Ilumina mi corazón. Capítulo 25 (primera parte)

Hola ¿cómo les  va?  Hoy  les traigo un  capítulo  con èrsonajes nuevos.  Aunque  se  que quisieran saber qué  va a pasar  con  Amelia  y sebastián.   Este fragmento  relata   lo que ocurre  con  Seirim  y si puede  salvar a la princesa  elfa. Entraran  tambien algunos personajes que serán importante  a lo largo de la saga.  

Capítulo  25

Luthien    sintió  que  el corazón    dejaba  de latir , al ver  a su padre  tan enfermo.  Había  extrañado    su hogar   y   a  su  familia. No solo  volvió a  Erembor  para cuidar   a su  padre.  Había  tenido  ciertos  sueños  sobre  un gran ataque, por lo  que  deseaba  hablar  con  Náltucien, la guardiana  de  Seragón.  Su padre  se  quedó dormido    y  ella  salió  de la habitación para que pudiera  descansar .  Se sorprendió  ver  que  Yuri seguía  en el jardín.  Él  fue  enviado  a escoltarla   al  mundo elfico.

Bajo  las  escaleras  de  mármol,  Yuri   parecía aburrido mirando las  diferentes  flores  que estaban en el jardín.

—¿Cómo  está  su padre  alteza?

—Mejor, y  dime  Luthien.  ¿Cuántas  veces  tengo que  repetirlo?

Yuri  pensó   que siempre , ya  que   por lo general se sentía cohibido  con la princesa y  pensaba  que  estaba  mal  esas  familiaridades. Por  dios  los  dos  eran  de distintas  clases  y  de diferentes  mundos

Ella  se  sentó  en un banco  junto   a  una  pequeña  fuente   agua.

—Pensé que ya estarías  en el mundo humano.

—Parece  imposible  no  hay  forma  de  abrir  el portal.  Me dijeron  que esperaba   para  que lo hagan manualmente. Su  hermano el príncipe  Erú iba a llevarme, pero lo llamaron para que  revisara algo.    

Luthien  sonrió   y  Yuri  se  sintió  desconcertado   y  con  ganas  de  sumergirse  en la fuente   para  huir  de  ahí.

— Si quieres  te guio, adoro   los paisajes helados  .  La tierra  que   circunda con los humanos  es  bella  y salvaje. Le  diré  a mi hermano  que  yo  te  acompañaré.

— No, es  necesario que  se moleste  princesa.

— Lo hago  con placer,  espera  ya  vuelvo.

Yuri  recordó  que el mundo  de  los elfos  estaba  rodeado  de  agua cada  frontera.  El  reino  humano tenía como límite   el  mar hielo,  el  reino  infernal  el  mar  de fuego,  el   reino de  Seragon  el  mar  cristalino o llamado también  de los elfos  y  el  reino    de las  almas     mar  de  la luz.       En  medio de ellas  había  un  portal  que se activaba  manualmente,  para ingresar a cada mundo.  Por lo general  cuando los  elfos   viajaban lo hacían   a través de portales  pequeños  activados  por  un mecanismo humano y  magia.

Minutos  después  la princesa  y  su  hermano llegaron junto  a  él. Yuri no  supo qué  decir,  una parte  de  él  estaba  ansiosa  por  irse, pero no deseaba  viajar  con la princesa. Antes que pudiera  decir  algo  un  elfo entró  en el jardín.  Era  un hombre alto   de  cabellos castaños y  rostro  agraciado.  Yuri pensó que era  demasiado    bello y  algo en sus   grandes ojos le  desagrado.  Luthien  hizo una  mueca  y  gruñó  fastidiada.  El príncipe  Eru no mostró  ninguna   señal  en  su  rostro hermético.

El   visitante  recién llegado,  era  el príncipe  del  bosque  sombrío Huor  Telemmaitë , que deseaba  casarse  con ella, a pesar  de  que ninguno  estaba  enamorado del  otro.

— Erú,  buenos  días.  Es  una  gran alegría que estés  de nuevo con  nosotros,  Luthiem. Espero que  tu padre  esté  mejor.

—  Aún sigue  delicado,  gracias por preguntar.  Te presento  a  uno  de mis  compañeros   en los  trece  guerreros  Yuri  Orlloff.

Yuri le  dio la mano sin mucho afán  en príncipe  elfo lo miró con desagrado,   que  disimulo  al  instante  con  una sonrisa forzada.

— Encantado de conocerte  Yuri.

—  Lo mismo  digo  su  gracia.

Se quedaron en silencio un buen  rato.  Luthien  se  sintió incómoda como si fuera  una  muñeca en una  vitrina.   

— Me imagino  que  vas  a ver  a mi hermano  Huor, así que me despido.  Yuri  y yo  vamos a la  frontera  humana para que  pueda  ir  a su  mundo. Parece  que  la magia  de los hechiceros  no funciona.

—  Será  un placer acompañarlos,  vine específicamente   a verte mi querida  Luthien.   

Sin otra  excusa   fueron por     caballos     para  ir  a su destino. Estaban  en las  caballerizas, cuando  un  elfo de  cabellos  oscuros   y  ojos  azules llegó corriendo.  

