Bienvenidos a mi blog. He creado este por que tengo un montón de historias en mi mente que me gustara compartir. Miles de mundos y personajes siempre me acompañan, decidí, que era hora de hacer que fueran conocidos. Quiero, que sean capaces de expresar y soñar junto a mi. Espero, que les guste mi casa y tendrán una voz aquí. Mi cariño y amistad también.

viernes, 6 de noviembre de 2020

Lágrimas de Luna. Capítulo 53 ( Tercera Parte)

Hola ¿cómo están?  Hoy les traigo un capítulo lleno  intrigas  y  muy  romántico.  Advierto que  tiene  escenas  subidas  de tono. 

 Capítulo 53

Tres  días  después
Chatel bostezo aburrido, se escondía    en el  cuartel   de los  cazadores demonios. En donde Adremelech  era  el jefe de  los  cazadores  y  su hermano  Seirim  era  el mejor  cazador  de  demonios.  Desde  que  salvó a  Heli   no solo  los demonios lo perseguían, estaba  siendo  buscado  por    las  hadas,  recolectores  cazadores ,  vampiros  y hombres  lobos.  No era  el hecho  de salvar  a  Heli sino  que   él  iba a atacarla   luego   para  rescatar  a su esposa.
Cuando hacía  la poción para  curar   a  Heli   lo  dijo  sin miramientos  a todos  los presentes  fue  un  milagro que  nadie lo matara  en ese momento.  Tal  vez,  fue  porque lo necesitaba ya que era  el único  que sabía hacer  la poción.
Ahora  se  ocultaba  casi  a la  vista  de todos. Siempre  era   lo mejor  hacer  lo inesperado . 
Oyó  gruñir  a  Petunia  sobre  que no era   un   simple  guardia.  Había estado  quejándose  por  horas.  Aunque   Chatel  no  la  juzgaba  todos  estaban    muy  nerviosos    por  el juicio  público  a  Azidahaka.  La mayoría estaba de acuerdo sobre castigarlo, pero    había  muchas  disputas   sobre  cuál   sería   la  mejor  sanción.
Azidahaka  siempre  fue  odiado por  todos los  clanes y  sin la protección   de sus padres   iba a sufrir  mucho.   Por  lo  menos  15  mil  años  como esclavo de los  7   clanes  demoníacos.   Antes  de    poder tener  una nueva oportunidad y empezar  a pagar  sus pecados  y  renacer. 
Su hermano  Seirim  y  Adremelech  abogaban  que  sé  en lugar  de esclavo  se quedará   por  los  menos mil  años  como  roca  sufriendo  nacer,  ser  destruido  y morir   el mismo  día . Para evitar que   Azidakaha  huya   ya que  a pesar  de ser  un demonio mediocre siempre  se  salió  con la suya .    Para  luego  ser  esclavo  y  después  tener  una  oportunidad  de pagar  sus  errores  y  renacer.  Sin  embargo,  la  gran mayoría  de  clanes deseaba  primero  humillar   Azidahaka.
Chatel que no deseaba   oír  más  lamentos    decidió  irse    y  paso por la  casa de  su hermano  Seirim. A lo lejos  oyó  una  gran  pelea   en  estadio  de los  demonios donde libran peleas  como en los  tiempos  de los gladiadores romanos. Las peleas se  hacen  cuando  varios  clanes de demonios  desean pelear  por  el alma  de  un pecador  para  decidir   cuantos  años  como esclavo   estará  al  servicio  del  clan antes  de  ir  a  otro  clan  a pagar sus  pecados.  Observó a lo lejos  que se peleaban  por  el alma  de  Adolfo  Mercader . el humano  fue condenado   tan solo en un día luego del juicio  y  ejecutado dos  días.  Supo que  Mercader  rogó a  Seirim que lo salve ,  pero este  se  negó.   La atención de  Chatel  volvió  a los  juegos    al  ver   que  Gomory  estaba   luchando   sintió  algo  de lástima  por   el pobre  tipo. Si ella  ganaba  Mecader  iba a sufrir   muchas torturas antes  de poder  rencarnar.   Aunque  merecía  un  castigo justo  por  violar  a  tantas  mujeres  incluso  quiso  abusar  de  Heli .  El  solo pensarlo   hacía que su piedad  termine.
  Estaba casi seguro de que  su hermano y  Heli  en ese  preciso  instante    hacían  el amor .  Ya  que   al  otro  día     se despedirán porque   Heli le  tocaba  volver  al mundo  elfo .  Lo peor  es   que  iba  al  valle  sombrío  y   Linwe  podía   dañarla  si  pudiera,  Aunque  Chatel  no lo creía  conocía lo  suficiente  a  Naur  para   saber  que ella   temía  que   la  relacionan   con Limwe su  otra personalidad pública.

