Hola ¿Cómo están?
Hoy les traigo un nuevo fragmento de mi novela. Un misterio aparece y cambiara todo.
Capítulo 21
Úvatar estaba furioso por la presencia de dos recolectores y de ser perseguido por Anazareth y Luke. En ese momento quería atacarlos pero haría que todo su trabajo en mantener en secreto su condición.
En lugar de eso creó un hechizo difusor para distraer a la anuruin y cualquier ser que esté rastreando su magia. Ese embrujo consistía en unos terribles rayos de color rojo que a los anuruin le hacía doler la cabeza y los más receptivos los ponía ciegos , sordos y mudos. Si estaba muy cerca de los rayos cualquier anuruin podía morir.
Esperaba que ese fuera el caso de Anazareth y ella dejará de molestarlo. Cuando llegó al apartamento del político los recolectores ya se habían ido al fallar su señal. Esperó que volvieran, pero no sucedió.
Radulf y Rory se fueron al fallar la señal. Aunque Radulf miró a la ventana y se sorprendió por la extraña tormenta eléctrica. Algo se encontraba mal, y estaba seguro de que tenía que ver con Úvatar. Pero como pronosticó era de tomar el alma del drogadicto y no de misterios que no podía resolver.
Anazareth estuvo a punto de morir si no hubiera sido por Luke que la tomó en sus brazos cuando se desmayó. Ya segura en el inframundo se prometió que acabaría con Úvatar.
**
Tres días después
Radulf daba clases aunque aún pensaba en lo extraño de la tormenta y lo que ocurrió en Nueva York. No era su problema.
Estaba aconsejando a las almas que vagaban en el purgatorio. En especial a un hombre holandés que llegó hace unos meses y estuvo vagando en el inframundo y ahora lo hacía en el purgatorio. Vanora le dijo que era muy especial y que le ayudó mucho sin pedir nada a cambio.
Sven le recordaba a él. Pasó mucho para llegar al cielo azul o como los humanos llamaban purgatorio. E hizo todo lo posible por remediar en algo todo el mal que hizo.
Por eso trabajo duro para ser parca o como lo llaman también los recolectores de almas. Pero eso últimamente no le alegraba. Esperaba que Vanora acepte su renuncia dentro de poco.
Mientras seguiría trabajando y ayudando. Sven iba a preguntarle algo. Cuando Rory llegó apresurado.
— Disculpen , lord Radulf. Debo hablar con usted.
Radulf enojado preguntó — ¿ Qué pasa?
— El político, el hombre del apartamento murió hoy.
— Todos los seres mueren Rory.
Pero era inquietante. Radulf intentó parecer calmado, pero este misterio lo inquietaba.
—¿Solo por eso me buscas?
Rory se puso rojo. Lord Broom lo busca. Radulf se excusó y se fue con Rory a la oficina de Broom. Radulf se sentía inquieto. Hace mucho tiempo él y Broom eran amigos. Hasta que un mal entendido los separó y dejaron de hablar.
Esperó que les haya agradado este capítulo. Les deseo un genial fin de semana.
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