Hola ¿cómo están? Hoy les traigo un capítulo con mucha acción y algunas sorpresas.
Úvatar traspasó el portal que lo conducía al cielo azul. Se sintió algo emocionado por conocerlo al fin. Aher nunca lo dejó ir a aquel maravilloso por más que proclamaba su amor siempre defendió la privacidad de su lugar de trabajo.
Ahora el cielo azul sería suyo. Respiró hondo temía otra vez ser vencido fue muy fácil sacarle la verdad a los hombres de Vanora. Sin embargo, no se dejaría vencer tan fácilmente . Dudaba que fuera una trampa la rubia tonta que Aher eligió como sucesora fue su peor error. Caminó junto a Azidahaka por las nubes y el cielo estrellado de lo que los simples humanos llamaban el purgatorio.
Un muchacho de cabellos dorados y cuerpo enclenque estaba apoyado en la puerta junto a él Se encontraba un hombre asiático que miraba el reloj como esperando una señal.
Úvatar miró a Lebara para que active su arma y duerma a los dos recolectores. El científico sonrió, servilmente y luego de inclinarse en forma de saludo presiono un botón que hizo que los dos recolectores se quedaran inertes.
Luego caminó en busca de Ana ella estaba en un cuarto cerrado que parecía una portería la muchacha . Se encontraba acostada en un sillón viejo como si estuviera resignada a su destino.
Úvatar hizo que entrara Lebara por si acaso era una trampa. Ana miró extrañada al hombre se incorporó asustada y preguntó al científico.
— ¿Quién eres?
Lebara le hizo señas a Úvatar había sido para el fácil forzar la puerta. El demonio elfo entró y Ana gritó del miedo.
— Parece, que aún me recuerdas en tus sueños.
— De mis pesadillas.
Capítulo 48
Úvatar traspasó el portal que lo conducía al cielo azul. Se sintió algo emocionado por conocerlo al fin. Aher nunca lo dejó ir a aquel maravilloso por más que proclamaba su amor siempre defendió la privacidad de su lugar de trabajo.
Ahora el cielo azul sería suyo. Respiró hondo temía otra vez ser vencido fue muy fácil sacarle la verdad a los hombres de Vanora. Sin embargo, no se dejaría vencer tan fácilmente . Dudaba que fuera una trampa la rubia tonta que Aher eligió como sucesora fue su peor error. Caminó junto a Azidahaka por las nubes y el cielo estrellado de lo que los simples humanos llamaban el purgatorio.
Un muchacho de cabellos dorados y cuerpo enclenque estaba apoyado en la puerta junto a él Se encontraba un hombre asiático que miraba el reloj como esperando una señal.
Úvatar miró a Lebara para que active su arma y duerma a los dos recolectores. El científico sonrió, servilmente y luego de inclinarse en forma de saludo presiono un botón que hizo que los dos recolectores se quedaran inertes.
Luego caminó en busca de Ana ella estaba en un cuarto cerrado que parecía una portería la muchacha . Se encontraba acostada en un sillón viejo como si estuviera resignada a su destino.
Úvatar hizo que entrara Lebara por si acaso era una trampa. Ana miró extrañada al hombre se incorporó asustada y preguntó al científico.
— ¿Quién eres?
Lebara le hizo señas a Úvatar había sido para el fácil forzar la puerta. El demonio elfo entró y Ana gritó del miedo.
— Parece, que aún me recuerdas en tus sueños.
— De mis pesadillas.
Úvatar tocó la quijada de Ana
— Serás más fácil de doblegar que tu hermana.
— No hables , de mi hermana te odio por todo lo que le hiciste.
— Sufrirás por todo lo que me hizo tu hermana. Me voy a divertir asustándote ratoncito.
Úvatar rio y observó el cuartucho en busca de alguna trampa , pero todo parecía normal . Hizo una señal a Lebara y Azidahaka para que empiecen con su ejército de esclavos a doblegar a los recolectores.
Úvatar se quedó solo en ese cuartucho con Ana que lloraba asustada, sus manos cubrían su rostro .
— Es mejor que me sigas .
Ana no se movió.
— Ven.
La muchacha se quedó en su sitio, llorando a mares.
— Muévete o recibirás un castigo.
Ana no le hizo caso y se quedó en su sitio. Úvatar furioso tocó el cuello de la chica con deseos de asustarla y doblegarla para que cumpla con sus deseos.
Ana cuando sintió que las garras de Úvatar en su cuello dejó de llorar y quito sus manos de su rostro.
Úvatar dejó de apretar el cuello cuando se dio cuenta de que la mujer que estaba estrangulando no era Ana sino su hermana Amelia.
— ¿Me extrañaste?
— Voy a destruirte, no lo harás. Hoy recibirás tu castigo.
Úvatar sintió no podía moverse era como si Amelia lo hubiera apresado con cadenas . Quiso estrangular a la mujer. Sin embargo, no podía mover ningún músculo. Debía liberarse de su agarre lo antes posible. Tal vez había una parte de él oculta en el alma de Amelia.
Se concentró y canalizó todo su poder en buscar una conexión con Amelia. Pensó que era imposible cuando por fin la sintió . Amelia aún lo tenía sujeto y ella creía que lo iba a vencer . Cuán equivocada estaba, pronto se iba a arrepentir de todo lo que le hizo en el pasado.
Amelia dejó que Úvatar explore su alma y piense que podía vencerla . Cuanto más juntos estén su hechizo funcionara mejor.
