Aquí les dejo un nuevo capitulo y espero que les guste . Les mando un beso y deseo que tengan un buen fin de semana.
Capitulo 6
Peleas
Annia
A Annia le extraño que Nicolás no hubiere llegado con Darius. Suspiro al ver que cariño con el que su prima y sus esposo se saludaban. Camino a su habitación se sentía molesta, intranquila y hasta un poco culpable. Iba entrar a al cuarto para oír algo de música muy alto y tal vez leer algo para tranquilizarse, pero Darius no la dejo ir.
―Annia, Rebeca deseo hablar con ustedes.
Fueron a sala, uno de los hombres Dairus fue llamado, él le dio instrucciones de buscara Nicolás lo que hizo que Annia se sorprendieran y preocupara. Se sentó inquieta en una silla que quedaba a la ventana, como si esperara que Nicolás apareciera en la sala.
Cuando se fue el hombre de Darius. La sala se quedo en silencio pendiente de las palabras del hechicero, esté espero un tiempo prudencial sin decir nada. Para luego conjurar un hechizo de protección. Rebeca estaba expectante y curiosa mientras Annia tenía los nervios a flor de piel.
―¿Qué ocurre Darius? ¿Le paso algo a tu hermano? ¿La reunión no era por algún asunto Albus Novoa?
Ese nombre hizo que a Annia le diera ganas de vomitar odiaba a ese hombre le recordaba la peor de sus experiencias. No quiso pensar en el pasado Así que concentro en lo que decía Darius.
―No lo sé en la reunión se enfermo. Ya debería haber llegado, por eso mande a buscarlo.
Annia se quedo paralizada, miles de imágenes con Nicolás muerto a punto de hacerlo llegaron a su mente. Quería llorar, lo ultimo que oirá de ella era que lo consideraba un taruspido. Si no pudiera verlo más. Su corazón se congelo,le dio mucho miedo, quería salir a buscarlo.
―¿No deberíamos esta buscando a Nicolás?
―Ya mande a mis hombres, les cuento lo que ocurrió e iré en su búsqueda si no hay noticias suyas
Annia no estaba conforme, pero no dijo nada.
Rebeca miro a su esposo sabía que estaba muy preocupado por hermano y la reunión. Le sonrió tratándole de dar fuerzas.
―Es necesario, que ambas sepan que paso en la reunión. Ahora mismo Arik y Garnier les están diciendo a sus esposas y familiares lo mismo que les voy a decir.
El propósito que fuimos convocados fue por que a Garnier se le aprecio Bakar el solitario.
―Ese cuento de hadas, ya te dije que no creo que exista
―Cariño, te equivocaste. Existe y contacto con Garnier
―Genial, cuenta ¿que ocurrió? ¿Cómo es?
―No fue para nada bueno. Más bien fue para algo muy malo. Nos llamaron para informarnos que el planeta va perecer en 100 días debemos encontrar las 7 piedras mágicas que conforman el alma de de Nuis.
―¡7 piedras! ¡ Por la diosa! Cristian tenemos tan poco tiempo ¿Cómo vamos a encontrarlas?
―No lo sé. Estoy al cargo de la investigación junto con Nicolás y Rafael Santinni.
―¿Qué le paso a tu hermano? Pregunto Annia sin poderse contener.
―Se desmayo. Bakar nos dio un arma muy poderosa que nadie más que él puede ver.
―¿El arma se activo?
―Por un momento creo. Tomare una chaqueta, me despediré de los niños y saldré a buscarlo.
Rebeca fue decisión de Gregory pero comparto su modo de pensar que nos mudemos al castillo, será mejor que...
En ese momento entró Nicolás aun pálido se veía cansado y un poco enojado.
―Darius, no soy un criminal para que me hagas buscar por tus hombres.
―¿Estás bien? preguntaron al unísono Annia y Rebeca
―Si, solo cansado voy a mi habitación ¿si me lo permites hermano?
Darius deseaba pegarlo pero no lo hizo.
―Haz lo que quieras, eres un infantil y malagradecido. Podía haberte pasado algo.
Nicolás no respondió nada y fue directamente a su cuarto, se quito la camisa y los zapatos. Luego se acostó rendido en la cama aun estaba agotado.
