Después de Todo . Capítulo 10 ( Cuarta Parte)

 Hola,  ¿Cómo  están?  

Hoy les  traigo un nuevo  fragmento.  Espero que  sea de  su agrado .

Capítulo 10 

Mientras  el  vampiro  hablaba  con Huor  el rey  del  valle sombrío.  Anazareth estaba  algo nerviosa. Empezó a caminar  por  los  campos   que se  estaban sembrando de nuevos  árboles. 

Anazareth  afinó sus  sentidos  y no pudo  percibir nada. Fue  cuando miró a la montaña y por  intuición se  dirigió  hacia allá.  Fue  cuando  percibió  algo extraño y se  dirigió  hacia unas  cuevas al pie  de la montaña. 

Uvatar  sintió  que  alguien caminaba   por  la montaña  y se  dirigía a las  cuevas. Reconoció a  Anazareth.  Era la  demonia fea que siempre  se encontraba  entre  libros. No entendía la obsesión de  Azidahaka  con  ella. 

Pero  reconoció el peligro  que  ella  representaba  si  lo  encontraba  o su escondite. Tenía que hacer  algo pero si le  ataca  aquí  y ahora  todo el mundo se  daría  cuenta  o por lo menos  revisara  el lugar. 

Miró sus  libros mientras  maldecía  su  suerte.  Los hijos de  Baal  eran un grano en  el culo. Fue  cuando se le ocurrió una  idea.  Acabaría  con los hijos  de Baal  y  esa mujer.  De  una  forma  fácil y sorprendente. 

Lo  primero era ahuyentarla de  ese  lugar.  No le sorprendió que  el  asqueroso de  su  tataranieto  estuviera con ella.  Sus  descendientes  sólo eran  una decepción. 

Se  trasladó  al mundo humano a  Praga, se dirigió  a un  colegio lleno  de  niños  y  empezó a tomar  sus  almas.   Muy  pronto  sus  hijos y  varios  cazadores  llegaron a  detenerlo.  La primera parte  de  su plan  estaba  resultando como lo deseaba.

Úvatar  se encontraba  en  un  colegio  antiguo.   Los  niños  y  adolescentes  se  hallaban en sus  aulas  juntos  con  los  profesores que  daban  clases  y otros  adultos. 

Tomó  todas las  almas  de por los menos   100  niños  y  40  adultos  en unos minutos .    Por  lo  general toma  un  alma  o dos.  Le  gustaba  saborear   el momento   y  tomar la energía  de  a poco para no ser  encontrado. 

Obtener  tantas  almas  juntas   lo mareo.  Estuvo  borracho de poder  por  algunos segundos.  Aún  así solo  vinieron   tres  cazadores   y  tres  recolectores de  almas.

La  demonia   cerebrito  aún seguía  en la montaña.  No ingresó a ella, pero se encontraba en las inmediaciones.  Maldijo su  suerte.   En lugar  de  quedarse  en  el colegio.  Se marchó, pero no  dejó  la  ciudad  humana.  

 Fue  a una   plaza  muy  concurrida llena  de  turistas  que  sacaban  fotos en  una  hermosa  fuente    de  piedra.  Junto  a  varios  edificios  y  restaurantes.  Úvatar era  de  los  que le  gustaba   hacer  dos tareas  a la  vez.   

Para  el  hechizo de sangre  necesitaba  concentrar   una  fuente  con  cada uno de los  6  elementos   ya que  tenía  energía de sobra   lo iba a hacer. Esperaba   ser parado  por  Anazareth  y  matarla    cuando  viniera a detenerlo.

Les deseo una  genial fin de  semana.