Amelia sintió como Úvatar le mostraba las imágenes cuando la torturó. Para poder encontrar su lado oscuro, su rabia y su deseo de venganza. Fue cuando Úvatar oyó a una mujer cantando. La escucho antes cuando invadieron el inframundo era Heli la amiga de Amelia.
La anuruin tomó la mano de Amelia . Úvatar no entendía cómo no la percibió antes para darse cuenta que era una trampa.
Leyendo sus pensamientos una mujer pequeña apareció . Era delgada y parecía frágil, pero eso era un engaño. Is lo miró con odio y deseo destruirlo como el demonio elfo hizo con su difunto esposo.
En lugar de eso dijo con voz plana y sin emoción.
— No pudiste percibimos aunque estábamos ahí. Gracias a mí y a una técnica que me enseñó mi difunto esposo.
Úvatar miró a la pequeña demonia de fuego tal vez pudiera utilizar su rabia para orientar su poder y liberarse del agarre de Amelia.
Is tomó la mano de Amelia y Heli que seguía cantando una melodía .
— Te odio con todo mi ser y deseo destruirte. Sin embargo, por el momento me conformaré con tenerte prisionero en tu jaula de odio y venganza.
Cuando ella empezó a cantar junto a Heli y Amelia Úvatar sintió un dolor profundo que le carcomía la piel.
Imágenes de las personas que estuvieron en su vida asomaron en su mente. Observó a sus padres cuidándolo para que se vaya a dormir con la misma canción que Heli estaba interpretando de forma magistral.
Su madre lo acariciaba y el amor en sus ojos era tan evidente. Úvatar no deseaba rememorar su pasado y mucho menos sentir culpa por haber matado a sus padres. Heli junto Amelia e Is se pusieron a cantar Úvatar revivía ante sus ojos como traicionó , mintió y destruyó a cada persona que lo amó.
Indudablemente recordó a Aher y su mirada melancólica . Fue en ese momento cuando llegó Vanora.
Ella estaba pálida y su ropa manchada de sangre. Sin embargo, sonrió al ver a su enemigo apresado.
— Pensaste que estaba prisionera. Te equivocaste , como lo hiciste jugando con Aher. Aun la recuerdas y aunque tu corazón llora por ella. La mataste porque tu odio y venganza era más importante para ti. Ahora no te queda nada .
El dolor del corazón de Úvatar se acrecentó al igual que el malestar que sentía en todo su cuerpo.
Vanora tomó la mano de Is y Amelia pero no cantó . En su lugar cerró los ojos. Concentrada en su poder para que Úvatar durmiera y quedará en una especie de coma en la que su cuerpo y su espíritu descansaría por mucho tiempo. Sin embargo, sería torturado por las imágenes de su pasado
Úvatar en vano quiso liberarse de las ataduras, pero por más que lo intentaba no podía. Casi a punto de quedarse eternamente dormido . Observó a una dragona de color púrpura se imaginó que era Gilraren la hija de Amras . Ella lanzó un rayo de con los colores del arcoíris para crear una especie de cripta imposible de abrir desde dentro.
Ni bien sellaron la cripta con el cuerpo de Úvatar. Se oyó un estruendo alguien deseaba entrar en la habitación que estaba sellada por Adremelech que la protegía para que ningún enemigo pudiera entrar.
El demonio junto con Sebastián, Anazareth , Amras , Idris Eru y otros 5 elfos custodian afuera de la pequeña portería del cielo azul .
Azidahaka sintió que algo extraño pasaba retrocedió , por fortuna se dio cuenta de que era una trampa. Dejó solo Lebara y se dispuso a salvar Úvatar.
Lo primero era terminar de una manera rápida y fulminante con todos sus enemigos. Por lo que emano un veneno que era muy tóxico para dragones y demonios. Lástima que a los humanos y elfos no les hacía nada, pero podía matarlos de otra forma y sin ni siquiera pelear.
Espero haberles sorprendido, les deseo un genial fin de semana
9 comentarios:
Con tu gran imaginación,le podrias sacar algo a esa fotografia,y adactarlo a unos de tus
personajes
Pues sí.... bastante sorprendente. Me ha gustado.
Buen finde y un abrazooooo.
Hola preciosa!
Fantástico capítulo!
Te deseo un feliz fin de semana.
Cuídate mi niña!
Besotes!
Hola! Wow pedazo de capítulo!! Me ha encantado.
Feliz finde!
Besos!
Hola guapa! Espero que estés bien. Bueno, bueno que al final era una trampa si la señorita brillante no podía fallar, llamo así a Vanora. Me encanto que fuera Amelia quien atrapara a Uvatar. Genial capítulo!! Te leo en siete días. Un besote!
Te debo la novela mi querida amiga, es que no estuve bien de un brazo y me duele todavía, menos pero está allí todavía esa molestia. Me quita ganas de todo aunque sigo con el blog pero menos.
Te mando besos y gracias por estar siempre.
!Wow! que sorpresa se llevó Uvatar, era Amelia convertida en Ana.
Muy bien usada esa técnica para pasar desapercibidas por Uvatar.
Con la llegada de Vanora pudieron contrarrestar al demonio.
Espero que funcione la trampa para Azidahaka y no va a escapar.
Muy buen capitulo.
!Te envío un abrazo, feliz domingo!
Amelia!" Y tan sorpresa!!!
Me ha encantado, feliz comienzo de semana
Besos
Genial el capitulo ese Uvatar no es nada tonto, esta de lo más buena la historia, gracias!
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