Como  conjurada  apareció  Naur   caminando   hacia   él.    
—  Sabía que estarías  como perro  guardián  custodiando  al tonto de  tu hermano  y   a la  humana  gorda.
— Necesito    que  Heli  viva.
— ¿  Aún dudas  de mi palabra?
— No me  has  dado una  prueba real.
Naur   se  acercó  a  Chatel para mirar  su rostro
— Sé  que  Belowen  te  busca    cuando  duermes.
— Temo  que solo sea    una artimaña  tuya, por  eso no le hago  caso.
Naur   señaló    hacías  las  sombras.
Chatel  y  ella  estaban  ocultos   debajo  de  un  árbol  a lo lejos  había una cueva  de  ella salió  una mujer   de  cabellos  dorados,  cara redonda  y ojos  azules como  el mar.  Chatel reconoció  a su  esposa    y su  corazón dejó de latir por  un minuto.
— Es  otra  de  tus  mentiras —  exclamó  Chatel.
Pero  Belowen  comenzó  a cantar.  El  demonio  se acercó  a su esposa  y la  beso.  Aunque  el encuentro  fue interrumpido por  Naur.
—  Me  crees, ahora.
—  Sí.
Naur  volvió  a  ver  la  cara  de  Chatel,   para comprobar que no mentía.  No podía entender  el motivo que  impulsó a  Chatel   a  salvar  a   Heli  y  condenar   su  cuerpo  si decía  tan  solo una mentira.
—  Si  deseas    la libertad   de  Belowen  me  ayudaras  a  con mis planes  y  sobre todo   matarás  a tu hermano  Seirim.
—  Lo haré —  dijo  con  sequedad  Chatel mientras  Naur  se  reía  de su victoria.
— Ven  te  dire  mis planes.
Chatel  la siguió  con el corazón  devastado por  lo que  debía hacer contra su hermano  y  Heli.



