En las Sombras de tu Corazón. Capítulo 12 ( Segunda Parte)

 Hola  ¿cómo están?  Hoy  sabrán si  Adremelech y  Vanora  escapan de su  celda. 

Capítulo 12

Vanora  tuvo  ganas  de sentarse   en la  cama  y llorar. Mas solo suspiró,    le daba asco el lugar  y  no tenía  tiempo  para lamentos. 

—¿Cómo  vamos a  escapar  de este lugar?

 Adremelech  le  tocó la  mejilla — Ten paciencia, siempre  tengo un plan. 

Vanora le sonrió. Esperando  que le contará  el plan. En lugar  de eso  Adremelech  se recostó   en  la pared.   Sin  decir  nada   la pared  se manchó  de  sangre. El  demonio se  retiró   al lugar  donde  Vanora miraba  la pared  asombrada.

— Está  prisión,  como te  has  dado cuenta  rota  y  camina. Si  cualquier  preso   decide  huir  y  traspasa  la  puerta  la  prisión lo  aplastará  sin miramientos.  Cuando tocas las paredes están sangran y se mueven lentamente, pero no eres  aplastado. 

Adremelech volvió aplastar la pared está volvió a sangrar, pero luego  de unos   minutos  solo  dejó   un  rastro  de  arena. El piso de adobe seguiría justo ahí, pero  ahora había  un  pequeño suelo  de  arena.

Vanora  sonrió  y  se dio cuenta  lo  que deseaba  hacer   Adremelech  entro  los  dos    empujaron las paredes  por  un buen  rato  hasta lograr  un pequeño  rectángulo de arena. 

— Debemos  cavar  un hoyo. 

Vanora  asintió sin decir nada  se  dispuso  a obedecer a  Adremelech . Estuvieron  varios minutos  trabajando    cavando  con  sus propias  manos. El  demonio   le sonrió, ella   lo ayuda  y  lo apoyaba más allá de las palabras. 

 Quería  decirle cuánto la amaba,  pero  ese no era lugar. En  lugar de eso siguió  con su  trabajo.  Cuando  el  hoyo  fue  lo suficiente grande  para que  los  cupieran  le  dijo  a  Vanora.  

— Ya sabes  que hacer ¿Estás segura  de querer intentarlo ?

Vanora le  miró  ceñuda  —  . Si lo estoy, confía en  mí.

Adremelech  tocó  la mejilla  de  Vanora — Confío en ti.  pero  tengo miedo  que  te pase  algo.

Ella le dio un  beso  rápido, luego comprobó que  ató  bien la  cuerda a su cintura.  Por un momento quiso no hacer nada, pero debían  huir  de ese  terrible lugar  lo  antes posible. Miró  una  vez  más  a Adremelech y   salió  corriendo  hacia la puerta. 

Ni  bien lo hizo el piso comenzó  a  temblar  y las paredes a moverse con la intención  de  aplastar a  Vanora. Ella temió que eso pase, pero  fue jalada por  Adremelch  hacia  el hueco.  Minutos  más  tarde   el  techo y le piso   de la  celda  se  unieron.

Como lo sospechaba  Adremelech  el hueco   que  hicieron    los  salvó y  ya no  se  encontraban en la  celda,  pero  aún no estaban  a salvo. Sin  salir  del hoyo  a pesar  de ser  muy  estrecho.  Los  consiguieron  unir  sus  esferas para  ver  si su estrella  estaba   dentro  de la prisión. 

La  estrella   se encontraba   solo a pasos   de la que  antes  fue  su  celda. Debían  tomarla  pero  temía  que  el  piso de los pasillos  no  fuera  seguro. Luego de  discutir  un  rato.

Vanora  fue la  elegida para  caminar  por  el pasillo  ya que  Adremlech era más  fuerte  y   podía jalarla  hacia  el  hoyo.   Vanora  con miedo  caminó  de puntillas  por  el pasillo y  tomó la  estrella.

