Bienvenidos a mi blog. He creado este por que tengo un montón de historias en mi mente que me gustara compartir. Miles de mundos y personajes siempre me acompañan, decidí, que era hora de hacer que fueran conocidos. Quiero, que sean capaces de expresar y soñar junto a mi. Espero, que les guste mi casa y tendrán una voz aquí. Mi cariño y amistad también.

lunes, 26 de septiembre de 2011

Corazones en la niebla. Capitulo 20 (parte 2)

Bueno aquí les dejo un capitulo más y les deseo una buena semana

Capítulo 20

Las  guerreras  ( segunda parte)


Cuando tomaron las cosas y estaban apunto de marcharse. Las mujeres, se miraban las unas a las otras, sin saber que decirse y con mucho miedo. Se sonrieron nerviosas, intentando darse esperanza. Annia camino miró por ultima vez a sus amigas Rebeca iba a rescatar a Darius, Diana ayudaría a Arik, Yusbel se quedaría ayudar a Garnier.

Ella daría los lanzallamas a la princesa dragón. Estaba aterrada en toda la reunión formulando planes, no dijo una sola palabra. Solo sabía que tenia que ayudar a Nicolás, esperaba verlo vivo sin una herida, quería abrasarlo de nuevo y  besarle solo una vez más. No tenía idea que le iba decir cuando lo viera como se comportaría. De lo único que estaba segura era, lo mucho que lo había extrañado y saber que estaba en peligro la impulsaba seguir. No era una guerrera, no tenía mucha educación como su prima. Solo su valor y tenacidad la impulsaban, vio a la princesa dragón esperándola y decidió evadirla. Sabía que ella tomaría los lanzallamas y la mandaría de nuevo a la nave. Para ella era muy importante ver a Nicolás no podía esperar en la nave sin hacer nada, debía ayudarlo su corazón se lo ordenaba.

 ****** 

 Rebeca miró a su alrededor su prima y Diana la habían dejado sola, se había perdido,  casi todos los materiales de su botiquín los había tirado. Apenas podía cargar con tanto peso y la verdad no era una guerrera, temblaba llena de miedo. Se preguntaba que había pensando cuando convencieron a Garnier de irse ayudar. Y si moría tratando se salvar a Darius quien se haría cargo de sus gemelos, no podía pensar en eso ahora. Ya había tomado una decisión iba ayudar a liberar al hombre que amaba, no quería que sus hijos se críen sin su padre. Respiro hondo no podía claudicar ahora. 

 Gregory vio a Rebeca y pensó que debía matar a su cuñado, si salía vivo. Se preguntaba una y otras ¿en qué rayo estaba pensando cuando mando a esas mujeres allí? Rebeca ni siquiera ocultaba su posición, cualquier momento uno de los hombres de Negrui la vería y apresaría. 

Rafael ya había salido a retar Aviel Negrui, casi la mayoría de hombres estaban concentrados en la pelea Se apresuró a ir a donde, se encontraba ella y la empujo para ocultarla, si bien los ladrones que estaban distraídos. Sin embargo, había algunos vigías. Era preciso ser cauteloso algunos vigilaban de vez en cuando. La idea del rey Epifanio había sido muy buena, ni bien apareció Rafael todo hombre del campo fue haber la pelea. De tal forma que la princesa la striptease de la princesa Catalina fue ignorada, ella ofendida hizo un berrinche que hizo que hierran a su nuevo amante. 

Aviel para distraerla le mando a torturar a Darius, con la condición que no lo matara, ella y tres de sus hombres fueron a un edificio distante. Gregory estaba encantado seria más fácil rescatar a su amigo con tan pocos obstáculos, lo que más miedo le daba era que Rebeca no pudiera controlarse al verla la forma sádica en la que era torturado su esposo. Así que decidió tomar los lanzallamas y mandarla a la nave. 

Pero, en ese instante Darius grito del dolor al ser su brazo quemado. Rebeca piso a Gregory lo empujo y corrió como loca al edificio derrumbado, fue capturada irremediablemente por los hombres de Negrui. 

 Catalina rió al verla 

 ― Así, que la ballena, va a rescatar a su marido. Tanto miedo tienes de no encontrar otro hombre con tan mal gusto. 

 Rebeca no dijo, Gregory no sabía que hacer para salvarla, fue cuando Catalina le dio una cachetada. 

La curadora es ese instante clavo unas púas a lo hombres que le sujetaban dejándolos paralizados. Dairus intentaba liberarse desesperado temiendo que Catalina le hiciera daño a la mujer que amaba. 

Rebeca le sonrió y dejo que la ex princesa se le acercara de nuevo a golpearla, aun ella no se había dado cuenta que los hombres que la protegían estaban paralizados. Iba a lanzarle un golpe a Rebeca pero esta le sujeto el brazo y le clavo como 10 púas venosas en los brazos dejando a Catalina paralizada, con la piel roja y comenzado a en roncharse. 