Unas  horas  después.
Seirim  acariciaba   el  cabello de  Heli  y  la  veía  dormir plácidamente.
Ella lo amaba y el milagro de que  estaban juntos   nunca fallaba en traer algo de luz a su oscuridad. Aún  se sentía  culpable  por  la tonta pelea  que  tuvieron   horas antes.  Él  sabía  que  Heli   le era  fiel.  Sin embargo,  enterarse  por  Ramoncito  y  Kelly  que   Heli  recibió   un nuevo  paquete   de   su  admirador.  Y  que  fue  en busca  de  él  sola  sin  ayuda no le  gusto. Esperaba  que  ella  confiara  en él.  Pero que    se lo contara  a  Ramoncito y   a  pesar  de que era  irracional  tuvo  celos  del amigo  de  Heli. 
Solo  tuvo que  cerrar los ojos para  revivir  la escena  que   una  hora antes  se  desarrolló    en   la  puerta   de  su  casa. Cuando regresaron de la  cena  que  se  hacía  en casa de  Nessa  como despedida  de  Heli,  Luke  y  Firond  que   iban  al  valle sombrío  para  obtener  la nacionalidad  elfa  de  Luke  y  Heli.
Ni  bien   Heli  entró  en su  casa  Seirim  cerró la puerta  furioso.  Se acercó hacia  Heli  y  le susurro  al oído —. Me  has  mentido. —La  voz  del  demonio contra  su oído   pareció  a  Heli  peligrosa  y  a pesar  suyo   erótica— ¿Piensas que soy alguien  a  quien puedes  mentir y  ocultar  cosas ? ¿Piensas que por amarte me has arrancado mis dientes?
Como para demostrarle lo contrario, él los hundió ligeramente en su garganta. Heli no podía pensar, no con la neblina roja que cubría su cerebro. Simplemente no podía respirar mucho.
—Suéltame. Estoy enfadada contigo.  Te lo iba a decir  esta noche —. Heli  pensó que  tal  vez mañana  por  medio  de un mensaje.  Últimamente  Seirim  estaba  muy sobreprotector  con ella.  Heli entendía  que solo hace tres  días  fue  atacada  por  Lilith  y  casi murió.  Pero sabía  defenderse y  su novio  no podía estar  todo el tiempo   cuidándola  como  una nenita que  no podía hacer nada.
Seirim le  mordió  el lóbulo mientras le susurraba    —No, no estás enfadada. —Él la giró otra vez, la golpeó ruidosamente contra la pared, y jaló bruscamente sus brazos sobre su cabeza.  El  hermoso  rostro de  Seirim, estaba cerca del suyo—. Me deseas, estás  excitada. Tu pulso palpita, y tiemblas. Pero  no de miedo,  tal vez tienes un poco  de  rabia, porque no te  saliste  con  tuya .
Él tenía razón. Podría haberlo maldecido por ello, pero la necesidad avanzaba lentamente por ella como pequeñas hormigas salvajes.
—Me lastimas. Suéltame las manos.
—No, no lo haré, pero quizá he sido demasiado cuidadoso, demasiadas veces, para no lastimarte. ¿Has olvidado que  soy un demonio  Heli?
—No. — Los ojos  de  Seirim  se   volvieron  rojos  y  su  expresión  se  volvió   algo atormentada  entre  furia  y deseo. Ella suspiró,  resignada  porque  él le dijo  la verdad no le  tenía miedo.  Debía  confiar  en  él no  solo con su cuerpo  si no  con su  corazón.  En ese momento  se  dio cuenta   quería  sentirse  unida  él,  que  sus cuerpos  fueran uno solo como  tantas  veces.
—Eres mía,  como  yo soy tuyo.
— No  soy  un  saco.
Seirim  acarició  el rostro de  Heli —.  Eres mi compañera  y  sabes  que lo que hiciste   estuvo  mal. Si   queremos  seguir  juntos  debes  confiar  en mí  como yo lo hago contigo. —Él extendió su mano libre y rasgó su blusa  negra—. Y ahora tendré lo que es mío.
Heli  se resistió, pero fue por orgullo, y el orgullo era más débil que la lujuria. Retorció su cuerpo, enganchando un pie detrás del suyo en un intento de hacerle perder el equilibrio. Seirim simplemente cambió su peso con un movimiento y la hizo caer con él.
El choque de la caída le quitó el aliento, pero su rodilla subió, un tirón automático de defensa. Él rodó alejándose, todavía agarrando sus manos. La sujetó. Ella corcoveó, y lo maldijo, apartando su cabeza a un lado cuando su boca bajó.
Él se conformó con su garganta. Mordiéndola, y acelerando el pulso bajo sus dientes y seduciendo  con sus  labios y manos. Heli no dijo  nada  en lugar  de eso  gimió   mientras lo  apretaba  con su cuerpo para   sentirlo más   cerca.
Él sujetó una mano sobre su pecho, encontró la piel caliente y húmeda. Ella hizo un sonido entre un gruñido y un gemido, y cuando aplastó su boca a la suya, ella lo mordió.
El destello rápido del dolor sólo apeló a la lujuria primitiva que se despertaba dentro de él. Cuando levantó su cabeza, sus ojos eran salvajes y feroces.
—Te  amo, dime  que me  detenga  ahora. Dime  que no sientes lo mismo.
Heli luchó, lidiando consigo misma ahora, pero cuando su boca se acercó a la suya otra vez, caliente y dura y hambrienta, ella se perdió. Lo amaba  y lo deseaba tanto como él  a  ella. Su cuerpo no se arqueó en señal de protesta sino en demanda, y su boca encontró la suya con una fuerza salvaje.
Él liberó sus manos sólo para levantarla de un tirón, jalando bruscamente lo que quedaba de su ropa sobre sus hombros.
—Maldita sea, Heli. Denteme . —Su boca se fundió con la suya otra vez, luego bajó a su garganta, sobre sus pechos. Sus dientes la arañaron. Y sus manos acariciaron su  cuerpo .
Con un grito agudo, su cabeza retrocedió. El placer y  el  amor , no la dejaron   pensar y  desecho lo que le  quedaba  de orgullo.   Heli rodaba con él sobre un suelo de madera. Se quitó  el resto  de  su ropa  necesitaba  sentir  su cuerpo  desnudo con el  de  Seirim. 
Ambos  luchaban para   darse  placer  de  forma  desesperada   que los lastimaba por  el  ansia  contenida.    
Las manos de  Seirim  tomaron,   acariciaron  cuando se movieron sobre ella. Aquellos dedos largos, expertos  la  excitaron  hasta que ella se volvió loca por más. Él tiró sus pantalones bajo sus caderas, los arrojó a un lado. Y la  besó  con ansias.
La liberación explotó a través de ella, un torrente que quemó su cuerpo. Y todavía él no se detenía. No podía detenerse, aunque lo deseara.
Los pequeños, y apasionados gemidos que ella hizo lo enardecieron, azotaron su sangre ya enloquecida en una fiebre de avaricia. Cada trago de aire que él tomó estaba lleno de ella, el gusto caliente, bien definido de  su  compañera . Mientras   su boca   succionaba sus  pechos   con una mezcla  de violencia  y  ternura.

