hola ¿cómo están? Muy pronto es navidad , así que mi regalo será darles un fragmento grande de mi historia . Lo he adelantado para el miércoles para que lo lean con más calma sin el ajetreo por navidad. Ahora Sabrán que paso con Heli y sobre todo si Sebastián y Amelia sobrevivirán al killing .
Capítulo 36
Heli miró con regocijo cuando el asqueroso demonio de tres cabezas la perdió de vista. Quería gritar de la emoción las cosas iban a ser más fáciles de ahora en adelante.
Lo único que tenía que hacer era conducir a los jinetes hacia su destino. Nada podía salir mal . Estaba a punto de irse al castillo acuático. Cuando sintió un olor asqueroso y algo le sujetó las piernas.
—Puedo no verte, pero siento tu olor. Me apasionas, tetas lindas.
Heli maldijo en voz baja.
—Puedo escuchar el desagrado al percibir mi aroma y eso que no estoy excitado. Aunque si te tengo más tiempo lo estaré. Vas a ser mía .
Heli no supo que le produjo más asco el olor del demonio o saber que el demonio estaba encaprichado con ella. Se preguntó por qué siempre atraía a los hombres y demonios feos.
Aunque ese no era el momento de dudas existenciales. Tenía que liberarse del demonio cuanto antes. Una especie de tentáculo empezó acariciar el muslo mientras ella estaba cayendo al vació.
— Ríndete te va a gustar.
—Nunca.
Heli aún sujeta prefirió estrellarse a en el suelo que seguir siendo prisionera de la bestia olorosa. Azidahaka perdió el control al estabilizarse. La media elfa aprovechó para escapar. Desesperada abrió el portal para ir al castillo.
Azidahaka maldijo cuando percibió a la puta humana escapar. Esa mujer tenía mucha suerte. Había sido fácil sentir su poder aunque se encontraba invisible. La piedra de luz emitía un sonido que podía ser percibido por cualquier demonio de dos cabezas en adelante.
Le encantó torturar a la mujer. Tenía muchas ideas planeadas cuando fuera su esclava . Ni siquiera su media hermana Anazareth lo excitó tanto, al sentirla cerca . Se prometió que iba a hacer que Heli se convirtiera en su amante y lo ayudará a vencer a Úvatar. La media elfa tenía un poder que nunca antes había percibido. Una de sus cabezas se lamió lo labios con deseo, la otra eructó y la última solo gritó de furia. Antes de reclamar el poder de Heli debía atraparla y no perder más tiempo. De seguro que la mujer estaba a punto de mandar nuevos jinetes. Solo quedaban tres mundos. Decidió, no perder más su tiempo . Se hurgó la nariz y saco tres mocos enormes los dispersó en los tres mundos que quedaban cuando sintieran la presencia de la media elfa ellos estallarían y emitirán un sonido que le avisara cuando llegara su presa.
Heli por fin escapo y su alivio fue momentáneo. Se sintió mareada y algo tonta. Apenas podía articular algún pensamiento. Al abrir la puerta rodó y estuvo a caer al piso, pero alguien se lo impidió.
No necesitaba ver el rostro de esa persona para saber quien la había ayudado. Maldijo , mas no se soltó de su agarre ya que estaba muy débil.
Por lo menos podía respirar de nuevo y se encontraba a salvo aunque no le gustará la compañía.
—Me sueltas, por favor.
Seirim de mala gana lo hizo. No podía entender su reacción a la elfa. Era muy tonta y aunque era muy linda no era su tipo . Él conocía demonias más bella y sexis. Sin embargo, desde que la oyó cantar no podía dejar de pensar en ella.
—Puedes mantenerte en pie para que lo haga.
Heli respiró profundamente en busca de fuerzas —Sí — Seirim soltó a la mujer que se tambaleó un segundo para luego mantenerse en pie.
—Gracias por ayudarme.
Seirim miró la piedra de luz.
— No deberías utilizarla.
—¿Por qué? — Heli lo miró enfadada.
Seirim alzó su ceja derecha y la expresión de su rostro le hizo creer a Heli que pensaba que ella era tonta o algo peor.
—La piedra de luz emite un sonido que los demonios con más de dos cabezas pueden percibirlo con facilidad .
—¿Enserio?
—La persona que te lo dio debía saberlo, además consume mucha energía tapa la piedra cuando no la uses y limita su uso a segundos para que Azidahaka no pueda localizarte.
