Capitulo 37

Un plan siniestro


Diana apenas oía ala maestra cuando Marina entro en el aula de clases.

-Lamento interrumpir pero necesito a la señorita Arauz.

Diana se levanto y se fue.

Marina estaba pálida y muy asustada.

-¿Qué pasa Marina?

-Tenemos el tiempo justo de huir.

-Ven sígueme.

-¿Que pasa?

-Han matado al rey con un puñal de los guerreros negros. Una carta a de tu padre a la princesa Yusbel atestigua que eres parte de lo guerreros negros y amante de uno de ellos.

Diana se quedo paralizada.

-¡Por la Diosa!

-Es verdad no. El hombre que te rescato en las pruebas era uno de ellos. Camina no hay mucho tiempo por aquí

-Yo soy inocente. -Dijo Diana a punto de un ataque de histeria. -No lo mate más bien descubrí que lo estaban asesinando el príncipe Gregory puede atestiguarlo.

-Es imposible la nave en la que viajaban el Príncipe Gregory y Lord Darius estallo ambos murieron.

La Reina de Sivcar, es la princesa Yusbel muévete.

Diana dio un pequeño grito terror Sivcar estaba en manos de un kut. Tenía que reunirse con Arik y los rebeldes era la única salida. Caminaron internándose por a un camino de piedra.

-¿A donde vamos?

Cuando estaban a punto de bajar por unas escaleras. Diana oyó una desagradable y conocida voz.

-Deténganse están arrestados.

Lord Darius y unos cuantos hombres soldados las esperaban.

-Pensé que estaba muerto Lord Darius dijo a Diana mientras a escondidas le daba una señal por que camino continuar.

-Fue el destino quien me favoreció o tu padre Diana. Que me entretuvo con una información muy valiosa y por la cual estas arrestada traidora o más bien asesina.

Fue cuando Marina le lanzo un rayo a Darius.

- ¡Huye muchacha!

Diana corrió bajando por las escaleras y encontró algo baboso y negro en el suelo ese era la guarida del kut

Regresando por donde había venido vio el cadáver de Marina.

-No hay salida Diana dijo Darius atrapándola. Ella forcejeo pero él le puso unas esposas magnus con las que no podía hacer magia.

Diana fue trasladada a la prisión de la orden blanca. Estuvo por alrededor de una hora.

Cuando llego un molesto visitante.

-Que desilusión verte aquí mi querida Diana. ¿Vas decir donde se esconde. Ese simio, tu cómplice? Se que eres inocente te puedo ayudar.

-Soy inocente Lord Darius. La verdadera culpable es la reina Yusbel ella es un kut

-Cuentos de niños. Con eso te engañaron. Te puedo asegurar que yo destruí al último.

-No yo lo vi si quiere pudo indicarle su guarida hay que actuar antes de que tome el control de Sivcar.

-Si quieres salvarte júrame lealtad y únete a mí. Solo tienes esa salida.

-Nunca prefiero morir.

-Entonces morirás. No habrá juicio. Tu ejecución será inmediata dentro 15 minutos.

Un soldado los interrumpió

-Alguien solicita verle señor.

-¿Quién?

-Uno de los lideres de la orden negra. Él que se hace llamar fantasma.

Arik entro altivo vestido negro peinado hacia atrás.

-Mi vida por la de ella.

Diana golpeo los barrotes de su prisión.

-No Arik. Noooooooo.

Él solo la sonrió mirándola con pasión.

-No estas en cuestión de decidir ambos morirán.

La princesa Yusbel entro en la habitación vestida con un traje de cuero negro que marcaba toda su figura.

-El es uno de lo lideres negros. El fantasma, que te hado tantos problemas. Están guapo. Se acerco a él y le acaricio en la mejilla.

Me encantaría poder jugar con él.

Diana se revolvía en la celda.

-Lastima será en ejecutado en tu lugar

Diana grito. -No mantenme a mí. No a él.

Yusbel se le acerco

- Tengo otros planes para ti. Ratita. La prisionera vera la el fusilamiento en la torre blanca la que tiene campo de fuerza no podrá utilizar sus poderes. Luego será interrogada por mí.

-Pero majestad

-Me vas a decir como gobernar

-Como desee su majestad.

Darius salio hecho una furia de la prisión.

Arik entraba en la celda continua. Diana a pesar de sus cadenas trato de toparlo.

Y é intento hacer lo mismo. Unos segundos, se tocaron levemente los dedos para luego ser separados. Mientras Arik le decía.

-Te amo. Llanic, nada ni nadie me separa de tu lado.

Fue lo ultimo que escucho Diana antes de se llevada a la torre.

En la torre espero uno minutos hasta que Darius. Entro en ella.

-Has recapacitado te puedo ayudar a vivir.

-Solo me uniré a la orden si lo prometes liberarlo.

-No puedo hacer eso. Lo sabes. ¿Que decides?

Diana ella lo vio a la ventana los hombres estaban alistándose para disparar.

-Ya te dije mi respuesta prefiero morir.

Te lo volveré a preguntar cuando veas a ese simio morir. Y con eso salio dejándola sola.

Diana, empezó a luchar con las esposas magnus que la apresaban. Si Arik iba morir quería hacerlo a su lado.

Le sangraban las muñecas por intentar quitárselas.

Al cuarto intento y con sus muñecas en carne viva lo logro. Volvió a mirar a la ventana. Le estaban, dado una venda Arik este rechazo.

Tenia que ir a su lado. Si no podían vivir morían juntos.

Golpeo el campo de fuerza este no se rompía.

-Por favor ayúdame le dijo a la voz pero nadie respondía.

Sus lagrimas, corrían por su mejillas. –Diosa ayúdame, solo déjame morir a su lado.

Respiro e intento concentrar su poder y pero nada. Volvió a ver la ventana aun no lo mataban.

Debía apresurarse como una niña golpeo la el campo que parecía como un vidrio de seguridad por lo duro al tercer golpes estallo cubriéndole la cara. Se limpio. Golpeo a un guardia. Bajo a toda prisa las escaleras lo más rápido que podía se tropezó y se hizo un raspón en la rodilla.

Pero siguió caminado a la puerta, tropezó de de nuevo. Cuando estaba en el suelo oyó unos disparos de rayos. Había llegado tarde.