Hola ¿cómo están? Espero que les agrade este fragmento y se diviertan tanto como yo al escribirlo. Les mando un beso
—Sebastián despídete de Amelia y por si acaso espérala en el pasadizo si la trampa falla.
Sebastián asintió algo atontado. Sus ojos lagrimeaban y su vista estaba borrosa. Le dolían la cabeza y las manos,a pesar de eso se paró . Amelia lo miró con miedo mientras Firond se acercó hacía él con la expresión de su rostro enojada.
—Te dije que tuvieras cuidado con utilizar los ojos de dragón.
— Selene busca a Luke .
Sebastián protestó — estoy bien , puedo ver y fue un accidente.
Firond fue en busca de un frasco color que estaba encima de la mesa que se hallaba al fondo la habitación .
—Ten, toma todo y no hagas muecas.
—¿Katy porque no buscas a Luke?
La asistente de Firond furiosa gritó — Me llamo Kelly, entiéndelo de una vez.
— No pierdas el tiempo y llámalo.
Kelly se fue mientras Sebastián daba un beso rápido a Amelia en los labios y se iba por el pasadizo .
Luke llegó seguido de Broom y una maleta pesada . El Recolector hizo su trabajo con ayuda de Firond mientras Amelia y la anciana miraban fascinadas la escena. Luke fue al pasadizo con Sebastián Y Brom que se escondió luego de poner unos artefactos electrónicos por toda la habitación.
Amelia supo el momento exacto que llegó Billy y su jefe. Sintió un malestar y una energía tan maligna como la Úvatar se movió incómoda en su cama. Firond de inmediato se dio cuenta y le tomo la mano . —Todo va a salir bien.
Amelia asintió temiendo sufrir un desmayo o algo peor. La cabeza estaba a punto de estallarle y tenía náuseas. Escuchó a Lin pelear con Billy y el señor Mercader.
—Buenas noches, Lin. Es molesto tener que venir a aclarar asuntos que pensé que estaban ya finiquitados.
Lin miró a Ana que fingía llorar junto a Zahra que aún conservaba la herida que Billy le hizo momentos antes, para dar más dramatismo a la escena.
Capítulo 40
Luego de ver cómo huía Billy del despacho de Firond . Sebastián cansado se desplomó en la cama de Amelia. Minutos después Kelly entró en el cuarto seguido por una mujer anciana a la que Sebastián no conocía y Firond.—Sebastián despídete de Amelia y por si acaso espérala en el pasadizo si la trampa falla.
Sebastián asintió algo atontado. Sus ojos lagrimeaban y su vista estaba borrosa. Le dolían la cabeza y las manos,a pesar de eso se paró . Amelia lo miró con miedo mientras Firond se acercó hacía él con la expresión de su rostro enojada.
—Te dije que tuvieras cuidado con utilizar los ojos de dragón.
— Selene busca a Luke .
Sebastián protestó — estoy bien , puedo ver y fue un accidente.
Firond fue en busca de un frasco color que estaba encima de la mesa que se hallaba al fondo la habitación .
—Ten, toma todo y no hagas muecas.
—¿Katy porque no buscas a Luke?
La asistente de Firond furiosa gritó — Me llamo Kelly, entiéndelo de una vez.
— No pierdas el tiempo y llámalo.
Kelly se fue mientras Sebastián daba un beso rápido a Amelia en los labios y se iba por el pasadizo .
Amelia supo el momento exacto que llegó Billy y su jefe. Sintió un malestar y una energía tan maligna como la Úvatar se movió incómoda en su cama. Firond de inmediato se dio cuenta y le tomo la mano . —Todo va a salir bien.
Amelia asintió temiendo sufrir un desmayo o algo peor. La cabeza estaba a punto de estallarle y tenía náuseas. Escuchó a Lin pelear con Billy y el señor Mercader.
—Buenas noches, Lin. Es molesto tener que venir a aclarar asuntos que pensé que estaban ya finiquitados.