 Darius tardo un minuto en reaccionar . 

 ―¿Rebeca que haces aquí? 

 ―No es obvio te vine a rescatar.

― Dijo Rebeca acercándose a Darius y rompiendo sus ataduras. 

 ―¿Y los niños? 

 ―Están con tu madre, antes que me reclames… 

Darius estaba libre y lo único que pudo hacer fue abrazarla y besarla. Quería gritarle hasta el cansancio, pero no tenía fuerzas, ni animo para nada más que amarla. En ese instante se apreció Gregory. 

 ―¿Pueden dejar de hacer eso? Darius miro a su rey sorprendido 

―Maldita sea, ¿Gregory que haces aquí? 

 ―Vine a salvarte. 

―Ayyyyyyyy ― Grito Rebeca al ver una planta negra acercarse a ellos y lanzo fuego en forma desesperada terminando con la planta. 

 Los tres corrieron hacia la nave. Pronto Ariel y su grupo tomarían las joyas de la cuidad para despertar a los gigantes de piedra. Diana lloraba y maldecía al mismo tiempo, su esposo Arik la envió a la nave con toda su carga diciendo que no podían trepar a los gigantescos edificios llenos de piedras preciosas con tanta carga. 

 Oyó unos gritos y fue haber en vez de ir a la nave, se quedó estupefacta al ver a Gregory lanzando llamas a una planta que parecía devorarlo todo. Corrió otra vez en busca de Arik y su grupo.

Su marido, estaba trepando a uno de los edificios, cuando vio volver a Diana. Se sentía muy mal por haberle gritado, a pesar de que se ganaría una reprimenda de Ariel empezó a bajar. Cuando oyó a Diana gritar . 

 ―Muévanse, que pronto serán atacados. 

 ―¿Qué diablos?― Grito Arik cuando vio que atrás de Diana avanzaba una nube negra. 

 La  dama blanca, se viró y empezó a utilizar los lanzallamas con fiereza. Ariel e Inara ni siquiera vieron la escena siguieron subiendo. 

Ariel cansada toco con distracción una de las piedras preciosas, luego sintió un estruendo y apenas pudo agarrase del edificio, que empezó a transformarse en un gigante de piedra. 
Diana mando un deslizador a su mejor amiga, Arik casi se mata, pero pudo bajar sin ayuda. Inara recibió el otro deslizador y bajo sin problemas la tierra temblaba, grandes rocas caían y las matas negras empezaban avanzar cubriéndolo todo. 

 Arik fue a lado de su esposa y le dijo en voz baja y con vergüenza. ―Perdón, tenías razón llanic. Diana sonrío con placer, sin importarle que estaba aterrada, con raspones y calor. 

 Gregory mandó a Rebeca y Darius a la nave, y fue en busca de su esposa para intentar ayudarla miro a la plaza los matones corrían aterrados.  Solo Rafael y Aviel Negrui luchaban sin importarles que todo alrededor colapsa. Ariel corrió a los brazos de Gregory y lo beso desesperadamente. 

 ―Monstruo, temí que te hubiera pasado algo. 

 ―No hay tiempo para eso ―Grito, molesto Arik que veía partir a la mujer que amaba. 

 ― Cierto.  Respondió Ariel sonrojada, mientras como todos iba en busca de Nicolás y de la princesa dragón. 

 ****** 

Adela estaba furiosa esas chicas tontas arruinarían su misión, odiaba fracasar en algo. Resignada se quitó el sudor del rostro eran mediodía y el calor era abrasador. Sintió un fuerte temblor y oyó unos gritos. Fue rápidamente en esa dirección Annia trataba de salvar a unos de su hombres de ser tragado por una hiedra negra. Enseguida empezó ayudarla, con trabajo pudieron salvar al hombre. 

 Debían actuar rápido y entrar al edificio mandaron al soldado a la nave. Juntas entraron antes que la hiedra negra las alcanzara. Todo temblaba y algunas piedras caían. A ambas les daba miedo quedar sepultadas. 

―Aquí es el lugar, donde se encuentra tu amigo ―Dijo Adela mirando como una gran piedra casi les cae encima. 

 ―Déjame bajar a mí. ―Suplico Annia. 

 ―No, solo conseguirás matarte y perder tiempo. 

 ―Por favor necesito ir, ver si está bien. Ese hombre es importante para mí. Tengo tanto miedo, por favor a… 

 ―Deja de hablar. Me va a dar dolor de cabeza. Ve si tanto quieres ir, pero si te matas no es mi culpa. 

