sus  viejas lecciones   y  con un hechizo hizo  caer  rocas  a Úvatar  y género un nuevo campo de fuerza, no tan fuerte como el que  tenían.
—  Muévete  Sinclair,  debemos llegar   con  Nessa  pronto.
Cuando llegaron no  esperan   no encontrar  a sus  amigos  en lugar  de la  casa  de  la  solo vieron  ruinas  que los tornados  y las  sombras  dejaron.  Solo un  carro rojo  se  mantenía  en pie desafiando a  Úvatar.
—Rindente,  Amelia.
—  ¿Salvarás,  a mis  amigos?
—  Sí.
Niebla  ladró mientras   Sebastián que estaba  al otro  extremo del vehículo  grito  — no lo hagas.
Amelia  dio un   beso  volado  a  Sebastián  y   se movió con dificultad  a   la puerta  para  saltar.
—  Debo hacerlo.
Khalid que estaba  en la puerta,  no  dejó pasar  a Amelia.
— No lo hagas.  Es  una mentira, no nos  va a ayudar.  Él siempre miente. Si debemos morir. Prefiero hacerlo luchando.  
— No puedo dejar  que mueras  por mí.
 Khalid  miró  a  Zahra  y   a sus  amigos.  — No  voy  a dar mi vida solo por  ti.  Es  por las  almas que no pude  salvar de  Úvatar, todos los  sacrificios  de mis  amigos  y  mis jefes.  Eres  importante, pero no  eres mi razón.
Amelia se escapó  del agarre  del hombre de  ojos  negros  y  abrió   el carro.  Estuvo a punto  de  saltar,  pero no lo hizo.  Recordó   la muerte  de su profesor, las muchas  muertes que Úvatar le mostró    por meses  y  supo   que  él no cumpliría  su palabra.
El viento    despeinaba  su pelo  y hería  su rostro.  Por  un momento pensó en su hermana y  Sebastián. Luego con una  resolución  que  no esperaba gritó  — Nunca me rendiré, maldito  cobarde.
Como le  pasó  la otra vez  una energía   se disparó  de  su cuerpo,  pero  a diferencia  de la  vez  anterior  Úvatar  estaba  preparado  con un movimiento   de sus manos  los miles  de ojos rojos    fueron  una barrera  para    la   energía  de  Amelia.  La muchacha  se  sorprendió al ver  lo  que  ocurrió.
—Pensaste  que  me ibas a vencer  tan  fácilmente.  Vas a ver  como mató  a   casi todos  los que están en ese  vehículo menos  a  Zahra y  a tu noviecito a ellos  los  mataras  tú,  cuando acabe  contigo.  Tu  alma  será  mía  y  solo  serás  un arma  destrucción.—Nunca.
Cientos  de púas  rojas     se dispararon hacia  Amelia.  Khalid   hizo una  barrera  de  fuego que  fue  disipada  en segundos, por lo menos  Amelia  estaba  segura  el   automóvil.  Ninguno  de los  ocupantes   sabía qué hacer  o  adonde  ir.  Por más  que  Khalid  y Luke  tuvieran poderes  élficos  no  tenían la capacidad  de  crear  un portal.  Ambos  estaban  agotados  creando  un  campo  de  fuerza  a punto de colapsar. Solo les quedaba  huir  sin rumbo  fijo.
Fue  como  si Khalid  hubiera llamado  al ser   que más necesitaba  en ese  momento. Montada  en una  nube  blanca    Aher  atravesó la oscuridad  brindando esperanza  a los ocupantes  del  carro rojo.    
— Pensaste  que  todo iba a hacer muy fácil.
Úvatar  no esperaba  ver  Aher  cara a cara.  Con  añoranza   recordó    la época  en que fueron  amantes.  Por  un momento sintió   como si un rayo  le  atravesará el corazón.
—¿Vas a enfrentarte a  mí?  Una  vez  juraste  amarme.
— Tú rompiste,     tus promesas  mucho antes.  Sé que no puedo  vencerte , pero   en ese  automóvil  está  alguien por  el que daría hasta mi último aliento.
Khalid  desesperado grito — Narmolanya,  ( madre) no lo hagas.
—  Adiós, Isildur  te  quiero  mucho, eres mi luz —. Luego  de  decir  eso hizo   un portal que llevó     al  carro rojo a la casa de  Luke.

Esperó que tengan un genial fin de semana y  que les  haya gustado el capítulo 









8 comentarios:

Ramón Berenguer dijo...

Por los pelos no se ha rendido Amelia,pero de la palabra de Uvatar no se puede confiar.Aher es valiente y ha ayudado mucho.Sigue muy interesante,me ha gustado mucho.Besos.

JUAN FUENTES dijo...

as reacciones de los personales de tu novela,son frutos de tus elucubraciones

Ignacio Alfonso dijo...

Úvatar tiene un corazoncito que añora tiempos pasados con Aher. Ella debe aprovechar esa debilidad de su examante.
Bso

Sunako Chan dijo...

Hola Citu! Espero que estes bien. Vaya es un no parar, pero me resulta familiar. Pobre Khalid! No obstante, me alegro que en esta ocasión pudieran escapar casi todos. Bueno sabes que Firond es insufrible a su manera. La verdad un capítulo lleno de acción. Buen domingo, y mejor semana! Un besote!

Ana Meyling dijo...

Holaaaaaaaaaa!
Como siempre genial el capítulo, aunque creo que tendré que volver a leermelo de nuevo todo jejeje
Un besito, nos leemos^^

Dezazu dijo...

Estupendo capitulo como siempre!!besos

Lourdes dijo...

¡Hola amiga! Por fin he podido ponerme al día con tu novela.
Me ha encantado, sinceramente tienes una imaginación prodigiosa.
Uvatar me tiene intrigada. Mucha acción en el capi y muy interesante la trama.
Te felicito amiga. Un besazo grande y buena semana.

yessykan dijo...

Wow, cuanta accion!
Nessa y Lin hacen lo posible, pero la pronta reacción de Firond y sus muñecos fue genial. Úvatar no se da por vencido, pero que empecinado es!
Menos mal que Amelia no salto, no le creyo, sabiendo muy bien lo tramposo que es. Justo a tiempo aparece Aher , tremenda sorpresa para el demonio de Úvatar. Que buen final, que nos deja en suspenso.
Que tengas un bello dia!