—  Una persona    en  el  mar  de los  elfos ,  necesita  verla  Luthien.

La princesa   asintió,  se imaginaba  que  Gilraren    quería   hablar  con ella. Como  había  extrañado a  su  amiga.  con una  sonrisa, se  dirigió  al  elfo que le  llevó el mensaje —. Gracias  Eör,  ya   voy   a  su encuentro, puedes marcharte.

Cuando  se  fue  el  elfo  que le dio el mensaje  Luthien  se  dirigió  a hermano y  a Yuri.

— Que pena   Yuri ,  me  hubiera  gustado   llevarte, pero   debo  ver de  forma  urgente  a Gilraren.

— No  se preocupe,  su alteza.  Yo  puedo esperar,  tal  vez  sea mejor  si alguien la acompaña  por su  seguridad.

Luthien   hizo un gesto de disgusto —. No  soy  una  muñeca  de cristal,   que  se  va a romper  al mínimo  roce.  Puedo ir  a  ver  mi mejor  amiga sin que tengan  un grupo de  guardaespaldas.

—  Lo sabemos , pero yo quiero igual  saludar  a Gilraren.  No la he  visto en mucho tiempo. Además,  debo ir  a   Seragón para  consultarle  a  Náltucien  algunos  sueños  extraños que  he  tenido.

—¿Cuáles  sueños?    

Huor    miró  a  Luthien  preocupada, igual que  el resto  de  las personas que se  encontraban  en la caballeriza. Odiaba  ser   el centro  de  atención   Así que    se  fijó en un  hermoso  caballo  blanco.

—He  soñado  que  nuestro mundo arde,   también  algunos    elfos  viejos  han tenido  esos sueños.  Tengo miedo que  sean premoniciones.

Luthien pensó   por  varios minutos luego  sonrió  Yuri para dirigirse  a su hermano y  al príncipe del bosque  sombrío.

— Puedes  venir  Huor,  yo  también  he tenido los mismos   sueños.   Náltucien   puede   decirnos    o  explicarnos  qué ocurre.  

Erú miró     a los ojos  a su hermana y supo que perdería  esa  discusión —Por eso debemos acompañarte.

—Iré  con     Huor   por  el camino  seguro  tal vez  con  otro guerrero,  pero   no quiero  ir  con una comitiva  sé  cuidarme   y  Yuri  debe estar   con     el equipo  que cuida  a Amelia  por  si hay un problema.

Ni    a  Yuri y  Erú les  gusto   la decisión  de la princesa,   pero se  resignaron      a  dejarla  ir  junto a  Huor  que  se sonreía  abiertamente.   

Yuri  y el príncipe Erú  salieron aprisa hacia   el   mar  de hielo.   Yuri  se arrepintió  de  no haber  traído un abrigo.  El frío   apenas lo dejaba  pensar  y  sobre todo la sensación  de  que algo  malo  iba a pasar.  Observó al hermano  de  Luthien   que era muy  diferente  a la princesa .  Era  un hombre    alto,   musculoso con el pelo negro  corto  y    la  expresión  de  su  rostro  no  mostraba ningún sentimiento. Yuri   suponía  que era un buen guerrero  y  se preocupaba por su hermana.  Ninguno  de los dos  habló mucho  por  el camino.     Fue  cuando oyeron  la  alarma       general,  que  decía  que había problemas  Erembor. Ambos  dijeron  al mismo  tiempo   —. Mierda.

Yuri    giro para  ir  a toda la velocidad  que  su corcel  negro  se lo permitía, pero el  príncipe  Erú lo detuvo  con    un silbido.

— Si deseamos llegar a tiempo, no podemos ir    en  caballo. Hay otra forma, pero es un poco peligrosa.

— ¿Qué debemos hacer?

— Erú  despidió a los  caballos sabiendo que llegarían  a  salvo  a la  caballeriza.  Golpeó  tres veces  una gran estaca de hielo apareció a lo  largo  del  camino.    Subieron  con  algo  de dificultad en especial  Yuri que odiaba las  alturas.

Cuando estuvieron  en lo alto  Yuri  indignado preguntó —  ¿Cómo  vamos  a ir a la frontera? ¿En lianas como tarzán?

—  ¿Quién es tarzán?         

Yuri resopló — Un personaje  de  un libro.

— Ah—  dijo  Erú pensando  que    Yuri era algo tonto—. Fuera    más  largo que  a caballo.  No  debemos perder el tiempo.  es magia  elfa antigua  solo se utiliza  mucha  necesidad  porque    necesita  de  mucha  energía. Luego de decir  eso   Erú    cerró los  ojos  Yuri sintió   como  que alguien  electrificara  su cuerpo. Por  arte  de  Magia  fueron  transportados  a  otra estaca, pero  ya  no estaban  en la nieve.  Si no en   un atracadero    con el viento del mar  y sol   del  verano   cubriendolos.  Yuri podía percibir    el aroma salado  del mar.  Sin pensarlo  dos  veces  y  aunque  odiaba   la  altura  se  lanzó  para ir  a  rescatar a la  princesa.

Espero  que les  haya  gustado el capítulo  y les mando un beso