Seirim sacó una funda pequeña de seda negra y se la dio a Heli .— Úsala te va a ayudar.
— Gracias.
Seirim no la escuchó se fue de la misma manera sorpresiva que le ayudó. A Heli siempre le confundía ese demonio estirado.
No tuvo mucho tiempo para alterarse porque un muchacho pelirrojo con granos y expresión arrogante la fue a buscar.
— Vas a seguir babeando por ese demonio. Pensé que estabas comprometida a salvar los mundos y no a conseguir pareja.
—Lo que haga, no es tu asunto. Voy a buscar a Vanora para salvar el cielo azul.
Lolindir la miró desesperado y tocó su hombro.
—Por favor, ayúdame. no puedo aguantar más ese sufrimiento. Si no salvas a Seragon me mataré en este momento.
Heli frunció el ceño y fue con el dragón convertido en humano hacia el lugar donde se encontraba Gilraren. La dragona de cabello lila estaba viendo en una tableta una novela coreana y el ave fénix parecía muy interesado graznando estrepitosamente.
Lolindir miró desesperado a Heli.
— Por favor.
Heli se rio y fue al lugar donde se encontraba su amiga.
—Creo que es su turno.
Lolindir grito emocionado — ¡Por fin!
Gilraren miró con preocupación a Heli.
—Estás pálida. ¿ Qué pasó?
Heli nerviosa miró alrededor. Solo se encontraba Anazareth hablando con Bromm y Vanora. Se preguntó ¿En dónde diablos estaba Seirim?¿ Y por qué le importaba saberlo?
Se concentró en lo que su amiga hablaba y luego de un par de minutos dijo. — Me enfrente a un demonio apestoso con tres cabezas.
—Azidahaka — interrumpió Lolindir.
Gilraren gruño —Es un demonio asqueroso le encanta comer bebes de cualquier especie.
Heli hizo una mueca de desagrado.
— Los dragones lo odiamos y deseamos su muerte. Su entrada es prohibida en Seragon.
Heli asintió.
—Pensé que esta piedra me ayudaría, pero sólo me mareo.
Lolindir Y Gilraren observaron el artilugio con escepticismo.
— Creo que es la piedra custodiada por Linwe, es muy valiosa entre los elfos.
Lolindir interrumpió Gilraren —. Sin embargo, es una basura. Los seres superiores a los elfos podemos sentir su poder. Usa su poder con moderación .
Heli a su pesar, guardó la piedra en la bolsa pequeña. Aún se sentía débil, pero no podía perder más su tiempo .
— Será mejor que nos marchemos.
Gilraren miró a Heli y luego gritó.
— Espera, ya vuelvo.
Heli se quedó con la boca abierta sin entender a donde sé se fue su amiga.
—¿A dónde se fue?
— Ni idea ella está loca.
Heli frunció el ceño, luego de varios minutos la dragona llegó.
—Ten — le dio unos caramelos y un pedazo de tarta de fresa.
— El azúcar te ayudará a tomar energías.
— ¿Por qué no me trajiste nada a mí?
Gilraren puso los ojos en blanco — No lo necesitas y pensé que odiabas la comida preparada.
Lolindir gruñó.
Heli que estaba a punto de tener jaqueca creo una puerta y se fue al mundo salvaje de los dragones.
Seragon al igual que los otros mundos eran una masa negra. por lo menos los dulces hicieron que ella se sintiera mejor. Esperaba oír o sentir algo en su lugar, pero no ocurría nada. Lo peor es que Azidahaka apareció de nuevo .
— Espero que me hayas extrañado.
Heli sabía que no podía huir hasta que los jinetes a lanzar el polvo de la esperanza y sanear su mundo. tanto Gilraren como Lolindir estaban algo verdes y a punto de desmayarse.
—¿Qué pasa?
— El aire está envenenado .
A lo lejos Heli oyó la risa de Azidahaka.
—Esta vez no podrán saneara al mundo y todos morirán. ¿ Quieres salvar a tus amigos, rubita? Ven conmigo puedes traer a la mujer de cabello morado . Adoro los tríos.
Ambas mujeres gritaron asqueadas — Eww.
Lolinder se tambaleaba y estaba a punto de caer del ave fénix . Heli pensó en abrir la puerta y trasladar a los jinetes a sitio seguro , pero eso no remediaba nada.
Azidahaka se acercó — Ríndete.
Heli pensó en Amelia, Ana y Gilraren. Si se rendían ellas pagarían las consecuencias. pudo vencer al demonio de tres cabezas antes . Solo debía encontrar la forma.
