Después de Todo. Capítulo 20. ( Primera Parte)

 Hola  ¿Cómo  están?

 Hoy  les  traigo  un nuevo  fragmento  de mi novela.  

Capítulo 20 

3 semanas  después. 

Luke miró el reloj, dentro  de algunos minutos  su  día  se  iluminaría  por  estar  junto a  ella. Extrañaba  tenerla  en su casa y en su cama.  Hablar  con ella  o  abrazarla. 

Se  tenía que conformar  con  verla una hora o dos  al día. Pero  ella  necesitaba su espacio para  crecer  y él le daría  todo lo que ella quisiera o necesitara. A pesar de que eso le  rompía el corazón.

A  veces sentía  que  a ella  no le importaba lo mismo que a  él.  O que  no  estaba  segura   de   lo que deseaba  con  la relación.

Últimamente  apenas  hablaban.  Había  algo que  Anazareth  le ocultaba. Hoy  hablaría  de eso con ella. 

Aunque  si era  sincero consigo mismo.  Él también le había  ocultado  cosas.  Desde que ella se fue  del castillo.  Tenía una especie de mareos  y ataques  de rabia  que no podía entender. 

Tal  vez,  solo era  estrés.  Pero  a veces ni él mismo  se lo   creía. 

Llegó  al inframundo  a través  de un portal.  Ya  había  venido dos  veces a  buscar a  Anazareth. Más  aún no se acostumbraba   a estar en el inframundo. Era muy  diferente a como se lo imaginaba  de niño  un  lugar  tenebroso  con gente  gimiendo   y  enormes  monstruos  custodiando a las  almas  de  los pobres incautos.

El inframundo era  muy bello a su manera  tenía  grandes montañas,  bosques  de hielo y  fuego  y  castillo invisibles que solo quien era invitado los podía divisar. 

Solo  podían   entrar  al inframundo  los demonios,  fantasmas  y parcas con las almas  de  los seres que iban a ser  castigados  en ese lugar.

Para qué  él pudiera  visitar a  Anazareth, se le  dio  un anillo especial  para  que pudiera  ver las puertas  del infierno.

Ni bien entró, hubo   demonios que lo miraban  como si  fuera  un insecto  o su presa.  Había  también  almas  en pena que   buscaban su ayuda. 

Caminó  de forma  rápida  y segura.  Todo iba  bien  hasta que  lo observó llegar.

Dauroji  el  rey del inframundo o como  secretamente  lo llamaba  Luke  el rey  de  los  mensos. Por la  forma en la  que lo miraba el  rey. Tampoco le agradaba  su  presencia.

Iba a  marcharse  cuando Dauroji  se le  acercó con  su mirada  arrogante  como si  Luke  apestara. 

— No eres bienvenido  en mi reino.  Marcharte 

— Fui  invitado por  Anazareth.  No me voy a marchar. 

— Te lo ordeno. 

Luke  se rio para no  golpear  en el  rostro  bonito y altanero de  Dauroji. 

— Tú no eres mi rey.  Solo eres  un  tonto presumido que  no  sabe  ni  valorar  su mundo ni a sus amigos. 

Dauroji  detestaba  Luke  ese presumido y tonto  vampiro no se merecía   a Anazareth.  Aunque hubo un tiempo que  estuvo  enamorado  de  Anazareth .  Ahora solo el cariño y la promesa que le hizo a su  hermano  Agni  hacían  que   desee  cuidarla. 

 Luke era un  híbrido , muy  joven para cuidar  a  una   demonia con  tanto poder  que la hacía inestable. Dauroji  tocó la cicatriz que  tenía en el cuello era  un recuerdo de  cuando  Anazareth perdió el control y  casi termina con el mundo humano y  con él mismo.

— Eres un tonto  Dufrew .  Tienes  la  arrogancia  de humanos  que  creen  saberlo todo y no saben nada.  Anazareth  se da cuenta de que no  vales  nada y te dejara.  Márchate  antes  que me enfade. 

— Uy, que miedo me das. Como te dije  tu no me mandas, eres  solo un tonto.  —  Expresó burlándose  Luke. 

La risa de Luke hizo que  Dauroji perdiera el control  y le diera un golpe en el  rostro.  El  vampiro  iba  a atacar cuando de la nada   fue congelado al igual que el demonio.  Halrinach  solo gruñó. —  Los machos de cualquier  especie  sólo se expresaban con gruñidos y golpes. 

—  Es lamentable  que den  ese  espectáculo y  ensucien el nombre  de mi nieta. Mientras    ve  cual de los  dos  la tiene más  grande. 

Luke  no esperaba  que Halrinach  tuviera  ese  lenguaje.  Era la abuela de  Anazareth.  aunque  ella no era la imagen de la típica abuela. Halrinach  tenía  el pelo negro rizado  y los ojos  negros.  Siempre llevaba  ropa de cuero apretada  y era una mujer muy sensual.  Así que era  un idiota  en  tratar de  catalogarla  en  un papel y prejuzgarla.    

Luke  cabizbajo  le  dijo a  Halrinach — Disculpa.

Mientras  Dauroji solo hizo una mueca.  Lo que hizo que la demonia  se moleste  más. Por un momento  Luke pensó  que  Halrinach iba a jalar  las orejas  del  rey demonio. 

— Dauroji, tenemos que hablar. 

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Les deseo un genial  fin  de semana