 Annia sonrió y estuvo a punto de abrazar a la mujer, hasta que vio su rostro poco amistoso. Se ató una cuerda y rezo por no matarse antes de encontrar a Nicolás. 

 Adela se sentía rara, odiaba dejarse llevar por sus emociones en el fondo era una romántica, minutos después que Annia bajo. Llegaron el rey de Sivcar, su esposa y otro hombre. Nicolás estaba sentado en la tierra llena de dolor, no veía nada y apenas podía defenderse de que una planta lo eliminara, podía percibir como rozaba su piel y quería estrangularlo. 

Sintió una presencia extraña, alguien bajo. Tomo lo primero que encontró y le pego 

 ―Maldita sea.  

―¿Quién es? Pregunto Nicolás esperanzado parecía la voz de Annia, pero era imposible ella estaba segura en Sivcar. 

 ―¡Mierda! ¿Siempre me vas a preguntar eso? ―Annia dijo. ― Mirando a Nicolás tanteando en la oscuridad, cuando ella lo vio así quiso llorar. Se contuvo y se lanzó a sus brazos. 

Estuvieron un rato solo acariciándose, sintiendo el calor del otro. Hasta que Nicolás empezó a besarla el rostro, el cuello, los labios con desesperación.  

 ―No sabes, como te extrañado. Pensé que moriría, sin verte 

―Murmuro contra la piel de Annia. ― Ella tomó su rostro y lo beso en la boca, no quería hablar solo deseaba sentir su contacto. 

 ―Lo encontraste Annia. ― Gregory gritó. 

 Dejaron de tocarse se miraron con deseo, pero sabían que tenían que volver al mundo real. 

 ―Sí, está bien es hora que nos saque de aquí. 

 ―Aún no, ―dijo Nicolás encontré el libro solo debemos encontrarlo y copiar lo que necesitamos. Yo no veo pero tú puedes ser mis ojos, te necesito Annia. ¿Me ayudas? 

 Ella le sonrió y pregunto ―¿Qué debo hacer? 

 ―Busca un libro rojo con un dragón negro. Annia pasó varios minutos hasta que lo encontró. Nicolás y ella ataron la cuerda alrededor de sus cuerpos, momentos más tarde fueron jalados. Gregory los ayudo a salir casi todo estaba en penumbra les tomo mucho esfuerzo y terminaron con todos los lanzallamas pero llegaron a la nave. 

En el exterior, todos incluso el rey Epifanio puesto una gran venda ayudaban a no dejar que la hiedra avance y destruya la nave. 

 ―Marchémonos ¿qué esperamos? ―Gruño Adela 

 ―A Rafael, ― dijo Diana a punto de caerse al suelo Arik la sostuvo. 

 ―Enciendan los motores yo lo busco, antes que alguien pudiera detenerla ella fue corriendo tomando el último lanzallamas. 

 Los hombres de Aviel Negrui parecían haber muerto, solo su jefe peleaba con aún con Rafael Santini Vio aparecer a la princesa y dijo 

 ―¿Parece que te buscan? 

 ―No me iré hasta matarte. 

 Aviel rió y con un chasquido lanzo las matas negras sobre Rafael, mientras huía en busca de la princesa Catalina, la encontró tirada en el piso a punto de ahogarse. 

 Rafael maldijo iba morir fue cuando vio una cara enfada y llena de sudor, era la princesa Adela, más bella de lo que recordaba ella casi le quemo para liberarlo 

 ―Ay, ten cuidado. 

―Agradéceme que te ayudo, aunque es contra de mi sentido común. Vamos.  

Unos minutos más tarde salían de ese horrible e inhóspito lugar volar acechados  por  por grandes monstruos de piedra y  los tentáculos de varias plantas. 


5 comentarios:

El Drac dijo...

Qué buenos son los relatos, al menos la mayoría, que puedes darle un final feliz a completa voluntad. Un fuerte abrazo

Lilyka dijo...

Me ha encantado Citu que rico un beso de Darius dichosa Rebeca. Y me encanta como describes los sentimientos entre Nicolas y Annia.

Wendy dijo...

Sabes que siento debilidad por Rebeca, desde que nos la presentaste es mi favorita, es una mujer muy peculiar y con gran encanto.
Te he echado de menos y me alegré mucho de que cierta persona te pidiese disculpas.
Eres un cielo.
Un beso.

Eileen dijo...

Opino lo mismo que Wendy, Rebeca es estupenda. Me represento con ella, con su personalidad. Y sobre todo luego de ese escenazo...!! jajaja la envidio aun mas.

Vuelvo a comentar como siempre, aunque me demore un poco..

Besos!

Iris Martinaya dijo...

Parece que Rafael encontró a su media naranja, jeje, yo pensé que sería Inara. Que bonito el encuentro entre Annia y Nicolas.

Besos