Lin miró a Ana que fingía llorar junto a Zahra que aún conservaba la herida que Billy le hizo momentos antes, para dar más dramatismo a la escena.
—Sé que estás ocupado Adolfo. Pero, tu empleado de confianza en lugar de velar por las hermanas Bolaños. Vino a acusarnos de que no le dejamos ver a Amelia, cuando su condición es sumamente preocupante y puede que no pase la noche.
Adolfo Mercader miró a Billy indignado.
— ¿Eso es lo que pasa?
Billy fastidiado hizo una mueca —Ellos están ocultando algo , usted sabe cómo son los cambia formas.
—Lo sé, puede que todo sea un malentendido dijo en tono conciliador Adolfo aunque en su voz existía algo de desprecio.
— No lo creo, Adolfo —. Lin señaló el lugar donde Ana lloraba junto a Zahra que mostraba en el rostro más dolor que el que sentía realmente. Billy trató de atacar a Ana Bolaños y si una hubiera sido peor de no ser por la intervención de Zahra.
—Oh, mi dios.
—Ahora va a decir que un mal entendido que es culpa de los cambia formas. Zahra y Ana son hechiceras.
—Son casi la misma basura que los cambia formas — Masculló Billy.
Adolfo Mercader rezó para Lin no lo oyera y le dio un codazo —. Fue el deseo de Billy por ayudar lo que nubló su juicio . Es tan generoso.
Golpeó a Billy para que sonriera pero el resultado fue peor. La expresión en el rostro del ayudante del señor Mercader era aterradora.
Adolfo fastidiado por perder el tiempo entre esa gentuza y no poder conquistar a Vanora. Tomó la mano de Lin haciendo nota mental de lavarlas bien —. Lin es por la seguridad de todos. Se que los cambiaformas no se llevan con Billy, pero él es un médico brillante. Verá que es mejor que ese personaje raro. Además es hechicero y no elfo.
Lin sintió una vibración de su celular indicando que todo estaba listo.
—No estoy de acuerdo con esto. Firond dijo que la condición de Amelia es es crítica y lo que le hizo Úvatar puede tener consecuencias. Pase bajo su propio riesgo.
Billy sonrió triunfante caminando oriundo a la habitación de la enferma. Mientras Lin pensó “que el que ríe al último ríe mejor”.
Adolfo golpeó a la puerta Firond abrió con semblante abatido.
—¿Qué desea ?
Adolfo lo miró ofendido y sorprendido.
— Quiero pasar a la habitación de la señorita Bolaños.
Firond miró a Billy y luego al s eñor Mercader.
—Solo los dejare pasar con permiso de la hermana de mi paciente o la autorización del señor ministro de magia.
Antes de que pudiera hablar Adolfo. Firond les cerró la puerta en la cara. El ministro furioso golpeó la puerta.
— ¿Qué desea? Estoy ocupado con mi paciente acaba de tener un episodio. Debe ser las malas energías. Así que consiga la orden o márchese. — Firond quedó mirando a Billy y luego para consternación de Adolfo le cerró la puerta en la cara.
— ¡Mierda! ¿Qué se ha creído este pato arrogante?
Adolfo volvió golpear la puerta.
Firond volvió abrir la puerta cansado .
—¿Qué desea? Ya le dije que estoy ocupado y que no tengo tiempo para ese juego de niños de golpear y no decir nada. Además, usted está muy viejo para eso.
Adolfo lo miró horrorizado en especial porque el elfo iba a cerrarle la puerta en la cara Puso su pie para impedir que Firond lo despache . — Por dios es un maleducado, antes que vuelva a cerrarme la puerta en la cara. Sepa que soy el ministro de magia y exijo ver a Amelia Bolaños.
— Ah, no lo reconocí. En la televisión de hechiceros se ve más joven, menos calvo y gordo.
— Yo no estoy gordo y peor calvo —. Adolfo se topó la cabeza para ver que su flamante peluquín lucía recto.
— Se ha visto en un espejo.
Billy gruñó — Déjenos pasar.
