Capitulo 44

La boda

Yanus tomo la mano de Ameli.

-¿Estás segura? Si Yanus, eres lo más cercano a un padre gruñón. –Dijo Eli besándolo en la mejilla. Entro junto con Eli que era llevada por su padre. Ameli sintió una gran vació al mirar a los padres de su amiga, que habían sido encantados para no ver su rostro verdadero. Extrañaba a su familia a pesar de todo. Ahora tenía una nueva pero igual sentía tristeza por todo lo que perdió, hasta que observo a Bastian con la sonrisa nerviosa sonriéndole. Él era todo lo que necesitaba para ser feliz.

Ivanek estaba muy atractivo con su frac, a pesar de su seriedad y timidez. Estaba con la cabeza gacha, como si deseara que se le tragara, sintió el cálido toque de las manos de Eli estrecho fuertemente sus manos. Luego poso su mirada en todos los presentes, feliz de encontrarse ahí, de estar con la mujer que amaba, para unir sus vidas frente a todos sus conocidos.

Yanus desde su posición miraba a Luke hablando con Amaya, que estaba impresionante con un hermoso vestido azul. Cuando le sonrió al hechicero, quiso morirse. Sentía todo su cuerpo arder y un deseo asesino se apoderaba de él, cuando observaba la escena.

Luke vio a Yanus y sonrió su plan estaba dando resultados. Amaya reía aburrida de tratando de ser amable, para ella era solo un niño, deseaba un hombre. Una mirada ardiente le hizo que se volteara Yanus la examinaba como un depredador a punto de atacar a su presa, no entendía que le ocurría. Desde su anterior pelea ninguno de los dos hablaban. Ella ni siquiera contestaba sus mail, aunque los leía y los regresaba a su dueño.


Liliana los interrumpió, para que miren a la ceremonia. Luke se quedó como estúpido observando su cabello castaño suelto. Estaba tan bella que deseaba probarla toda, fue tan humillante cuando Amaya le dio un pañuelo para secará sus babas.

Preguntándose porque últimamente todas las mujeres lo veían como amigo. Hasta Esmeralda había dejado de celarlo. Se sentía, solo con desdén vio la ceremonia, ignorando los suspiros Hope, cuando miraba Andrei.

Ivanek solo quería besar a Eli, odiaba ser el centro de atención deseaba ya estar en su casa en la antártica y desnudarla lentamente mostrándole su amor, pero ella lo obligo a andar. La ceremonia había acabado.

Todo el mundo bailaba o bebía Ana se sentía demasiado chiquita y fuera de lugar. Camino alejándose de la fiesta, ya era de noche. Miro Aldair cortar una rosa roja, la iba dejar como todas las noches en la cama de Esmeralda.

Ana decidió evadirlo. Llego a una roca en él imite de la propiedad y se sentó a mirar las estrellas pensando en Michael.

Una voz la asusto.

-No deberías estar sola acá. Yazna podría atacar.

-Eso, es lo único que te importa, pero que me sienta sola y te extrañe no.

-Yo también me siento así, Si supieras como pienso en ti como te deseo.- Dijo Michael, sentándose junto a ella.

-Cada vez que estoy lejos de ti, hay un abismo en mi corazón. Me encuentro perdido, es como si mi mundo no tuviera sentido, pero si sigo junto a ti te tomaré de forma instantánea. Mi cuerpo te desea tanto, no le importa si eres una niña. Que degenerado que soy, me doy asco, sin embargo, no puedo evitarlo.

Ella le toco el hombro

-No pienses en eso solo por abrázame, mañana no alejaremos, pero un día estaremos juntos. Nuestras almas se buscan somos el uno para el otro. Así que aunque sea en mil años estaremos juntos, te lo puedo prometer.

Él la abrazo tan fuerte que Ana no podía respirar.

Yuri estaba triste, mirando la escena de la boda recordando cuando una vez quiso tener lo mismo. Él era un ser que no se merecía nada de eso, debía pagar todos sus pecados ojalá Camille pudiera perdonarle.

