Desde las sombras. Capitulo 9

Les deseo una linda semana, pronto publicare una nuevo capitulo de la pintora ahora les pongo algo de Yuri. Ojala les guste .

Capitulo 9

La cita

Apenas se fue Selene, el uruk se vistió y fue en busca de Andrei, que lo esperaba afuera en el pasillo. Ninguno de los dos hablo mucho, fueron directamente a la casa de su líder en los Alpes suizos.

Cuando llegaron Andrei lo hizo pasar a una sala muy austera ya sentados, le pregunto por lo que ocurrió esa tarde. Yuri con una voz sin emoción le contó lo sucedió. Luego la sala se quedó en silencio.

Esa misma noche, fueron convocados los demás uruks. Mientras el cuarto se llenaba de personas. Andrei recordó, cuando recién conoció a Ballar en la isla sin tiempo estaba de la misma forma que describía Yuri a Hope. No podía dejar de preguntarse ¿qué conexión había entre los dos?

Siempre habría creído que sus heridas eran por los tormentos que pasaban ahí. No por otra razón, hasta ahora. ¿que era todo este misterio?

Miró a los integrantes de su grupo Yanus parecía aburrido, Yuri no dejaba de ver el reloj Ameli y su esposo Sebastián estaban tomados de las manos. Aunque él no pertenecía a su grupo, se encontraba invitado por su mujer y por su mujer y su hermana ambas eran uruks.

Ana estaba muy abrigada y se veía algo pálida. La niña era su más reciente Uruk no quería convertirla hasta que fuera mayor de edad. Era una lástima porque solo ella podría localizar el libro de la vida y la muerte. Hope fue la ultima en entrar miraba al suelo y parecía muy incomoda.

Cuando todos se acomodaron el la pequeña sala Andrei empezó hablar.

–Como ustedes ya saben nosotros los mensajeros de la muerte o los llamados uruks. Fuimos creados para recoger el alma de los humanos y hacer que renazca en nuevos cuerpos hasta que llegasen a su evolución.

Nuestras amas la señora de la vida y la de la muerte fueron las destinatarias de esa gran misión. Tomaron a las almas nuevas y puras para este propósito: es decir nosotros.

Ahora que la señora de la vida nos traiciono para tener el libro en su poder y su hermana cualquier rato hace lo mismo es mejor estar unidos.

Yuri apenas oía las palabras de su amigo. Solo podía pensar en lo que ocurrió una hora antes en su habitación. Aún sentía los labios de Selene y deseaba sentir sus manos sobre su espalda.

No sabía que hacer estaba muy confundido por una parte quería estar con ella aunque no fuera digno. Ya no le importaba su pasado y todo el daño que hizo solo deseaba una oportunidad para estar junto a su princesa. Hasta el más terrible asesino le era permitido ver el sol y sentir algo de felicidad.

La voz de Yanus preguntándole algo lo saco de sus pensamientos.

–¿Yuri como empezó todo?

–¿Perdón?

–Me refiero al incidente de Hope.

–Estábamos a punto de marcharnos de New Orleans a Toronto cuando ocurrió Hope se puso pálida apunto de desmayarse y quise agarrarla para que no cayera al piso. Su piel cambio, empezó sangrar y le salieron espinas, que por poco me matan.

Hope quería que la tragara la tierra la mano de Andrei le toco el hombro y luego con voz cariñosa le dijo.

–Nada malo pasa contigo fue un accidente.

En ese momento tocaron a la puerta eran Almaldinne junto a la gran hechicera Esmeralda.

–Pasen.

–Hicimos los análisis que nos pediste. Como sospechas la sangre de Hope está cambiando ningún Uruk tiene ese poder. Tal vez, tú aunque en menor medida.–Dijo Almaldinne examinando la casa con curiosidad.

Esmeralda continuo .

–Mis investigaciones han relevado que ella absorbe los poderes de alguien lo más probable es que sea de la señora de la vida. El momento que traiciono su labor dios mando a otro Uruk como su sucesora.

Hope palideció y la sala se quedó en silencio.

La reunión duró un poco más mientras se hacían los planes y estrategia para localizar a la señora de la vida.

Yuri salio de la casa de Andrei en vez de ir la mansión. Decidió tomar su motocicleta y correr por la cuidad. Quería por un minuto dejar de pensar en Selene. Corrió toda la noche sin lograrlo. Termino parado en su ventana sin saber que hacer. Meditando que sobre los sentimientos de ella y sobre lo que sucedió. Esperaba tener una ligera oportunidad solo eso le pedía a Dios.

Selene apenas podía permanecer quieta había momentos en que estaba segura de que a Yuri le gustaba y que ella deseaba algo con él. Luego sus miedos tomaban el control y ansiaba cancelar la cita. No había pensando en nada, cuando envió la nota.

Volvió a mirar la ropa tendida en su cama paso horas pensando en que iba a ponerse. Se preguntó una y otra vez ¿que iba hacer ? Casi manda una nota para cancelar el compromiso

Salio a la ventana, miró una sombra por un momento se imaginó a Yuri y ese pensamiento le tranquilizo. Miro otra vez la cruz en señal de una respuesta.

****

Eran las seis Yuri camino bajo la lluvia con miedo a entrar al café. Selene jugueteaba con un florero, incomoda con la ropa que escogió y sin tiempo para cambiarse de nuevo.