—Enseguida. — Firond abrió la puerta y Adolfo Mercader suspiró de alivio. Iba a entrar pero un campo de fuerza lo impidió y el ministro cayó al piso encima de Billy.
Firond cerró la puerta mientras mascullaba sobre las formas que le hacen perder el tiempo.
Adolfo furioso se paró y golpeó la puerta con deseo de romperla en mil pedazos.
— ¿Qué desea ?
— Entrar, grandísimo h...— Firond lo interrumpió . No es necesario que me alabe para entrar.
— Déjeme pasar.
— Ya lo hice, usted no entró.
— Grandísimo ...
—Le dije , que no me alabe, me sonroja.
— Puso un campo de fuerza que no me deja entrar.
—Hay cierto me olvide.
Firond de nuevo cerró la puerta en la cara de Adolfo.
A Adolfo le salía humo de las orejas Lin ser reía disimuladamente mientras Ana se metía el puño para no hacerlo a carcajadas.
Adolfo iba a golpear la puerta, pero Firond la abrió. — Entré.
El ministro se quedó mirando hacia la habitación.
— ¿Va a entrar o no?
—Por fin
Adolfo entró al cuarto de Amelia cuyo olor hierbas lo mareó. Era una habitación con una cama grandes, dos veladores y dos sillas de madera antigua. El estúpido elfo miraba unas botellas mientras una anciana sostenía una lavacaras con un líquido negro.
—¿ Eliminó el vómito o va a tomar muestras?
—Ya las tomé Gema, gracias.
La anciana casi se tropieza y riega el líquido negro en Adolfo.
—Disculpe.
— Tenga cuidado.
Adolfo se alejó lo que más pudo de la mujer. Sin embargo, esta se volteó rápido y preguntó —. ¿Lo conozco de algún lado?
—Gema — . Haz tu trabajo — gruñó Firond.
La mujer se volteó de forma brusca y casi riega el vómito negro para consternación de Adolfo.
—He trabajado por más de 30 años con enfermera en el mejor hospital de hechiceros de Edimburgo.
—Disculpa Gema, no es tu culpa . Odio las visitas por más prominentes que sean.
Firond miró en dirección de Adolfo y Billy que esquivaban a Gema y el vómito negro.
— Entre de una soberana vez.
Adolfo lo hizo y miró en forma despectiva Amelia que para él era lo mismo que una basura. Sin desearlo le dio la mano haciendo nota de lavarse bien. Odiaba cualquier germen .
—Encantado de conocerla señorita Amelia. Soy el ministro de magia y hechicería. La más alta autoridad entre los hechiceros de Europa .
Amelia asintió sin ganas y le dio una sonrisa como saludo. Estaba muy asustada por la forma que el hombre de rostro avinagrado la observaba.
Antes que ella pudiera decir algo Gema volvió a la habitación y de repente abrazó al ministro.
—¡Oh, por dios! Es Mercader, Adolfo Mecader. Lo admiro tanto señor Adolfo.
Adolfo se sintió asqueado y solo deseaba alejarse de la anciana y su olor a antisépticos. Odiaba tanto a sus electores, para él solo eran útiles mientras voten y se dejen robar.
—Es bueno contar con gente como usted Gema. Así la magia avanza y el pueblo también. — mintió Adolfo.
— Oh, señor ministro escucho siempre sus enlaces mágicos hasto los grabo.
— Lo mismo hago yo. La voz de la verdad, no puede ser callada.
— Voy a atesorar por siempre su abrazo.
Adolfo sonrió y antes de que pudiera contestar oyó un grito de Amelia.
Brom dentro del pasadizo había puesto un dispositivo electrónico que hizo la enferma se elevara por los aires. Sebastián a lado de Luke solo contuvo el aliento y espero que Amelia no le pase nada.
— ¿Qué le pasa?
— Tiene convulsiones y puede estallar en mil pedazos. El vómito negro que expulsó antes puede ser contagioso. Recién estoy haciendo los análisis.