Ni  bien  la  tomó, cientos  de flechas  surgieron de las  paredes y  el piso  empezó  a  desaparecer. Vanora pensó que no iba a lograr   volver  junto a  Adremelech pero   gracias  a la  cuerda  no puedo  caer  en él vació  y  el demonio logró llevarla hacia  el  hoyo donde  por  el momento  se  hallaban a  salvo .

 Ni  bien  Vanora  entró  en  el  hoyo la  tierra   se alzó  cual montaña y  luego  empezó  a  temblar, Vanora  pensó caería  al  vacío junto  con  Adremelch más no fue  así.

Cayeron  en una  celda pequeña  en la que las paredes  empezaban a  compactarse. Adremelech  quiso usar  la estrella para poder  transportarse a un lugar seguro.

Más  el portal  no funciona dentro de la  cárcel.

Adremelech  frunció  el  ceño  mientras maldecía —Mierda —. Miró  a  Vanora y  le  tomó  de la mano. 

Solo  tenía una oportunidad  antes  de ser  aplastados  por las paredes.  Apretó la mano de  Vanora  y  le  gritó —  Corre.

Vanora  apenas  podía  mantenerse en pie mucho menos  correr. Se  cayó  al piso  y soltó  la mano  del  demonio  que  gritaba  su nombre mientras  se dirigía la puerta. Vanora  salió de  la celda gateando  y  cuando  iba  a  caerse al  vacío fue  salvada por  Adremelech .   

Corrieron   mientras    el suelo se  desmoronaba  y  una lluvia  de  flechas    trataba  de  matarlos.  Adremelech  sabía que no tenían mucho tiempo para  seguir  huyendo sin un  destino  fijo, ya que  pronto  serían  heridos  o  recluidos  en  una nueva  celda antes  de morir  aplastados. 

Minutos  después   Vanora  fue  herida por  una  flecha  en el  brazo y  él por  ayudarla  fue  herido   en su pierna.  Lo peor  es  que el camino  estaba  a punto de desaparecer.  Fue  cuando se  le  ocurrió  un  plan  desesperado.  Tomó  la cuerda  que   aún  Vanora  tenía  en la cintura le  quitó  la  cuerda. Luego  la  agarró  y la lanzó  hacia las  paredes  planas. 

Vanora pensaba  que se  volvió loco,  tomo su  brazo para hacerlo  correr  antes  que  el  suelo  desaparezca por  completo.  Para su  asombro  Adremelech   pudo  sujetar   la cuerda  con  una  saliente   de las paredes.   El  demonio la sujetó  mientras   volaban   sostenidos  por la cuerda. 

Vanora   no  sabía  cuánto  tiempo  la    cuerda los pudiera  sostener .  Para  su  sorpresa  el piso  volvió a parecer  y  no  había rastros  de las  flechas.  Vanora  miró  a  Adremelech y  le  preguntó — ¿ Bajamos?

—Todavía  no. 

— La  cuerda, ni tus  fuerzas  van a durar  mucho. 

— Tranquila.

Vanora quiso gritarle como siempre que le decía alguien que se calme, pero no lo hizo. Luego  de algunos  minutos   las  paredes  empezaron  moverse   nuevamente.

De  las paredes   salieron unas  púas  de  piedras  que hirieron  a  Adremlech. El demonio  topándose  el costado  susurro —.  Trepa por  ellas  Vanora.

— No me iré  sin ti.

— No tenemos  tiempo.

— Somos un equipo donde  vas  tú, voy  yo. 

Adremelech  gruñó — bueno —  para no seguir perdiendo el tiempo. 

Vanora   le ayudó  a  pieza  subir  por  ellas. Su  camino  no duró  mucho  tiempo  porque   las  púas  desaparecieron  Vanora pensó que iban  a  morir, cuando  una  cuerda  les   fue  dada  justo  a tiempo para que  no cayeran. 

Les deseo  un genial fin de semana