Se acercó a Gilraren y le susurro.
—¿Hay alguna forma de disipar el veneno?
Lolinder con voz lastimera respondió — fuego de dragón.
— No podemos transformarnos mientras estemos encima del ave.
El veneno actuaba rápido y pronto mataría a los dos jinetes.
Gilraren odiaba convertirse y volar. Sin embargo, debía hacer algo. Dio las riendas Heli y se lanzó al vació Azidahaka quiso detenerla pero la dragona fue más rápida.
Heli temía que el fuego o la violencia haga que el fénix no los ayude. Mas Gilraren al convertirse en dragón lanzó una llamarada al vació y empezó a purificar en el aire sin herir al demonio que la causaba fuertemente.
Lolinder ya no estaba verde y su color de piel se encontraba normal.
—Debo ayudar a Gilraren — Luego de decir eso se tiró al vació que cada vez estaba más oscuro.
Heli no sabía qué hacer , hasta que olió a tierra mojada y el viento golpeó su cara. Un intenso aroma a flores y árboles impregnó el ambiente. Se alegró al darse cuenta que la arena brillaba llamó a sus amigos.
Gilraren se transformó de nuevo y empezó a cantar mientras Lolinder volaba dispersando la oscuridad.
Heli preocupada preguntó —¿Dónde está el demonio apestoso?
— Huyó cuando Lorinder se transformó — Temió luchar con él.
— Será mejor que me marche.
Cuando Heli iba a desaparecer sintió un horrible olor. Aún se encontraba en Seragon aterrizó en tierra firme . Miró a la vegetación que estaba recién volviendo a florecer. Respiró hondo antes de decir—Azidahaka ya estoy cansada . Me rindo.
Azidahaka gruño de la felicidad.
— Dame un beso, seré tu esclava
Azidahaka se transformó en un hombre atractivo. Heli se acercó y en lugar de besarlo le golpeó en la entrepierna. Luego tomó la piedra de luz y desapareció hacia el castillo.
Sebastián suspiró resignado a tener a su lado a Amelia. No deseaba que ella luche a su lado y mucho menos que se enfrente a ese monstruo. Amelia temblaba a su lado. Sebastián quiso golpearse al darse cuenta que ella estaba desnuda y él no la socorro. De inmediato se quitó la chaqueta y se la dio. Amelia solo le sonrió.
—¡Qué tiernos! Su comodidad y seguridad debe ser lo último que te preocupe. Ella te va a matar para salvarse. ¿Crees que su bonita historia de amor dure el primer ataque?
Sebastián no pudo decir nada la tierra se abrió de nuevo y la horrible y viscosa bestia de tres cabezas salió a destruirlos . Como si eso no fuera suficiente el piso y todo lo que les rodeaba se infectó por las sombras y el killing de Úvatar mandaba rayos a la pareja.
Sebastián sabía que podía perder la vista, pero era mejor quedar ciego a ser comida del monstruo o ser destruido por la sombra de ojos rojos.
Con todas sus fuerzas creo una barrera de fuego que los proteja no sabía por cuánto tiempo.
— Amelia mata a ese perdedor. Sigue tu destino, él no podrá resistir por mucho tiempo.
Amelia tomó la mano de Sebastián y la apretó. fuerte.
— Mi destino es morir o convertirme en parte de ti. Prefiero la muerte.
— ¿ Deseas la muerte de humano también? Por protegerte está perdiendo sus fuerzas . ¿Quieres eso?
Amelia miró a Sebastián que estaba pálido de sus ojos salía sangre pero aún sostenía su mano y con la otra creaba una barrera para defenderla.
Ella iba a soltar la mano de su amor, pero él no la dejaba.
— Vine para salvarte, no soy un héroe. Soy simplemente un hombre que te ama y necesita. Prefiero perder mi vista y mi vida que dejar que sufras. Creo que nosotros juntos podremos vencer a ese monstruo.
El killing se rio y mandó una bola de energía que destruyó la barrera de fuego de Sebastián y los tiró al piso la bestia de tres cabezas estaba a punto de agarrar a la pareja y matarla.
Sebastián ya no pudo ver se encontraba en tinieblas y su mayor temor que era de perder a su amor estaba a punto de convertirse en realidad. Desesperado gritó — Amelia.
Pero nadie le respondió volvió a gritar — Amelia ¿ dónde estás?
— A tu lado Sebastián.
