Rompiendo Reglas
Ameli, no tenía ganas de dormir pero lo hizo un poco cansada, ni bien empezó a soñar miró a Sebastián caminando por un malecón haciendo tiempo, mientras hacían unos análisis a su hermana. Fue por una playa desierta, subió por un acantilado y grito.
-Ameli te extrañoooooo, te espero vuelve a mi. Se que estas ahíiiiiiiiiii, regresaaaaaaaa a mí.
Ameli sonrió despertándose, enseguida su amor la sentía. Estaban unidos, era almas gemelas estaba segura de ello.
Luego de unos minutos se concentro.
-Estoy aquí Sebastián, sé que te sonara una locura. Estoy viva.
Sebastián se quedo perplejo Ameli le hablaba, no le podía creer. Estaba volviéndose loco, pero si era así prefería enloquecer, que estar sin ella.
-Cuéntame. ¿Qué paso? Pensé que moriste en mis brazos.
-¿Sebastián me crees?- Dijo Ameli, llorando y agradeciendo a dios.- Tengo tanto que contarte.
Él sentó a mirar el mar mientras ella le contaba.
Pasaron 3 mes y Ameli y Sebastián se vinculaban cada día más con su mente.
Ameli solo esperaba aprender a transportarse sola para verlo. Sabía que era una locura pero necesitaba estar con él.
La vida en la mansión era dura. Hope cada noche intentaba huir y Andrei la pescaba.
Una tarde se pelearon como nunca Andrei parecía que había perdido la paciencia harta de oír los gritos, deseo estar en su cuarto y se transporto a él por primera vez alegre por lograrlo fue a la ventana a mirar al jardín y contarselo a su amor.
Dos semanas después, de muchos planes se encontró con Sebastián en el lugar que le dijo. Lo espero. pero no llegaba a punto de llorar, lo vio correr con un ramo de rosas rojas. La rosas era hermosas, pero lo era más su confianza, su amor y la esperanza que le daba en el futuro. Cuando ella iba a cruzar, alguien se lo impidió.


2 comentarios:
\\\///
(Ó_Ó)
seguimos sumergidos en el relato¡¡¡
un beso¡¡¡
¡Mierda! ¿Se puede saber quién fue el gilipollas q le impide reunirse con Sebastian?
Voy ahora mismo a averiguarlo.
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