Miro al reloj él parecía que aún no iba a llegar. Debía irse, estaba a punto de pararse cuando lo vio entrar . Yuri tenía el cabello mojado, entró con rostro inexpresivo . La muchacha, no pudo dejar de ver su cabello revuelto y húmedo, que le recordó la noche anterior. No quiso pensar en sus besos, intentando controlarse volteo el florero con el que jugaba minutos antes.

La poca gente que estaba en la cafetería volteó a verla. Yuri examinó el lugar era un restaurante típico del centro de Viena. Era un local grande, amplio y muy elegante.

Camino por las sillas de madera antigua que evocan otros tiempos ella le estaba esperando al final de pasillo, se había parado y limpiaba su vestido con una servilleta.

Él se acercó a ella, tomo otra servilleta y le dijo en voz ronca.

–¿Te ayudo princesa?

–Yuri, ¿cómo estás? Deja yo puedo hacerlo.

Él le sonrió. –Como desees princesa.

Selene, quiso decirle que dejara de llamarla así, eso le exasperaba. Cuando lo vio sonreír todo pensamiento se alejó de ella. Nunca en todos los años que lo conocía lo vio reír y era tan intoxicante que pensaba que se convertiría en gelatina.

Estaba tan atractivo vestido completamente de negro, su abrigo largo le daba un toque distinguido.

–¿Te vas a quedar parada o deseas que nos marchemos?

Selene se sentó muriéndose de la vergüenza, se había quedado como boba viéndolo, para colmos estaba sonrojada. Yuri esperó un segundo a que ella se tranquilizara, también estaba muy nervioso, no podía dejar de ver el vestido azul que ella llevaba puesto. Le ceñía su cuerpo como si fuera guante, el cabello suelto le caía en la cara cubriéndole el rostro .

Sin darse cuenta como hipnotizado toco su cara alejándolo para poder verla mejor. Al tocar su suave piel todo su cuerpo se encendió, lo peor fue cuando Selene tembló bajo su contacto, se imaginó cuando estuviera dentro de ella y le hiciera gemir su nombre.

La deseaba tanto que apenas podía controlarse, utilizó todas sus fuerzas para quitar su mano de su rostro. Selene estaba perdida en la sensación de las manos de Yuri tocándola que si él le pedía a ella que se desnudara. Lo haría sin pensarlo.

Minutos más tarde una mesera apareció. Pidieron dos cafés y dos porciones de torta Sacher. Cuando ella se fue ambos se quedaron en silencio sin saber que decir.

Selene miraba alrededor para no quedarse babeando por Yuri, que la observaba en silencio guardando como un tesoro cada instante que estuviera con ella.

–Es hermoso este lugar aun me acuerdo cuando lo conocí no ha cambiando nada desde 1885.Sigue teniendo ese aire mágico.

–Sí, me acuerdo aquí fue donde nos conocimos.

–Y siempre que estoy aquí, me tiro algo. Debes pensar que soy muy torpe.

Yuri la miro con una pasión , antes de decir.

–Tú no eres torpe eres perfecta tal como eres mi princesa.

Selene se sonrojó y agradeció a Dios, que en ese instante llegaba la mesera que les sirvió las tortas junto con el café.

La princesa, miró su comida para no verle la cara a él, mientras esperaba que su corazón se dejara de latir tan fuerte. Decidida a tranquilizarse busco algo de azúcar para ponerle a su capuchino, en ese mismo instante topo los dedos a Yuri que estaban a punto de agarrar la azucarera y lo miro a los ojos

El tiempo se detuvo y solo estaban los dos rozándose tímidamente. Ambos respiraban con dificultad.

Yuri fue el primero en retirar sus manos. Si seguía así iba tomarla ahí mismo, con una voz un poco intranquila y llena de miedo pregunto lo que tanto temía.

–¿Princesa por qué me citaste a esta reunión? ¿Qué hacías en mi cuarto?

Selene, en ese instante pensó que se quedó sin voz. La boca la tenia pastosa apenas podía pronunciar palabra.

–Yo, yo, yo.

–¿Sí?

Respirando fuerte, saco algo de su bolsillo y se lo dio a Yuri, era la cruz que le había dado para protegerla.

El uruk, la miro con mucha tristeza antes de tomarla de la mano de Selene.

–Entiendo, espero que le hay servido de algo.

–¿Qué entiendes? – Dijo Selene preocupada al ver que Yuri se levantaba dejando su café a medias y dinero para pagar la cuenta.

–Adiós princesa, debo marcharme.

–Yuri espera.

Él no le hizo caso y salio del local ella lo persiguió.

–Te dije que esperes.

Yuri se volteó, un poco enojado.

–¿Qué deseas de mí? Si quieres, que te pida perdón por lo que ocurrió en mi habitación no me arrepiento. Tampoco lo hago desearte tanto que apenas puedo respirar.

Cada vez que te miro o estoy cerca de ti me siento borracho , tonto por que no me salen palabras. Sé que soy poca cosa para ti, pero no puedo evitarlo y si te ofende o no deseas la poca protección que te querría dar. No puedo hacer nada, solo espero que estés bien, cuídate por favor.

–Espera.

Yuri no le hizo caso y se marcho con el corazón roto, mientras Selene estaba a punto de llorar.