Heli se corrió otra vez, de manera brutal, y su grito sacudió una emoción oscura para él, la dentellada repentina de sus uñas en su espalda fue un placer vicioso.
Heli suspiró De alguna manera, a través de la locura que la gobernaba, entendió. No la rendición, incluso después de esto, no era la rendición lo que él pedía. Sino aceptación y  confianza.
—Eres  mi compañero,  pedazo de tonto.  Te  amo y si tienes  razón  debí  decírtelo.  Sin  embargo,  últimamente   piensas  que    me  voy   a  romper.  Y  soy  una  guerrera  igual que  tú y  tengo derecho a tomar  mis  decisiones.
Seirim  gruñó  como si fuera  una  bestia  y  le  cargo  hacia  el dormitorio.
— Lo sé,  también  es mi culpa.  Es  que  tengo  tanto miedo  de perderte.
Heli lo  sabía lo que este acto físico podía significar cuando era motivado por la violencia, por la búsqueda del poder, cuando era motivado por la necesidad, por la pasión, la lujuria  y  sobre todo el  amor.
Estaba segura  de  que  Seirim  la  amaba  siempre  lo demostró  con  sus pequeños  detalles,  con sus  caricias  y  sus palabras  Y ella lo amaba  a  él.
—  Lo sé, yo también te amo. Y  haré lo que  sea  por   estar  a tu lado. 
Luego de  la  furia  y la  lujuria  Seirim  deseaba  darle  ternura   Él era suave con ella y ella con él, sabiendo que ambos necesitaban la suavidad. Besos largos y silenciosos, como bálsamo para una herida, un consuelo total para cuidar de sus   almas.
Heli  se  recostó  en  la  cama.  Miró  a  Seirim  su  rabia    término al igual que   la  de ella, De manera que la sensación de estar juntos  en su  habitación se convirtió en un  remanso  de  paz.  Él podía dar, ella podía dar, y juntos ellos hallarían consuelo y  comenzarían de  nuevo.
Sus manos pacientes le calentaban la piel en donde el frío estaba enterrado tan profundamente que ella nunca lo hubiera alcanzado. Sus labios le decían sin palabras que ella era amada.
Heli  se las devolvió a él, corriendo sus dedos a través de ese sedoso  cabello  rubio , junto con aquellos hombros fuertes. Para tocar, sólo para tocar, el milagro en su vida.
Poco a poco  las  caricias dejaron de ser   dulces  y  ella sintió que su deseo  volvía  abrazarla y  el placer  de estar  juntos   de nuevo explotó .  Sabía que luego de hacer el amor debían hablar, pero   eso sería luego.    Ahora  estaban  ellos  juntos    prometiendo  con sus  cuerpos  lo que  aun  sus  labios no podían decir.    Se  quedaron    abrazados     mucho  tiempo  mientras  la luna  los iluminaba.   Él yació en silencio por un rato, asegurándose que ella dormía sin que la oscuridad ,  ni  sus enemigos  la persiguieran e  hicieran  daño.
Heli  se  despertó ,  aún  era  de noche  y  Seirim   velaba  su sueño — ¿ No puedes dormir?
Seirim soltó un suspiro. — Sé  que hice mal  debí...
Heli  le   tapó    la  boca  con los  dedos.
— Ambos  hicimos  mal. Sabes  estado  pensando  que  debíamos   hacer  unos  votos   como  compañeros.
— ¿  Cómo  hacen los humanos  cuando  se  casan?
— Creo que sí. ¿  qué opinas?
— Te  amo   y  quiero estar  contigo  el resto  de  mi vida.  Te  prometo  escucharte  y     no  tratar  de sobreprotegerte.   Quiero luchar  a tu lado.
— Prometo   no ocultarte  nada   y     amarte  hasta  el fin de mis  días.  Haremos  más votos conforme  cometamos errores.
Seirim le  acarició   el rostro   y  tocó  su barbilla para  sellar   su pacto  con un beso.
— Será mejor  que   durmamos  algo.
— Pero... sigamos abrazados un rato.
—Nos sostendremos, tú y yo.
—  Siempre.  