Adolfo miró Billy con cara de pocos amigos. La enfermera que tuvo el vómito lo abrazó y él estaba en un cuarto lleno de gérmenes. Viendo a una pobre mujer a punto de estallar. Por dios su traje era de diseñador costaba una pequeña fortuna.
Amelia hizo un ruido grotesco y empezó a expulsar la sustancia negra. Adolfo golpeó a la enfermera para no dejarse regar con ese asqueroso líquido. Lo peor pasó después cuando las manos de la anciana se volvieron negras.
— Uy, es contagioso. Nadie entrara a este cuarto. Si quieres a la enferma Billy espera a que se recupere o muera de una soberana vez. No vas a infectar mis instalaciones. — Luego de decir eso, salió corriendo.
Billy salió tras de, él sin creer en la trampa.
Firond puso de nuevo un campo de fuerza y lo hizo más fuerte que el anterior ni Azidahaka pudo atravesarlo.
Se acercó a Amelia que estaba pálida pero sonriente.
— Parece que soy una buena actriz.
— Gracias , señor Brom
— Dime Brom , preciosa.
— Lo convencimos por el momento. Debemos fingir la muerte de Amelia lo más pronto posible.
Espero que les haya agrado el capítulo y buen fin de semana
10 comentarios:
Hola preciosas!
Fantástico capítulo! Feliz fin de semana. Besotes
Hola! Genial capítulo!!! Me ha encantado :)
Disfruta del fin de semana!!
Besos!
Hola JP... Pues me creo que te hayas divertido al escribirlo... y ya puedes saber que yo me he divertido al leerlo
Me encanta este tipo de capítulos... creo que autores y lectores gozamos con ellos
Ya me he sonreído con Kelly cuando se ha ofendido porque Firond la llama Katy
He imaginado a Adolfo Mercader y a Billy esquivando a Gema, y al vómito negro
Me gusta la magia, pero este Ministro de Magia y Hechicería no me gusta nada
Adolfo Mercader es muy aprensivo y escrupuloso... muy lógico que haya querido irse muy lejos de una habitación tan "contaminada" ;-)
Bueno, y ahora espero que la operación y los planes salgan bien
Te felicito por un capítulo que hará sonreír al lector más serio
Besos, y feliz finde
Oh van a fingir la muerte de Amelia!
Que bueno se esta poniendo la historia, gracias!
En nuestro paso por el sendero de la vida,a vaces tenemos que pasar por sendas equivocadas
Hola Citu! Espero que estes bien. Bueno, bueno parece que Brom, Firond y los demás se salieron con la suya. Amelia es una gran actriz. No obstante, el mejor es Firond con ese empaque para enfrentarse a esos dos. ¡Bravo! Espero leerte en siete día, me ha encantado el capítulo.
No podías haberle puesto mejor cara a Billy el sangriento. En la saga Underworld sale de vampiro.
Buen capítulo.
Un abrazooo.
Jajaja, Mercader es tan aprensivo y tan estúpido que le han engañado. Me encanta Firond, su carácter malhumorado y su temple e impasibilidad si la situación lo requiere. Cómo les ha tomado el pelo a Billy y a Mercader. Y Gema de un lado a otro con el vómito negro amenazando con duchar al presumido de Mercader, no me extraña que quisiera marcharse de una habitación con tanto germen. Amelia lo ha hecho muy bien, ahora a ver si consiguen que estos dos piezas se mantengan alejados el tiempo suficiente para que Firon la opere.
Un capitulo muy divertido.
Besos y que sigas pasando un buen finde.
!Me gusto este capitulo!. El diálogo entre Firond y Adolfo es jocoso, me causo risa.
Ja! Que buen ardid, te quedo redondo. Ya que se fue de una buena vez ese Mercader fastidioso.
Espero que los planes de Amelia y Sebastián sigan adelante para poder sanarla.
Beso y cuidate
¡Hola mi niña! Pero que capi más divertido, me ha encantado. Lo he disfrutado mucho. El plan para Amelia me gustó. Espero que tengas buena semana amiga. Un besazo!!
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