Amelia no tenía idea de que forma salvar a su pareja y a ella misma. El dolor y el miedo le nublaban la mente. Sebastián cada vez estaba más pálido y ella podía salvarlo a costa de su propia alma.
Solo la seguridad de su amor importaba iba a decir algo, pero él aún sostenía su mano en medio de la oscuridad que los rodeaba.
— Ir con el demonio es la salida fácil . Sé que tienes miedo, pero tu luz una vez venció al monstruo de ojos rojos. Solo tú puedes vencerlo, siempre estaré a tu lado. Confío en ti.
Las lágrimas de Amelia cubrieron su rostro
—No sé ¿cómo vencerlo?
Antes que Sebastián pudiera decir una sola palabra el demonio llegó y tomó a Amelia del cuello.
—No puedes vencerme, pedazo de mierda.
Amelia sintió un gran dolor.
— Este es tu castigo por desobedecerme. Ahora veras como mato a tu amor.
La mano de la sombra se volvió una espada afilada y empezó a rasgar el cuello de Sebastián.
Amelia gritó y una luz de su interior salió e iluminó toda la habitación. El killing de Úvatar chilló por el dolor que Amelia le infringió y soltó a Sebastián.
— Maldita ,pagaras por eso, haré que te arrepientas eternamente.
El kiling concentró todo su poder en un rayo con el deseo de matar a Sebastián y herir gravemente a Amelia.
Sin embargo, el rayo fue atenuado por una barrera de piedras.
— Ellos no están solos.
Adremelech por fin llegó ayudar a su alumno y a la humana.
Sebastián no podía creerlo su maestro vino a protegerlo una vez más. Aunque no confiaba en Adremelech parecía que el demonio rubio siempre le estaba salvando el pellejo.
—¿ Crees que podrías destruirme?
Adremelech no contestó frotó sus manos y de ellas salieron unas perlas de luz que destruyeron a todas las sombras que rodeaban a Amelia y Sebastián.
— Puedo destruir a las sombras que has creado , pero como tú sabes no puedo matarte.
Sebastián que aún abrazaba a Amelia se sintió desanimado al oír al demonio. Pensó en qué mal momento eligió Adremelech para ser sincero. El killing de Úvatar se rio y lanzó un rayo de color negro al demonio que fue disuelto fácilmente.
Adremelech bostezo lo que enfureció a la sombra. Sebastián empezó a moverse para sacar a Amelia del peligro.
—No te muevas.
— ¿Tienes miedo por ti o por la basura que defiendes?
— Ellos no son basura y tú eres el que tiene miedo puedo olerlo.
El monstruo fue tras Sebastián y Amelia mientras la sombra mandaba rayos a Adremlech.
El demonio ni siquiera le importó esquivar los rayos fue directo a donde estaba la bestia viscosa y de la nada tras unos movimientos creó una espada y cortó las cabezas que tenían forma de dinosaurio Rex con dientes muy afilados .
La sombra aprovechó el descuido de Adremlech y quiso sujetar a Amelia pero Sebastián lo sintió y le mandó una llamarada.
—¿Estás muy lento, sombra de Úvatar? ¿ acaso no estás herido?
—Tu no me has hecho nada.
Adremlech miró a Amelia que a pesar de la pelea y de los maltratos aún seguía luchando.
—Es cierto, yo no te herí, fue ella —. Señaló a Amelia — Una simple humana puede destruirte. Pasaste horas torturándola y no la quebraste.
El kiiling gruñó — ella no me hará nada. Me tiene miedo.
—Eso no es cierto ¿cómo lo destruyó? Por primera vez desde que fue raptada Amelia supo que necesitaba convertirse en una guerrera destruir a la sombra. Era necesario no solo por ella , sino por todos. Ella observó los planes de Úvatar.
Adremlech sonrió — Tiembla ha llegado tu hora. Las sombras van desapareciendo y es momento que tu solo seas un recuerdo.
Sin embargo, Amelia no sabía qué hacer para destruir a la sombra. En lugar que el demonio rubio le explicase algo fue Sebastián el que hablo.
El vampiro estaba en tinieblas y muy débil. No se recuperó de ataque de Úvatar, mas quería pelear.
— El primer paso es no tener miedo. Cuando te golpean y te humillan tu opresor cree tener el poder, pero es todo lo contrario ellos te necesitan a ti y tu no a ellos. La sombra te castigo tanto que olvidaste hasta tu nombre, pero no dejas de ser Amelia y eres fuerte.
