Ilumina mi corazón. Capítulo 24.(segunda parte)

Hola   ¿cómo les  va? Este  fragmento    veremos  si  Sebastián  y  Amelia pueden huir  espero que les  guste .

 Capítulo  24

Sebastián no entendía  nada de lo que estaba  pasando, parecía una pesadilla  maldita. Sin embargo, era  real por  más  que  deseara  que  fuera  una pesadilla. Recordó lo que  Meche y su madre   le  avisaron horas antes  . Tomó  la mano de  Amelia  y  prácticamente  la  arrastró   por  el camino.  A lo lejos  oyó  a  una    mujer  advirtiéndole  que   huyera junto  a  Amelia, aunque  no era necesario.

Zahra    tembló al ver  a  Úvatar  no le importó que  le amenazara, pero temía por la vida   de sus  seres queridos.

Oyó  a  Luke  gritar —. Pon el  arma  en  neutro ,    luego  busca  en  el botón verde y  ponlo al máximo; así podrá congelar,  si las  sombras   te topan  estas  perdida, Zahra.

El piso de  cemento  se  volvió   color  negro  igual  que los  árboles que extendieron   sus  ramas  para  infectar  a  Zahra. Los  pájaros  hasta los  bichos   los perseguían sin descanso.  Zahra   no perdió el tiempo  en mirar  y congeló   el piso: las  sombras  por  un momento  no pudieron  avanzar. Luke miró por última   vez  a la  recolectora y pensó que le hubiera  gustado conocerla mejor.

— Huye  Zahra.

—Pero Luke, no puedes enfrentar solo  a Úvatar.

Luke miró como las  sombras empezaban a descongelarse.

— Huye  Zahra, no te preocupes por  mí.

Zahra   miró  a Luke  y corrió en  busca  de  Amelia  y Sebastián sintiéndose  culpable   y  con  deseos  de llorar por abandonar a un amigo.

Úvatar  rio,  pero  dejó escapar a  Zahra.

—Crees  híbrido  patético  que podrás  vencerme.

Luke miró a  Úvatar  y  el entorno que lo rodeaba.  El aire  era  tóxico  y     solo faltaban  minutos para convertirse  en una  sombra. Esperaba  tener  un buen  blanco  de  Úvatar para disparar  su arma  y pararlo  aunque  sea  un momento. Con  resolución  y  ocultando su  miedo  gritó a  su tatarabuelo.

— En una pelea  cuerpo a cuerpo .  Pero tú  te rodeas  de sombras ,  de hechizos y de  traidores.  Eres  solo  un  cobarde  que  no  puedo  vencer  a nadie  solo.

Úvatar   molesto  hizo que las sombras abandonen a Luke.

—Si quieres una pelea  ,  te la daré y  te venceré.  No eres más  que   una escoria.  Me avergüenzo  que   algo de mi sangre  corra por tus  venas.   

Úvatar  descendió  de  una nube  negra,  era   un esqueleto  enorme  de dos  metros   con los   ojos  rojos   y la boca  chorreando  sangre.

— Esa  es la diferencia  entre tú y yo.  Yo me  acepto,  deje   hace mucho  tiempo   de desear  ser alguien mejor o peor. Simplemente soy feliz  y trato  que la  gente que me rodea lo sea igual.

Las  sombras  dejaron  el piso  de   cemento  limpió.  Úvatar  miró  a   su pariente  como si apestará, para  él  Luke era  lo  más  bajo  que alguien podía llegar.

Luke    ni  bien  observó  al  demonio  lo apuntó  con  su arma.

—¿Crees  que con  esa  porquería  de arma podrás  vencerme?  No querías   un  combate  cuerpo a cuerpo.

Luke   esperaba  que  Zahra,  Amelia  y  Sebastián pudieran  huir.

—Si te  toco   me  convertiré en una asquerosa   sombra.

— Ni  aunque me  rogaras  te  dejará ser parte    mi  .  Tu alma  es   basura,  eres  un perdedor.

—El perdedor eres  tú.  Vives lleno  de odio y amargura.  Si muero aquí,   tengo amigos que me lloraran.  Cuando mueras   no habrá nadie  que lamente tu perdida.   

Úvatar   estaba convencido que perdía  el tiempo  en enfrentar   a  Luke  Drufrew  pero hace   mucho  que   nadie  lo enfrentaba a  la  cara.  Hace  tanto  tiempo  pasó como un alma  en pena,  para  luego  volver  a ser libre.   Sin embargo,  era la primera  vez  que  en  verdad  sintió   algo  de paz.  Hoy no  solo peleaba por   callar  a ese  tonto.  Lo  hacía  porque  era  de  volver  a  ser  el gran Úvatar, el innombrable.  Tenía que probarse a  sí mismo,  ser  dueño  de su propio destino.

El cielo  estaba    negro  las  sombras   los rodeaban Luke   podía  sentir    el deseo   de apoderarse  de  su alma. A lo lejos   se veían  rayos  rojos y el olor  azufre  y sangre  revolvieron el estómago de  Luke.

Úvatar  tronó los dedos  y salieron dos  espadas de la nada.

—Pelearemos  como mis antepasados.  Hoy es tu  último día  Luke.

Luke  estaba  de acuerdo con Úvatar,  pero   si iba a morir,  lo  haría peleando.

Úvatar tomó su espada  y esperó   a  Luke  hiciera lo mismo.      El combate  empezó  de forma lenta Úvatar  tenía más  experiencia y siempre  fue un guerrero  implacable.  Desde  el principio  del  duelo de  espadas    controlo el terreno.

Luke  a  pesar  de  tener   formación  no era  rival para  el  demonio  elfo. Los movimientos  de  Úvatar  eran precisos .  Luke  lo  había  evadido    tres veces  y  cuando  quiso   atacarlo     apenas lo tocó.

—Ya  he perdido  demasiado  tiempo  por tu  culpa —. Luego de decir  eso  dio una  estocada     a  Luke  en  el  estómago.  Él  se  desplomó, por lo que  Úvatar  le  clavó  en el corazón   su  espada.  El  demonio  elfo ,  le  escupió en  el  rostro de  su descendiente.

— Te  vencí  y contigo  morirán mis  errores.  Te  dejaré  aquí  para que  te desangres y mueras  solo  patético perdedor.

Luke no  dijo ni una palabra  solo esperaba  la muerte. Ojalá con  su acto    Zahra  y  sus  amigos  pudieran salvarse de   su terrible destino.  Tenía  fe  que  el amor  triunfara por una  vez  y  derrotaba  a  las  sombras.

A lo  lejos como un  sueño oyó la  voz  distante  de  Khalid.  Luke  se   acordó  que no apagó  su celular y que  su  amigo  oyó  toda la pelea .

— Resiste  Luke  ya  vamos.

Luke    apenas podía  moverse mucho  menos  hablar.  Él quiso  decir   a  su amigo  que era  una  pérdida  de  tiempo que  fueran  por  Zahra,  Amelia y  Sebastián.

Luke  no deseaba que  su inminente  muerte  fuera  en vano.

Espero que  tengan un  buen  fin de semana  y se me cuidan mucho .