Esperó que les haya agradado este  fragmento y les deseo un genial  fin de semana. Les  mando un beso 







20 comentarios:

Seveth dijo...

¡Hola!
Me gusta mucho el capítulo. Ánimo y a por el siguiente.
¡Besos!

ellie dijo...

Fantastic Friday read! All the best to your creativity!

Caitlin'nMegan dijo...

So much happening! I like that part of the demons fighting far away in the stadium! All the best to your writing!

Ivy's Closet dijo...

Such an epic tale that's growing more of your great storytelling! Keep writing!

Luján Fraix dijo...

SIEMPRE ANDANDO CAMINOS MI QUERIDA.
CELEBRO ESO, LO COMPARTO, SOMOS IGUALES.
BESOS Y ABRAZOS.

Martyna dijo...

Very nice :)

José Ramón dijo...

Pase a visitarte y desearte un buen fin de semana que disfrutes plenamente Saludos Cuídate

Jorge M dijo...

Interesante este capitulo, muy intenso.
Deseo pases un buen fin de semana, abrazos

Lourdes dijo...

¡Hola Citu! Genial capi muy condimentado de cosillas interesantes. Tramas, intrigas y mucho amor de parte de Heli y Seirim.
Me encanta que estés juntos. En cuanto a Chatel veremos que hace.
Te mando un beso y gracias por el capi.

Sandra Figueroa dijo...

Apasionado este capitulo y que buen final haciendo votos después de la lujuria desatada. Saludos amiga.

Himawan Sant dijo...

Hola, JP. Me encantó el final de este capítulo en el que se acostaron juntos ..., espero con ansias la próxima hermosa historia.
Te mando un beso de amistad saludos.

Fantasía y realidad dijo...

Hola Citu,paso a desearte un bonito y tranquilo fin de semana:)
Muchos besos y cuidate mucho preciosa:)

JUAN FUENTES dijo...

Tenemos la obligación de admirar a la naturaleza

Mava dijo...

¡Hola, Judith!
Definitivamente un capítulo intenso y con bastante intriga.
Me encantó, espero leer pronto el próximo ;)
Un abrazo y feliz domingo.

Rocío G. Tizón dijo...

Muy buen capítulo, sin duda.
Un beso.

Tiffany dijo...

Epa!!! que buen capitulo :3

Un beso amiga desde Plegarias en la Noche.

Justcherry dijo...

Um bom capítulo e um final feliz voltam a se encontrar.
Tenha um dia maravilhoso
Saudações.

Justcherry dijo...

Un buen capítulo y un final feliz se reencuentran.
Ten un día maravilloso
Saludos.

Sunako Chan dijo...

¡Hola Judith! Espero que estés bien. Lo lamento mucho por Chatel por confiar en Naur, que es una bruja muy lista. Utilizar el espíritu de su esposa muerta es terrible. Que lindos son Sei y Heli a pesar de sus dudas. Espero que vuelvan a confiar el uno en el otro. Bueno espero leerte pronto. ¡Un besote!

Mela dijo...

Hola, JP... Bueno, pues Seirim y Heli están felices ignorando los planes de Naur y Chatel
Tengo muy claro que todo lo que hace Naur es por maldad... No puedo decirte lo mismo de Chatel, él ama a su esposa y desea recuperarla
A mí me encantaría que Chatel pudiera ser feliz con Belowen... eso sí, sin hacer daño a Seirim y a Heli
Bueno, ya veremos lo que sucede
Gracias por el capítulo
Besos