Annia se sentía muy preocupada hirvió agua para hacerle un té Nicolás y calentó un poco de sopa, tal vez le apeteciera comer algo liviano. Estaba nerviosa iba y venia con una bandeja de comida en sus manos. Sudaba, se sentía aterrada no entendía que le pasaba, solo sabía que estaba preocupada por él y deseaba verlo bien, cuidarlo hasta que se mejore.
Toda la rabia del pastel se le quito cuando supo que estaba enfermo y fue peor cuando lo vio así, tan pálido y demacrado.
Respiro hondo, su corazón latía a mil por hora. Golpeo la puerta de Nicolás
Esté se levanto para abrirla
Annia trago pensó que lo vería enfermo, feo, demacrado. No así, tan tentador sin camisa mostrado su pecho mostrando un cuerpo perfecto listo para pecar. Deseaba pasar sus manos, su lengua por aquel pecho. ¿Por la diosa que le estaba pasando?
―¿Qué deseas?
―Ver si estabas bien, tal vez quisieras un poco de té. También te hice caldo de verduras, mi madre decía que eso da fuerzas
―No necesito nada, guárdate tu comida y tu lastima.
Annia se puso colorada
―No es lastima.
― No te creo. Es imposible que doña perfecta venga a buscarme a mi. ― ¿Qué deseas en realidad?
Ella se quedo sin palabras, aún con la bandeja en las manos.
― Darius, te mando. dile que no soy un bebe.
― No me mando él.
Nicolás se acercó a ella. Examinándola, Annia se sentía casi desnuda.
― No entiendo, ¿por qué estas aquí?
La muchacha, dejo la bandeja en una mesa y se dispuso a salir. Tenía miedo de tirarle el plato y romperle la cabeza o soltarlo y desnudar a Nicolás. Un poco confundida y algo turbada por sus ideas examino su habitación que estaba completamente desordenada llena de libros y artilugios.
― Ya te lo dije, pensé en que esto te pondría ayudar.
―Es lo que no entiendo ― Resoplo, Nicolás acorralándola en la puerta.
― ¿Qué?
―¿Que te preocuparas por alguien a quien le considera infantil y un estúpido?
Annia miro al suelo. Ni ella sabía que pensar ¿Por qué razón estaba en su habitación?
Nicolás no sabía que hacía solo que el deseaba sumergirse en el cuerpo de ella y al mismo tiempo castigarle por haberle dicho tonto. Sin poderlo evitarlo paso su nariz por su cuello , percibiendo su olor a limón especias. A pesar, de su debilidad se sentía excitado como nunca antes. Contra su piel susurro.
―¿Por qué estas aquí? ¿Que deseas en verdad? No soy un animalito al cual socorrer. Si estás aquí tal vez es por esto.
La miro a los ojos y luego puso sus labios ferozmente sobre los de ella y los probo.Annia respondió ferozmente a su beso sin importarle nada . Fue cuando sintió las manos de él sobre su pecho que la razón y el miedo hicieron su aparición
Le dio una patata en la ingle y se escabullo de sus brazos.
― Veo que estás bien. No debí venir.
Luego de decir esas palabras salio corriendo sintiéndose algo tonta. Nicolás vio sus ojos casi con lágrimas y sintió como temblaba. Quería abrazarla, consolarla y al mismo tiempo sentirse seguro en sus brazos. Más le dejo irse sintiéndose un tonto.
5 comentarios:
AHHH que barbara estuvo genial!!!! Que si sera cierto que a Annia le gusta? jajaja esos dos estan que arden.
Por cierto tienes premio en mi blog.
Que estes bien!!!
Ya empiezan a acercarse, bien!! Ya estoy deseando verles más juntitos, más besos y más de todo, jeje.
Que tengas muy buen fin de semana Citu. Besos!
Hace un rato quise comentar y no podia :(
Vamos a ver si ahora si queda.
Linda la historia... me encanta Nicolás!!
Nos leemos Citu... besos!!
Bueno, empiezo a comprender a Annia.
Me encanta que cada vez la historia se torne más tierna.
Haber cuando llega ese beso por dios!!
Besos guapa
Awww! Me gustó como terminó el capítulo, quiero leer más!
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