Amelia quiso contradecir a Sebastián ella no se sentía fuerte , pero estaba harta de llorar y sufrir.
Sebastián apretó la mano de la mujer que amaba no dijo una palabra más. Ella supo que no estaba sola.
— ¿ Qué debo hacer? — preguntó al demonio rubio.
—Respira concentra tu poder y con la luz de interior disipa las sombras. Amelia ya no eres una simple humana puedes controlar luz y oscuridad. Ahora es el momento destruye a la sombra de Úvatar.
El killing de Úvatar se rio — No va a hacer nada he visto su interior me teme. Ella no es Amelia, no tiene identidad y solo escucha mis órdenes. Ven.
Amelia soltó la mano de Sebastián y fue a donde estaba la sombra de ojos rojos. El pintor la llamaba desesperado, pero ella ya no era Amelia. Cerró los ojos y en lugar de sentirse sola escucho la voz de su madre, la de su abuela y la de Zahra.
Puede que ella ya no tenga recuerdos y no sea la misma chica ingenua que era, pero el amor y la fuerza aún estaban en su interior . Siempre se hallaron ahí y era hora de utilizarlos. Creó una mariposa de luz y la lanzó hacia la sombra.
Espero que les haya gustado el capítulo . Les deseo un lindo día
11 comentarios:
Hola Citu, buenas tardes,
menuda batalla se ha generado alli... no faltaba nadie,
y....????
le lanzò la mariposa y què???
otra vez lo mismo contigo...
como te gusta hacernos volver a por mas eh =)
Muchas felicidades,
excelente resto de semana
un càlido abrazo
sigo anònimo, pinche blogger
atentamente Ariel
Qué bueno, va gential. Y te confieso que me he reído con lo de la transformación y la patada jajajaja
Besos
Pobre Heli con ese demonio que no la quiere dejar en paz, esa batalla estuvo genial y ahora que pasará me dejas con la intriga, gracias y saludos!
Hola, JP... Desde luego que Azidahaka es repulsivo
A Seirim le gusta como canta Heli... y Heli también se ha fijado en él
Bueno, la verdad es que lo han pasado todos muy mal
El killing de Úvatar es otro repulsivo... me ha gustado que Adremelech llegara para ayudar a Sebastián y a Ana
Y lo has dejado muy interesante
Besos
Amiga escritora,en estos dias de invierno,el calor de tu amistad,nos puede ayudar a mitigar estos frios
Un fuerte abrazo
Muy intenso capítulo, lleno de acción. Eso es, Amelia necesita ser valiente guerrera para destruir a ese demonio. El amor triunfará, porque han luchado por ambos. Nos dejas en suspenso nuevamente.
J.P te envio mi mejores energías y mis mejores deseos para que se cumplan todos tus sueños en este nuevo año 2017 que seas muy feliz al lado de tu hermosa familia y amistades que te rodean.
Te envío un abrazo muy fuerte. Cuidate y nunca te des por vencida persiguiendo tus sueños.
Hola Citu! Espero que estés bien. Por los dioses menuda batalla has montado espero que el asqueroso Azidahaka no se acerque más a mi pobre Heli, que ya tiene bastante con Seirim y lo que se trae entre manos. Vamos ahora con Sebastian y Amelia son geniales. Espero que Sebastian se recupere y luche por salir de ese lugar. Amelia siempre ha sido más fuerte de lo que parece. Por lo demás, que cantidad de dragones, demonios y elfos han intervenido en este capítulo. Tengo muchas ganas de leer el siguiente. Por si no hablo contigo Feliz Navidad y disfrutas mucho de estas vacaciones. Nos vemos en el siguiente capítulo. Un besote, guapísima!
Hola! Que sorpresa entrar y encontrarme ya el capítulo de esta historia!! Me ha encantado leerlo y ahora necesito otra vez más, jejeje.
Besos!
Gracias
http://elrincndelospremiosymenciones.blogspot.com.es/
Tu amor por las letras,te hacen avanzar en tu oficio de escritor
Esta ha sido una batalla con todas las de la ley!! Azidahaka es muy asqueroso, repugna. Heli ha estado muy bien. Pobre Sebastián, ha quedado malherido, pero aunque Amelia sigue influenciada por el demonio y sin apenas recuerdos, creo que su amor por Sebastián es más fuerte que el mal y logrará sobreponerse; al menos ha tomado conciencia de que puede y debe luchar.
Sigue muy interesante.
Un beso
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