Selene bailaba como una loca junto a su hermano. Siempre soñaba en ella desde antes de conocerla era su princesa, su fantasía imposible.

Aun recodaba la conmoción que sintió cuando la vio acariciando un monto de margaritas, a punto de tirárselas encima. Era la primera vez que estaba en su mundo y todo le parecía raro y novedoso. Hasta una simple margarita era un tesoro al ser una flor rara en su mundo.

Él pensó que solo debía ser frío con ella y desearla en silencio pero aquella mujer siempre lo estaba buscando, molestando y seduciéndolo sin darse cuenta. Siempre soñaba con ella siempre la amaba como a ninguna otra. Antes de conocerla era un simple anhelo, a hora era su obsesión que lo destrozaba sin que ella lo supiera.

Selene dejo de bailar al sentirse observada cuando vio que era Yuri su corazón se paró, que tenía ese tipo que le desquiciaba y le hacia desearlo con solo con mirarlo

Ian buscaba a Ana, estaba cansado de como cada mujer en la fiesta se lanzaba encima como si fuera el unico hombre guapo en el salón, fue cuando vio a una hermosa mujer de cabellos rojizos, ella comía aburrida un bocadillo, se le acerco intentado, seducirla solo con su voz.

-¿Estás aburrida?

-Un poco dijo Almandinne cuando se viró. él hombre que le hablaba sonaba interesante. Quería verlo mejor y se puso los lentes.

Ian gritó con horror y Almandinne se aterró, ninguno de los dos se hablaba después de la experiencia del chivo. Sin decir palabras, se alejaron, pero se miraron desde lejos el resto de la fiesta.

Amaya estaba aburrida, Luke se iba ir a ver con Pamela, una fae que trabaja con su primo. Antes de irse le pidió unos libros que había visto a Liliana leyendo. Beso a la mejilla a Amaya, cuando Yanus salio hecho una furia.

-¿Qué están haciendo?

-A ti no te importa. -Dijo Luke acercando a Amaya a su cuerpo, la fae se sintió incomoda

-Suéltala.

-¿Por qué? ¿Deseas que te suelte Amaya?

Ella puso los ojos en blanco, respiro e intento calmarse antes de hablar, casi nunca perdía los estribos. sin embargo, estaba enfadada.

-Tú no me toques, solo somos amigos, -le dijo a Luke, mientras Yanus sonreía complacido y aliviado.

Y tú no me ordenas nada, déjame en paz Yanus ve a beber y a olvidar a tu sombra. Hoy no estoy de humor para tratar de entenderte.

Amaya se fue enojada estaba en uno de los pasillos cuando sintió que la jalaban.

-Tú eres la sombra que me persigue, pienso cada segundo en el beso que me diste. Maldita sea, quisiera olvidar tus labios. Pero cuando los probé, entraron en mi piel, en mi sangre y en mi alma.

¿Amaya, no sé que hacer? No quiero perderte y no puedo dejar de desearte.

Ella no dijo nada solo se acercó y lo beso.

Ameli, lloraba veía a su madre de lejos, Bastian solo la abrazo y dejo que ella siguiera mirando de lejos a su familia.

Ivanek estaba más que aburrido odiaba las multitudes, Lish lo acompañaba, mirando embobada al príncipe Niels bailar con su hermana.

Eli se acercó y se sentó junto a él le puso las manos en los muslos y le susurro al oído.

-Es hora de escaparnos. Deseo pasar cada segundo de lo que resta de la noche en tus brazos, descubriendo lo que en verdad significa amar.

Llegaron a la antártica Ivanek , le desnudo lentamente mientras le hizo el amor, suavemente.

Eli dormía temiendo que todo eso fuera un sueño. Y si despertaba en la mañana sola con miedo se abrazó al cuerpo cálido de Ivanek, que pareció sentir su temor y simplemente le beso. Todo su mundo se calmó se aferró a su cuerpo, sabiendo que al día siguiente y el resto de su vida se quedarían juntos para siempre.